Los Hermanos Cipher (Billdipp) (Philldipp) (Dippwill)

Cachorro (Dippwill)

Will Cipher, el menor de los tres, al tener una actitud calmada y tranquila prefería trabajar en un refugio para animales abandonados, su buen ánimo y amor a los otros le hacía ganar a cualquier persona o animal que se le acercará, el era demasiado querido para todos e igual por sus hermanos aunque no lo aceptaban.

El vivía la mayor parte del día en aquél refugio, le encantaba estar allí y por supuesto que todos amaban su compañía, un día sin más en aquél pobre refugio llegó un pastor alemán, un cachorro descuidado y herido, cojeaba de su patita delantera siendo recibido por el peli azul que al verlo le cargó sonriendo.

- Que lindo cachorrito. - Al levantarlo el cachorro asustado intentaba soltarse pero unas suaves caricias del menor lograron calmarlo haciéndolo sonreír. - Quedarás tan bonito que en pocos días tendrás una buena familia que te va a llenar de amor. -

Al entrar al refugio llevó directo al cachorro a la ducha, le dió un baño y con mucho cuidado trato la herida para darle de comer, miraba como el cachorrito sonreía, por ello amaba el trabajo, tenía muchos amigos animales, mejor que los humanos en su punto de vista.

En el colegio habían varios chicos que disfrutaban de golpearlo por ser menor, pero no contaba eso a sus hermanos por temor a lo que hicieran, el cachorro aprovechando su distracción salió corriendo a la calle ladrando enérgico, el azulado cuando volvió a la realidad salió corriendo tras este para sin notarlo chocar con alguien y caer al piso.

-L-lo lamento mucho señor. - Se disculpó apenado esperando un golpe o insulto por su torpeza, el creía merecerlo.

- No te preocupes enano, ten más cuidado, es molesta tu torpeza, me supongo que no tiene límites. - Su voz sonaba demandate, con un toque de elegancia y autoridad en ella.

- L-lo siento joven Gleeful, n-no era mi intención molestarlo. - Se encogió en su lugar, Mason Gleeful, el lo conocía perfectamente pues era el quién era el "Líder" De tantos maltratos e insultos a su persona.

- Como sea, no me quites mi tiempo idiota, tengo cosas que hacer. - Le mira para levantar al cachorro y dárselo. - Me supongo que es tuyo. - Recibió un suave asentimiento por parte del azulado. - Como sea. - Al entregarselo sus dedos rozaron suavemente sintiendo un leve golpeteo en su pecho.

Los segundos de ambas miradas azules juntas eran lentos y en un silencio nada incómodo, molesto el mayor se apartó dejando al azulado confundido.

- Mañana quiero mi tarea completa estorbo, adiós. - Sin decir más se alejó en silencio.

Puede que aveces un cachorro sea un buen amigo, puede que solo sea un inicio....puede...que tal vez sea un sentimiento creciendo en el pecho de estos.