Giré a verle y apretó los puños, caminé hacia nuestra habitación y quité mis botines. Me senté en la cama y hundí mi cabeza en mis palmas. Escuché unas pisadas, pude ver su calzado en frente mío. Me tomó de los cabellos e hizo que le mirara.
—Me lastimas.
Dije empujándolo, él me tomó con más fuerza e hizo mi cabeza hacia atrás.
—¿Qué quisiste decir, ________?
—Nada.
—¡¿Acaso te acostaste con él?!
Levantó la voz, me tiró una bofetada e hizo que le mirara nuevamente.
—¡Dime! ¡¿Te acostaste con él?!
—¿Eso debe de importarte?
—Lo hiciste…
—¡No!
—¡Estas mintiendo!
Me bofeteó nuevamente, tenía que pararlo. Ahora.
—¡No lo hice! ¡James nunca me metió la mano, como lo haces tú!
—Eso no descarta le que hayas abierto las piernas, ______.
Tiró de mi cabello y grité, me tomó de las mejillas con fuerza, mierda. Sentí sangre, esto dolía; una idea me iluminó, sabía cómo distraerlo. Aunque la idea no me agradaba demasiado. Desabotoné su pantalón de tela, tomé el extremo de su camisa y la jale, abriéndola de un tirón. Le toqué el pecho y el cerró los ojos, disfrutando de mi tacto.
—No lo hagas.
Indicó, no hice caso y le baje el pantalón, con él se fue el bóxer. Abrí mi blusa, dejando mis pechos al aire, quité mi brasear y lo tiré. Justin dejó lentamente mis cabellos, bajé mi leggin y la dejé a un lado. Le tomé de la camisa y lo jalé hacia mí, me hice hacia atrás, él se apoyó en los codos y me observo.
—Eres muy exasperante.
Susurró en mi oído, rodee los ojos y traté de sonreír.
—Tú no te quedas atrás.
Besó mis labios, lentamente bajó mi pantie y entro en mí bruscamente.
***
—Te gusta hacerme enojar ¿No es cierto?
—Me gustan muchas cosas, y esa no es una de ellas.
—Eres tan hermosa…
—No es para tanto.
—Te amo.
Me quedé en silencio por unos segundos.
—Hasta mañana.
Justin me apegó a él, acomodé mi cabeza en su pecho y rápidamente me dormí. No quería responderle, solo descansar. A medida de que pasaban los días, me sentía extraña, James venía a visitarme; claro que Justin llamaba cada tres horas para asegurarse de que este allí. James me apretó a su pecho y sonreí, le abotoné la camisa y besé su mejilla.
—Quiero que vivas conmigo.
—No puedo, ya te lo dije.
—Podríamos irnos, volverías a ver a tus padres.
—No trates de chantajearme.
—No quiero eso, pero te llevaría con ellos.
—James…
—_______ puedes dejarle…
—James… Justin es un, demente. Podría hacer cualquier cosa ¿Y si se mata?
—Sería un favor para medio mundo.
—¡Hey!
Exclamé molesta, Bieber puede ser un imbécil, pero no puedo desear que muera. Me dio muchas sonrisas como también lágrimas, pero la muerte… realmente es algo serio. James sonrió, tomé un camisón y me lo puse, caminé hacia James y le di pase hacia la salida. Nos paramos debajo del umbral, James me tomó de la cintura y besó.
—Piénsalo, por favor.
—Lo haré.
Asentí, se inclinó y besó mi frente.
—Te amo.
—Yo también te quiero.
El rio, besé sus labios y cerré la puerta. Me observé por unos segundos, estaba en camisón, acaba de tener sexo con James y Justin trabajaba. Le estaba engañando, bueno… el hizo lo mismo conmigo. Caminé hacia nuestro dormitorio, cambie las sábanas y tendí la cama, dejé las sábanas en el cesto; debería de llevarlas a la lavandería, bueno una razón para salir del departamento. Me recosté en la cama, cogí mi móvil, busqué mis audífonos, me los puse y coloqué música, quería relajarme. Las canciones de la lista de reproducción avanzaban al igual que el tiempo; muchos pensamientos me invadieron ¿Qué pasaría si Justin se entera que me estuve acostando con James? la cama se hundió, giré mi rostro y el me besó.
—Te extrañé.
Susurró.
—Mentiroso.
—¿Por qué?
—No sé, nunca sueles decirme eso.
—Bueno, esta vez sí te extrañé.
—Bueno… si tú lo dices.
Detuve la música y me levanté, quité los audífonos de mis oídos y los enrollé alrededor del móvil. Lo dejé en la mesa de noche y me metí al baño, puse el pestillo y me di una ducha, bueno lo más rápido posible. Al abrir la puerta, me asusté, tenía a Bieber con solo un buzo en las caderas y el pecho desnudo. Di un paso hacia adelante y el me lo impidió. Caminó hacia adelante, empujándome y atrapó mis labios con los suyos.
Me metió nuevamente a la ducha, llevó su mano hacia la llave y la abrió, el agua helada cayó encima de mí y empecé a temblar, el abrió la otra y el agua empezó a calentarse. Arranchó la toalla que tenía alrededor de mí y la tiró al suelo.
Me apegó a su anatomía, hizo que girara y presionó su erección en mi trasero, jadee en el instante. Giré mi cuello y le besé, el recibió mi beso; me arrodillé, bajé su buzo y el bóxer consigo. Tomé su miembro en mano y lentamente lo introduje en mi boca; Justin hizo la cabeza hacia atrás, formando una ‘O’ con sus labios, me tomó de la cabeza hundiéndome más, raspé mis dientes con él y el gimió; pasé mi lengua alrededor de este y sentí un líquido inmediatamente, me levanté, pasé mis lengua por mis labios y me lo tragué, me tomó de la cintura, me atrajo a él y me besó, accedí a su miembro bucal; cuando, unas ganas de vomitar me vinieron. Me alejé de él, cubrí mi boca y traté de salir de allí, sin tropezarme. Me arrodillé en el escusado y me incliné, rápidamente el desayuno se me vino. Luego de unos dos minutos, segura de haber terminado con ello, me levanté; enjuagué mi boca y salí de allí. Justin se quedó parado en el marco de la puerta y no me quitaba la vista de encima, tomé una bata y me la puse, levanté la vista e hice un gesto.
—¿Y eso?
—No sé, no me siento bien.
Me acomodé en la cama, Bieber caminó hacia la cómoda, tomó un buzo seco y se lo colocó. Se acercó a mí, se acomodó en la cama y me abrazo por detrás. Me sostuve de sus brazos, besó mi cuello y pude sentir su sonrisa; bueno eso creo.
—Sabes…
—Qué.
Dije rápidamente, el besó mi mejilla y me hice hacia atrás, luego me giré para poderle ver el rostro.
—Puede que me equivoque o no.
—¿Eh?
No entendía a donde quería llegar con esto.
—______ ¿No estarás embarazada?
