[ Dabi boyfriend goals ] ©

[ Diez ]

[ N/A: Actualizaremos el libro de Hawks y Dabi por el DabiHawks Week que empieza hoy, espero lo disfruten. Trabajo muy duro, como un esclavo. ]

♡   En la intimidad Dabi llega a ser muy... mimoso.

( Day 1  —  Fluffy )

( Hybrid AU! )

Dabi despertó al oír el ruido del seguro de la puerta ser removido. Parpadeó un par de veces, acostumbrándose a la escasa luz, deberían ser algo más de las nueve de la noche, se había quedado profundamente dormido. Se levantó de la cama con pereza, espabilando un poco y sacudiéndose.

Dio pequeños saltos cual venadito en pradera para poder ir en busca de su _________________.

La expresión de Dabi se oscureció al oír un par de pisadas extras a las usuales de su pareja. Aún era algo temperamental, por lo que no le hizo nada de gracia tener que transformar su apariencia para poder ir en busca de ella.

—... lamento esto, podía jurar que los planos estaban en mi oficina —habló _________________, dejando su maletín sobre el sofá—. ¿No gustas una tacita de café?

—¡Vete a la mierda, mujer descuidada!—explotó Bakugou, retorciendo sus manos—. ¡Pero antes de irte, dame mis planos!

—Bueno, bueno. Pero no te enojes —murmuró, guiando a su colega hasta su oficina.

—¡Eres una-...! ¡Ahg! ¿Qué mierda es esto? —gritó Bakugou, alzando su pierna y viendo aquella bola de pelos negra, sucediéndose con la esperanza de poder tirarla—. ¡_________________, sácame esto!

—¡Dabi! —exclamó al ver a su pequeño pomerania mordiendo el pantalón de su colega—. ¡Basta, Dabi! —regañó, tomando a su mascota entre brazos—. Mouh~, ¡Katsuki, asustaste a mi bebé!

—¡Esa mierda no es un bebé, es un maldito monstruo y... quemado por lo que veo! —bramó enojado al ver el dobladillo perforado de su pantalón—. Ahora me debes un traje nuevo... ¡Y es un original de Zegna!

—¡Bark, bark! —ladró Dabi, molesto.

_________________ acarició las esponjosas orejas del cachorro—. Aquí están los planos —murmuró con enojo, tomando el tubo de plástico con una mano y a Dabi con la otra, odiaba que comentaran acerca de su apariencia—. Te lo compensaré en Osaka.

—Uhm —sonrió, viendo con malicia a su compañera—. Bien, tú pagarás la cena de ese restaurante del que tanto habla You —musitó, Shindou llevaba algo más de una semana en la provincia—. Y te enviaré la factura del sastre por esto.

La estancia de Bakugou no duró más de treinta minutos, pronto se encontró calzando sus zapatos para poder irse.

—You dijo que había buena comida ahí —comentó la menor, la empresa había mandado a Shindou y a otra colega para empezar con el proyecto—. Y al fin podremos relajarnos. Osaka debe tener buenas aguas termales, dios, siento el cuerpo contracturado.

—¿Conseguiste a alguien con quien compartir habitación? —preguntó Bakugou ya afuera.

—¿Por qué? ¿Quieres compartir habitación conmigo? —bromeó _________________.

—¡Claro que no, mujer estúpida! —gritó Katsuki, alzando un puño—. ¡Pensaba que al fin conseguiste pareja! ¡Pero ya veo que no, fea! —bramó, alejándose a pasos grandes.

No fue hasta que el elevador se cerró por completo que dejaron de oír los gritos de Bakugou.

—¿Bark? —ladrido confundido.