Inazuma Eleven Go "Nuevos Amigos...Nuevos Amorios"

Capítulo 35

Unos hermosos ojos azules se abrían pesadamente al contacto de la luz del sol en sus párpados. Sol Daystar un chico de 15 años, ingresado en el hospital Inazuma, que se despertaba de su sueño.

- Las doce del mediodía... ¿Por qué rayos tengo que dormir tanto y no puedo despertarme temprano, como la gente normal? - Decía el peli-naranja levantándose pesadamente de su cama y estirándose.

- Porque debes descansar - Le respondió la enfermera Camelia por detrás asustando a Sol.

Daystar dio un brinco enorme, de medalla de oro, por lo bajo...

- WAAAA!! ¡¿Porque tienes que estar todo el día detrás de mi presencia?!

- ¿Te crees que te dejaré solo para que te escapes otra vez? - Dijo Camelia con una linda sonrisa.

- No digas esas cosas, solo lo hice un par de veces - Decía el oji-azul rascando su nuca nerviosamente.

- ¡¡Un par de veces!! ¡¡Ayer lo hiciste 5 veces!!

- Pero es que me aburro aquí encerrado.

- ¡¡Lo sé!!... ¿Por qué no vas a ver al nuevo chico que llegó al hospital?

- ¿Al chico nuevo? - Preguntó ladeando su cabeza.

- Si, el de la habitación 245.

- Bien, anda a verle entonces, lo que es yo me voy a hacer mi ronda... ¡¡Adiós Sol!!

Camelia se retiró de la habitación de Sol, dejando a este solo, inverso en sus pensamientos y con gran ansiedad de conocer a esa persona.

- ¿Voy a ahora o más tarde? - Se preguntó en voz alta.

- Voy ahora mismo, ¡¡quiero conocerle ya!! - Salió corriendo de su habitación, estaban en la misma planta, Sol estaba en la habitación 270, y el amigo de Víctor en la 245, así que le quedaban cerca.

A paso veloz fue a esa habitación, ya estaba frente a la puerta, nervioso y a la misma vez ansioso.

- ¿Puedo pasar? - Preguntó detrás de la puerta.

- Adelante - Contesto amablemente con una sonrisa.

Sol abrió la puerta de un solo golpe y se acercó rápidamente a la cama del de rulos, se sentó en un sillón que estaba a un lado.

- Hola - Dijo nervioso el de cabellos naranjas.

- Hola, mucho gusto... - Contesto el moreno.

- Soy Sol Daystar... ¿Y tú?

- Pues soy Dorian Reyes... Un placer conocerte Sol.

- Lo mismo digo... Espera.

- ¿Esperar que...?

- Tu nombre me suena de algo... ¿Dónde lo he escuchado? - Se preguntaba a si mismo Sol, Dorian se puso tenso al instante.

- ¿Eres un imperial? - Preguntó Dorian a Sol.

- Si ¿Y tú? - Contesto con una sonrisa.

- Por eso es que te suena mi nombre...

- ¡No me digas que tú eres...! - Sol ya se había subido al sillón y apuntaba a Dorian.

- Si yo soy ese Dorian... No le digas a nadie, por favor...

- Claro... ¿Víctor lo sabe? - Decía Sol mientras se sentaba como niño grande.

- No y tampoco quiero que lo sepa... Aún no es el momento...

- ¿Cómo sabes que no es el momento? - Dorian abrió sus orbes como platos.