Una Tía que solía ser la oveja negra de la familia.
Una madre que solía ser la hermana perfecta y amargada.
Una pequeña pelirroja con 5 años que deben cuidar...
Sin palabras para la sobrevivencia sólo. Suerte.
Después de cerrar la puerta baje a Michelle de mis brazos yo estaba furiosa no podría creer que esto estuviera pasando.
-Michelle: ¡Eres mala corriste a mi tía!
Abrí mis ojos sorpresivos ahi estaba una pequeña cuestionandome a mi a Paulina Thompson la que ah vivido aparentando y tratando de no ser un mal ejemplo o al menos hasta hace 6 años.
Hace seis años era perfecta ante los ojos de los demás.
No era cualquier nenita que me cuestionaba era mi hija y eso duele más que nada.
-Yo no la corrí ella se fue porque quiso.
Me agache a su altura, tome sus manos para hablar mejor con ella pero estaba con su pequeña carita roja de tanto llorar, sus ojos estaban hinchados y sus mejillas húmedas.
Baje mi mirada a sus brazos y las marcas de mis dedos estaban ahí en sus pequeños bracitos blancos que muy pronto serían moretones.
Recordé que apenas hace unos minutos yo misma la había jalado fuertemente para separarla de su tía de mi hermana de mi hermanita.
¿Joder que eh hecho?
-Michelle: Yo la quiero mucho, eres mala mamá ya no te quiero.
Se subió corriendo y se metió a su cuarto ¡Vaya no sabía que las palabras de una niña de 5 años me dolieran tanto!
En ese momento me sentí una verdadera mierda, había lastimado a mi hija sin razón aparente le había dejado marcas, había echo eso que tanto odiaba ver en los juzgados de lo familiar.
Volví a lastimar a mi hija como cuando tenía un mes de nacida.
Maldita sea, nunca debí ser madre.
Inicio de semana
Michelle
Había estado triste desde que mi tía se fue, mamá estaba sería y casi no me hablaba creo que está enojada conmigo.
Me trajo al kinder y se fue sin darme un beso eso me ponía muy triste, mi tía era muy cariñosa a cada rato me besaba abrazaba o hacia cosquillas pero ahora no estaba.
Antes que sonará el timbre de entrada estaba jugando con Denisse en el lodo, había llovido estos días así que hacíamos pasteles de chocolate y en eso vino Tamara.
-Tamara: Ahí está la chupa dedo y la boba.
-Denisse: Tu eres la boba.
-Si además tu mojas la cama.
-Tamara: Ya te dije que eso no es cierto, además mirense están llenas de lodo la maestra la a va a regañar por entrar cochinas.
-Denisse: Ahorita vamos al baño y nos limpiamos.
Voltee y le saque la lengua a Tamara, estaba enojada porque mamá no me había cantando en la noche ni había echo el ejercicio anti-pesadillas estos días.
Ya no me quiere mi mamá.
En eso vimos que llegaba una niña nueva con su papá de la mano pero esta niña era rara era muy muy morena, su cabello estaba hacia arriba y corto.
Aunque su vestido era bonito y hacia juego con su moño.
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