Gustar

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Namjoon estaba en su oficina, terminando de leer los últimos informes de los equipos que su compañía acababa de crear: celulares, audífonos inteligentes, bocinas con mejor calidad... Romper todo aquello era un martirio, fue por lo que decidió crear sus propios aparatos, y con ello, crear una fortuna fuera del negocio familiar, el cual, también llevaba a la cima: una industria hotelera con extensión a casinos. No obstante, sobrellevar ambos negocios era un golpe de estrés mayor.

Suspiro con cansancio cuando termino de leer y firmar el último informe, y con ello, una llamada llego a su celular.

Ver el nombre de registro de la llamada entrante nunca le había traído tanta alegría.

Namjoon: ¿Qué sucede?

Jin: Estoy aquí, pero las recepcionistas me dijeron que no puedo pasar.

-La sonrisa de Namjoon se esfumo, apareciendo su perfil frío- Iré de inmediato.

Jin: No es necesario, solo diles que me dejen subir.

-Namjoon soltó una risa de burla, subiendo al elevador- Necesitaras más que un pase platinado de ahora en adelante, Jin.

-La llamada termino, haciendo sentir más inquieto al joven- Dijo que viene en camino.

Las mujeres se observaron con un poco de incredulidad. Si su jefe realmente bajaba por ese elevador, estaban perdidas. Pero, lo que realmente paso no fue la perdición, sino el miedo y desesperación por no querer perder sus trabajos ante la frialdad con las que las trato Namjoon y acto que Jin lo detuvo. Ahora ambos se encontraban en la oficina del moreno.

-Jin observo su nuevo celular- La próxima vez pasa tu celular por el identificador de la entrada, así no tendrás que toparte con ellas de nuevo.

Jin: Debiste haber hecho esto y no provocarles a esas dos empleadas una hipotensión.

-El moreno ni siquiera le contesto, este solo estaba fijo en la caja rosa que el castaño cargaba- ¿Ahora que será?

-Jin se alejó cuando Namjoon intento acercarse- Lo sabrás cuando estemos en tu departamento.

-Namjoon camino hacia su escritorio, tomando asiento, viendo con lujuria a Jin- ¿Y porque no aquí?

-Jin miró el elevador que estaba detrás de él- Alguien puede entrar... No me agrada la idea. Vamos a tu departamento.

-Namjoon sonrío con malicia, apretando un botón desde su escritorio que apago el elevador- Ahora nadie podrá subir.

-Jin miró las puertas y apretó la caja rosa- Mi cuarto trabajo fue muy vergonzoso. Yoongi me pidió renunciar del Yoga, pero N me recomendó con un amigo debido a que le dije que debía seguir trabajando.

-Namjoon seguía emocionado con la nueva historia- Prosigue.

-Jin camino hacia uno de los sillones de la sala de juntas que tenía Namjoon en su oficina. Este miró de reojo a Namjoon antes de empezar a quitarse la ropa- Su amigo, tenía una cafetería muy peculiar, con...

-Namjoon trago saliva cuando Jin solo estaba en ropa interior- Una buena paga... lo sé.

Jin asintió, abriendo nerviosamente la caja, sacando de ahí un vestido chino que se cernía en su cuerpo y dejaba ver una de sus piernas por la abertura que este tenía.

El castaño, se sintió cohibido ante la mirada penetrante del moreno, y sin tapujos, dijo lo que en aquel entonces estaba acostumbrado a decir en el café cosplay donde trabajo.

Jin: Amo, desde ahora, yo seré tu sirvienta.

-Una sonrisa de lado se mostró en los labios de Namjoon, indicándole con un dedo que fuera a él- Esto es realmente sofocante -Los pies descalzos de Jin lo llevaron a su amo, el cual, lo sentó bruscamente en el escritorio sin importarle los papeles que anteriormente había revisado y firmado. Estos ahora estaban completamente arruinados- Tú... -Una de las manos de Namjoon se escabullo por la abertura del vestido, haciendo jadear a Jin, quien tomó de los hombros al moreno- Eres jodidamente excitante para mi cuerpo- Los labios de Namjoon, consumieron de un bocado los de Jin cuando aquella mano tomo la hombría del chico y la apretó. Sin embargo, su acto no quedo ahí. Esa misma mano empezó a masturbar a Jin que peleaba por respirar y seguirle el ritmo a su lengua. El chasquido que hacían ambos ya lo había puesto duro. En esos momentos Namjoon se sintió un vil cavernícola, rompiendo la ropa interior de Jin que salto en su lugar ante el acto-

Open your legsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora