Open your legs

Verdad

Jimin había tomado la mañana libre con la intención de huir de los acontecimientos de la noche anterior con Yoongi. El chico, después de que terminaron de besarse, lo miró con odio y salió del consultorio sumamente enojado. Por si fuera poco, él se quedó estático en su lugar. Poco tiempo después salió a hacer su rutina, y cuando se dirigió a la habitación de Yoongi a checar su condición, el joven se encontraba dormido.

-Jimin, se quedó sentado en la silla por unos momentos, admirándolo- ¿Tan mal estuvo? – Fue su pregunta sin respuesta. O, mejor dicho, sabía la respuesta. Yoongi amaba a alguien como para dejarse llevar por él, pero ese alguien estaba haciendo cosas mucho peores y Jimin no pudo evitar sentirse molesto, saliendo de la habitación y ahora, debido a ese sentimiento, se encontraba enfrente del departamento de Namjoon, tocando como un loco para que le abrieran.

Namjoon empezó a removerse en la cama por todo el escándalo. Buscó con sus manos el cuerpo de Jin, pero no lo encontró. Se levantó de la cama buscándolo por toda la casa. Sin embargo, no había rastros de él. Cuando escuchó nuevamente el timbre, una sonrisa se posó en su boca al pensar que tal vez Jin salió y era él el que estaba tocando.

Namjoon: ¿Olvidaste la contraseña, Jin? -Pero su sonrisa se borró al no ver al nombrado enfrente de él, sino a Jimin- ¿Qué haces aquí?

-Jimin mordió su labio para no gritarle al hombre que parecía decaído por no ser Jin. Comenzaba a pensar que todos aquellos que le interesaban, estaban atraídos por ese chico- Precisamente a él vengo a buscar.

-Namjoon caminó hacia la sala, dejándose caer en el sofá- ¿No escuchaste lo que dije? Eso quiere decir que no está aquí.

Jimin: Pero sabes dónde vive.

Namjoon: ¿Y por qué demonios te lo diría?

-Jimin bufó al querer calmar su enojo- Su novio despertó y quiere verlo. No he podido contactarme con él.

-Namjoon empezó a reír- Tu quisiste cuidar a ese mocoso cuando yo había puesto a alguien a su cuidado mientras me divierto con su amante. ¿Ahora vienes a quejarte conmigo porque ya no lo quieres hacer?

Jimin: ¡Él quiere ver a Jin, Namjoon! ¡Deja de ser un maldito imbécil y hazte a un lado para que se reúnan!

-Namjoon se levantó del sofá, yendo hacia Jimin que fue retrocediendo hasta que quedó atrapado en la pared con los brazos del alto rodeando sus lados- ¿Y si no quiero?

-Jimin enarcó las cejas al ver la expresión de ira en el platinado, pero también había algo más- Namjoon, tú... - El rubio intentó acercar sus manos al rostro del hombre para relajarlo, pero este se alejó-

Namjoon: Él no está aquí, y tampoco te diré en donde vive. Debiste hurgar en el expediente de ese niño si querías saberlo... pero creo que eso no era lo que buscabas- La expresión de Namjoon era una juzgadora, que hizo a Jimin apretar sus puños y guardarse sus palabras, saliendo del departamento- Que demonios me está pasando; que estoy haciendo.

Jin, salió del departamento muy temprano. Había regresado a su casa con la intención de limpiar en lo que cargaba su celular. Una vez esté encendió, observó todas las llamas perdidas que tenía del hospital. En su vista hacia abajo, encontró las fotos de él y Yoongi en la basura. Las sacó con culpa de ahí y las limpió para ponerlas después en donde estaban. Sus propios sentimientos de culpa lo llevaron a tomar su mochila y salir rumbo a el hospital. El castaño, lo primero que hizo fue preguntar por el paradero de Yoongi, donde lo llevaron al lugar que actualmente se encontraba recibiendo terapia.

Cuando los ojos de ambos se conectaron, se vieron sin perder de vista cada parte del cuerpo del otro. Jin fue el primero en sonreír, pero Yoongi no lo hizo. Después de recibir su terapia se fue en sillas de ruedas a su habitación, en donde segundos después entró el alto con una expresión tranquila y feliz.