Mimado

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La voz del moreno resonó en su oído una y otra vez cuando lo penetró con voracidad y deseo.

Jin no paraba de gemir y tomar las sabanas en busca de retener todo lo que su cuerpo sentía. Sus ojos se encontraron con los de Namjoon, que pasaba su lengua en los labios tratando de humedecerlos mientras abría más sus piernas y pasaba una de ellas en su hombro. Era un cavernícola buscando marcar territorio en su cuerpo.

La espalda del castaño se arqueo cuando Namjoon por fin dio con su próstata y golpeo una y otra vez en el mismo lugar hasta buscar que se viniera. Un gemido ahogado y liberal salió de su boca cuando se corrió.

Namjoon fue abordando lentamente todo su cuerpo, besando cada parte de él hasta buscar su boca y robarle lo que le quedaba de aliento.

Por instinto, las manos de Jin dieron en el cabello platinado y suave de Namjoon, enredando sus dedos ahí mientras el moreno seguía penetrándolo hasta que se vino dentro de él.

Se separaron en busca de aire. Sus ojos observándose con miedo, pero a la vez interés en lo que pensaba el otro.

Namjoon: Esto... también te lo compensare. - El moreno se levantó, saliendo de Jin rumbo nuevamente al baño. -

Ante su desnudes y uso, Jin se sintió sucio y expuesto. Pensamientos que fueron interrumpidos por Namjoon, quien salió envuelto en una toalla, lo levanto y lo metió en una tina llena de pétalos de rosas y jabón perfumado.

Las manos del alto viajaban por el cuerpo de Jin, limpiándolo delicadamente.

Era extraño, pero se sentía bien. Estaba siendo mimado y cuidado. Fue por lo que sus ojos miraron algo diferente a Namjoon quien no decía nada, limitándose a asearlo.

Las manos del alto pararon su trabajo, limpiándose el jabón, dejando algo confundido a Jin quien se había acomodado.

Namjoon: Buscaré algo de ropa para ti, saldremos a pasear.- Antes de que Namjoon saliera, sus ojos se dirigieron a la intimidad del castaño, quien lo notó.- Deberías limpiar también aquella zona.- Una risa retorcida salió de él.- Al menos que quieras que lo haga yo... pero no te prometo nada más limpiar.-

Jin trago en seco, hundiéndose en la tina para calmar el calor que había subido en su cuerpo.

...

En el auto, Jin observaba por la ventana mientras Namjoon leía algunos papeles de su trabajo, eso lo supo el castaño cuando observaba debes en cuando el reflejo del hombre por la misma ventana.

Jin: ¿A dónde iremos? -Fue lo que dijo cuando vio a Namjoon despegar sus ojos de los papeles –

Namjoon: Quiero comprarte ropa. No siempre usarás la mía.

-Jin volteo a ver al platinado, negándose- Puedo ir a mi casa a cambiarme y de paso traer algunos cambios.

-Namjoon río, negándose al pedido- No es por ofenderte, Bae, pero tu ropa no es muy bonita que digamos.

-Jin quedo serió frente al comentario. Tampoco iba a enojarse por el insulto. Sabía que su contratista era rico y al parecer, todo lo que usaba debía verse bien- Si llego aceptar, me gustaría que toda esa ropa se quedara en tu apartamento, incluso hasta el final de nuestro contrato.

-La sonrisa de Namjoon se espumo, viendo con frialdad a Jin- ¿Cuál es el siguiente empleo que me desearás mostrar? – Jin se dio cuenta que había tocado nuevamente un punto crítico. -

-Jin suspiro medio rendido- Ya que iremos de compras, necesitare un tipo de ropa para lo que voy a hacer.

-El platino, medio sonrió con su triunfo al chico que apenas conoció hace tres días- Llévanos al Centro Comercial- Le dijo al chofer que le dio media vuelta al auto-

Open your legsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora