Golpe de realidad

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Sostenía la instantánea sin poder dejar de mirarla. Al la había tomado justo cuando Miles había llegado al número tres y (para bien ó para mal) había impedido que tomara la otra foto del interior de mi crop top. Lucíamos como una pareja, de hecho. Parecía un comercial de la nueva campaña de alguna marca de ropa cara en la que ambos modelos parecen vivir un apasionado romance. La foto en sí no mostraba mucho pero, transmitía demasiado. Miles me miraba y susurraba algo en mi oído y yo sonreía viendo alguna parte de su camisa, sus brazos alrededor de mí, mi mano en su pecho; juntos contra la pared.

Me había costado trabajo aceptar que después de ese día quería a Miles tan cerca de mí como fuera posible, habíamos intercambiado números por fin y conversamos casi todo el día y el que siguió a ese. También, había enviado varios textos a Alex quien había recuperado su teléfono y demostrado que estaba muy agradecido por ello y por el hecho de haber sacado a Arielle del terrible malentendido. En realidad todo había estado bastante bien hasta que se le ocurrió pedirme un gran favor; el número de Amy.

"No se supone que tienes novia Alexander?"

Respondí a su mensaje de forma casí inmediata, indignada ó algo parecido.

"Es sólo su número, no es como si me fuera a aprovechar de tu linda amiga"

Contestó un poco después, no sé qué me molestaba más, el hecho de que me pidiera el número ó que se refiriera a ella como mi "linda amiga"

"Tendré que preguntarle si puedo darte su número antes, sólo para estar segura"

Respondí después de meditar las opciones que incluyeran no darle el número de Amy al maldito guapo y escogiendo la más convincente.

Al respondió casi de inmediato:
"Suena razonable. Si lo haces te deberé un favor"

Después de todo creo que podría llegar a usar ese favor alguna vez.

La tarde del sábado pasó dolorosamente lento y estaba llegando al punto en que todas las ideas se habían agotado y ya no soportaba más estar sola, necesitaba contacto con el mundo externo y la idea de llamar a alguien cada vez me parecía más viable pero no sabía a quién ó en realidad, sólo trataba de evadir la respuesta.

- Hola hermosa ¿cómo estas? -respondió la voz encantadora y con acento que tan nerviosa me ponía.

- Muy bien Miles ¿y tú? ¿Qué haces? -respondí en mi voz más alegre, la que se activaba cuando de Miles Kane se trataba.

- Bien, gracias. Iré a cenar con el señor Turner aquí presente ¿tienes algo que hacer? ¿gustas acompañarnos? -preguntó como si pudiese leer mis pensamientos.

- No de hecho no tengo nada ¿seguro? No quiero molestar -respondí haciendo como si pensara en su propuesta por unos segundos cuando claramente no tenía nada que pensar.

- Seguro, Al está de acuerdo ¿no es así? -preguntó y pude oír a Alexander saludarme y aprobar la invitación- ¿qué dices?

- Muy bien, entonces los veo en el restaurant ¿cuál es? -pregunté esperando conocer el lugar al menos por el nombre.

- De ninguna manera cariño, vamos por tí a tu casa. Te vemos en 20 min. Okay? Ciao.

Salté del sillón de inmediato y corrí a la habitación para buscar un outfit decente para la ocasión, no tenía idea de a qué tipo de lugar tenían planeado ir por lo que opté por algo clásico; disco pants azul marino, botas negras de tacón, chaqueta negra y la camisa blanca de Kenzo que tanto me gustaba y que Amy no había podido prestarme nunca, hoy era la ocasión. Le avisaría en un mensaje luego. Mi rubia amiga estaba en lo que en sus palabras era "una fase" en la que compraba ropa de diseñador. Yo sabía perfecto que no era una fase y que ese hábito había llegado para quedarse pero ella insistía en negarlo, e incluso, había mandado varios regalos a México con la intención de sobornarme y obligarme a no molestarla; Botas negras de Balenciaga y un Love ring de Cartier. El sólo pensar en el dinero que había gastado me hacía sentir culpable por la pobreza mundial y a la vez muy contenta por que (a juzgar por lo que gastaba) su esfuerzo y trabajo eran muy bien remunerados.

La Escapista (Alex Turner fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora