Edith es una chica espiritual que parece haber encontrado su camino y propósito en la vida tras muchas dificultades.
Jerak es una caja llena de sorpresas que se verá extrañamente conectado con ella.
Juntos activarán su don oculto y recuperarán su p...
Pequeñas piedras impactaban contra la ventana de la habitación de Edith. El sol empezaba a teñir todo con su bonito color anaranjado del amanecer, los pajaritos cantaban y...otra vez el sonido de las piedras impactando contra el cristal.
La pecosa nariz de Edith se arrugó voluntariamente por el sonido que empezaba a molestarla. Se incorporó en la cama medio dormida todavía y giró su cabeza hacia la derecha para ver por la ventana que tenía justo a su lado.
Se quedó observando unos segundos, por un instante pensó que seguía soñando, pero no. Se frotó los ojos con las manos y volvió a enfocar su mirada.
Su primo, al que hacia años que no veía, pero lo quería como a un hermano ya que pasaron su infancia jugando juntos, estaba fuera, saludándola con una expresión de felicidad en la cara. Había otro chico a su lado, tal vez un amigo suyo, pues llevaban el mismo rollo surfero, pero Edith no lo había visto en su vida, tal vez fuera de Hawaii como Josh.
La castaña se apresuró en abrir la ventana ilusionada pero sorprendida al mismo tiempo.
- ¡Josh! ¿que narices haces aquí?
Preguntó Edith sobresaltada.
- Vaya, esperaba un, "querido primo de mi corazón, ¿como estás?, ¡cuanto tiempo! me moría de ganas de verte" o algo así.
Respondió el castaño haciéndose el gracioso mientras se acercaba a la ventana.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Edith lo miró alzando una ceja como si fuera idiota, sacudió ligeramente su cabeza y acabó de abrir del todo la ventana sacando un pie por ella.
- Venga, ayúdame.
Exigió haciendo el ademán de salir por la ventana. Josh la ayudó y los pies descalzos de Edith finalmente tocaron el húmedo césped. Se incorporó adecuadamente y se abalanzó sobre su primo abrazándolo con fuerza.
Josh le correspondió el abrazo de manera cariñosa.
- Te he echado de menos, idiota. -Murmuró la castaña por lo bajo como si le diera vergüenza admitir aquello- Quise ir a veros el verano pasado pero mamá y yo estábamos mal de dinero, sigo queriendo que me enseñes a surfear. -separó un poco a Josh empujándolo suavemente del pecho para verlo mejor- Un momento, si estás aquí, también estará Shaileen. - comentó, estaba demasiado ilusionada como para no acribillarlo a comentarios y preguntas-
Josh la miraba igual de ilusionado hasta que los ojos de Edith se posaron en el chico que había tras ellos, con las manos cogiéndose los hombros en una postura algo incómoda, ya que ni el ni ella se conocía.
- Oh, ¿quien es él?
Preguntó Edith señalando al chico con su dedo indice.
Entonces Josh reaccionó, se había olvidado por unos instantes de que Ray estaba ahí.
- Oh, si, me había olvidado de él por un segundo.
Comentó Josh juguetón a lo que el chico de melena rubia le respondió lanzándole una de las piedras que estaban gastando para despertar a Edith.
- Muy gracioso, JJ.
- Edith, este es Ray, o Ray Ray, como prefieras llamarlo. Ray, esta es mi prima, ya te he hablado de ella.
Ray le echó una mirada fulminante a su mejor amigo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
- Prefiero solo Ray. -aclaró antes de volver a dirigir la mirada hacia Edith que los miraba con una simpática sonrisa- Un placer conocerte. -dijo tendiendo su mano a modo de saludo.
Edith estrechó su mano.
- Lo mismo digo, Ray.
El castaño sonrió ligeramente.
- Bueno, basta ya de presentaciones. Vamos a dar un paseo y te cuento que hacemos aquí y donde está tu mejor amiga barra prima del alma.
Dijo esto último con algo de rintintín por los celos que le producía que se llevaran tan bien su hermana y su prima, ya que solían estar como el perro y el gato, al menos cuando eran pequeños. Pero había pasado unos tres años sin verlos, y Edith tenía que reconocer que el gen familiar era experto en crear bellezas.