7:10 pm, plena Luna llena.
Sie
Camila: El sol, la luna, la verdad.—rugía por lo bajo.
Las chicas seguían con su trabajo de equilibrio, menos Lauren, ella estaba en completa paz, sin luchar. Miraba el suelo lleno de las hojas secas del árbol al que estaba atada.
___: Klaus, cuida a las chicas, estaré por allá.—señalé donde Lauren. Recibí un "Claro" de su parte.—¿Cómo estás?.—pregunté una vez que llegué con ella. Seguía transformada, unas pequeñas lágrimas bajan de sus ojos, seguro por el dolor.
Lauren: Bien.
___: Estarás bien ahora, ¿cómo lo hiciste?
Lauren: Mi ancla.—soltó secamente.
___: Me parece increíble.
Lauren: ¿Qué?
___: Que tu equilibrio sea ella.—Lauren sonrió un poco.—Ella lo es todo para ti, ¿cierto?
Lauren: Lo es.—afirmó.—¿Podrías soltarme? Quiero acomodar mis hombros en su lugar.—reí junto a ella. Fui al reverso del tronco y comencé a quitar los candados de las cadenas. Una vez listo su cuerpo cayó inmediatamente al suelo.
___: Eres buena.—la levanté y la apoyé contra el árbol.—Te acomodare este primero.—toqué su hombro izquierdo, y sin decir más, lo acomodé.
Lauren: ¡Mierda!.—gritó.—Pudiste avisarme.—rugió.
___: Lo siento, va el otro.—asintió. Está vez no gritó.—Bien, levántate, te quitaré la corona.—llevé mi mano a el tornillo del medio y comencé a soltarlo poco a poco.
Lauren: ¿De donde sacaron estos artefactos?
___: Van de generación en generación, no podría decirte.—ya estaba completamente suelto. Tomé la corona por sus demás tornillos y la quité.—Puedes entrar a casa y limpiarte la sangre que escurre de tu cabeza.
Lauren:.—asintió.—Gracias.—un rugido enorme y fuerte interrumpió nuestra conversación, era Zendaya.
Corrí hacia donde estaba. Se encontraba de rodillas y rugía mientras me miraba.
___: ¿Qué te sucede?.—pregunté una vez que una lágrima cayó de su ojo.
Zendaya: No soporto ser un monstruo.—sollozó.—No decidí serlo.
___: Hey, escúchame.—me puse en cuclillas para estar a su altura.—No eres un monstruo, eres un hombre lobo. Sé que no decidiste serlo, pero lo eres, y morirás siéndolo. Te conocí ayer y no eres la Coleman que me seguía, eres fuerte. Ahora, dime una vez más, ¿cuáles son las tres cosas que no pueden ocultarse?
Zendaya: El sol, la luna y la verdad.—jadeó.
___: Bien hecho.—acaricié su espalda en forma de compasión.—Ya estás lista.
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Horas después
1:10 am, Freitag, September 11
Viernes en la madrugada, observaba a Mila dormir desde su puerta, sufrió mucho hoy, pero pudo controlarse. Me partió el corazón cuando gritó que la soltara.
Flashback
Camila: ¡Ya por favor!.—sollozó.—No aguantó más, me duele mucho.—su llanto era demasiado fuerte. Era la última atada.—Ya quiero dormir.—lloriqueó.
Fin del Flashback
No sé qué clase de conexión tengo con Camila, pero es demasiado fuerte, es como una mezcla del amor que le tengo a Morgan combinada con la de Klaus y finalmente surgiera en ella.
Es la segunda chica por quien mataría.
