#2GO FULL MOON || MARKBAM/JACKBAM

🌗24🌓

Decir que habían destrozado el lugar era optimista. La ropa y comida estabas tiradas por doquier, se habían molestado en buscar hasta dentro de las latas. ¿Qué podríamos ocultar en una lata de sopa?

─¿Cómo habrán podido encontrarnos? ─pregunté desconcertado. Era imposible que Sanjoy hubiera podido encontrar ese lugar, a menos que supiera exactamente en donde buscar.

─Alguien tuvo que habérselo dicho. ─Suspiró pesadamente─. Todo apunta en mi contra por haberme ido, se supone que yo debía estar aquí, vigilando.

Fui hasta él y le acaricié el brazo. Me sentía terrible por haber pensado lo mismo. No tenía justificación. Pero ahora estaba seguro que el no habría hecho nada en nuestra contra.

─Sé que no nos traicionarías.

Asintió levemente aunque aún podía notar su vergüenza y tristeza.
Decidí dejarlo solo por un rato, yo no parecía de buena ayuda así que mejor empecé a poner un poco de orden. La ropa al menos estaba entera, sucia, pero entera. Al querer levantar una camiseta ésta se había atorado en una de las llantas de la moto de Jackson (la cuál también estaba volcada), tiré de ella pero no cedió. Busqué con mis dedos por el borde para poder liberarla y un destello verde saltó a la vista. Era más bien un parpadeo de luz.

─Tiene que ser una broma ─dije. Y llamé a Jackson─. Dime qué esa luz es parte de tu motocicleta y no un dispositivo localizador.

Maldijo con palabras que esperaba nunca diga frente un adulto y lo arrancó. Supuse que no era parte de la moto.
Lo tiró al suelo y alzó el pie.

─¡Espera! ─lo detuve─. Tienes que pensar, Jack.

Me miró sin entender.

─Mi pensamiento me dice que debemos destruir esto para que dejen de seguirnos.

─Bueno, tampoco quiero que nos sigan. Pero podrían seguir algo más ¿no crees? Despistarlos.

Sonrió. Alzó el aparato (era del tamaño de una moneda) y caminó hacia la entrada de la caverna. Se detuvo y me miró con el celo fruncido, se veía preocupado.

─Estaré bien.

Asintió pero parecía tratar de convencerse a sí mismo de que era verdad.
Jackson tardó más de lo que pensé pero cuando volvió, en silencio, me ayudó a recoger. Por ratos le miraba. El parecía no notarlo, simplemente seguía con su tarea de seguir colocando las latas en un contenedor. Su cabello oscuro caía suavemente sobre su rostro, enmarcando sus rasgos y acentuando la determinación que desprendía. Mark y Jaebum no eran los únicos que estaban enfadados. Por lo general, Jackson se guardaba para sí sus emociones, como si tuviera miedo que, al mostrarlas, ya no fuera capaz de controlarse. Aunque había mostrado un poco la noche anterior cuando se había peleado con Mark, pero después había vuelto a tomar control sobre sí.

Desde la reunión de Naugdae ville había sido demasiado abierto conmigo. Me había revelado algunas de sus vulnerabilidades y de sus ambiciones, también parte de su lado salvaje que hacía que fuera tan único.
Él me había permitido conocerle. Y lo agradecía.

Para cuando logramos poner un poco de orden, yo había comenzado a sentir un poco de claustrofobia. Tomamos unas barritas de proteínas y un par de botellas de jugo que se guardaba para emergencias cerca del acuífero dentro de la caverna, y salimos. Subimos una ligera pendiente desde la que había unas vistas espectaculares del parque, iluminadas por la luz de la media luna.

─Queda menos de una semana ─dije en voz baja, refiriéndome a lo poco que faltaba para la siguiente luna llena─. ¿Crees que podremos regresar todos a salvo?