"Hoy será un día como cualquier otro" era lo que pensaba el chileno mientras se lavaba los dientes y se miraba al espejo. Se estaba preparando para ir a la escuela como un lunes cualquiera.
— Chile, deberías apurate. —decía Rapa Nui mientras servía el desayuno en la mesa.
— ¿Qué hora son? —gritó desde el baño para que pudiera escucharlo.
—Faltan... —miró la hora para luego hacer una suma rápida. — te quedan unos 40 minutos.
— 1 hora con 22 minutos. —corrigió Mapuche.
— No soy muy buena para los números.
— Yo tampoco, —confesó un poco avergonzado. — solo use la calculadora de Chile.
Chile tomó un poco de agua para enjaguar su boca y a la vez escuchar las conversaciones de cualquier tema que pudiese existir pero justamente hablaban sus hermanos. Ellos eran capaces hasta de hablar del porque las moscas son tan fáciles de matar.
Cualquier cosa servía.
De aquí hacia adelante no queda mucho que decir, el joven solamente hizo lo que de forma cotidiana hace, nada importante que destacar, en especial si era de un día tan odiado que el primero de la semana; lunes.
El tráfico era tan horrible como cualquier madrugada, aún estando incluso fuera de las carreteras le retumbaba el sonido de las bocinas.
— Tocate la raja mejor. — era lo único que quería decir Chile en esos momento, pero por respeto a las personas que los acompañaba no lo hizo.
A pesar de todo eso, Chile pudo lograr lo mismo que hizo la semana pasada.
— ¡Llegué temprano!
— No creo que se le pueda decir así. —admitió el peruano. — Solo quedan 3 minutos para que toquen la campana.
— Si llego antes del toque de timbre, significa que llegue temprano.
— Decile que sí para que no se ponga triste. —le susurró Argentina tratando de pasar desapercibido.
— Susurraste para el lado equivocado. —México solamente se limitó a decir eso con una sonrisa algo apagada.
— Estás raro. —dijo Brasil preocupado por su amigo.
— ¿Por qué lo dices?
— Normalmente te hubieses reído y burlado de Argentina, al punto de ser el centro de atención de todos que nos rodean.
— No puedo creer que unas de las mejores oraciones que has pronunciado en español es tal pendejada. —dijo México tratando de usar su tono burlón. — Solo desperté con el pie izquierdo, no estoy de tan buen humor.
— Quizás no querés hablar porque hay muchos presentes. —el argentino tomó de la mano el chileno mientras se lo llevaba. — Yo con Chile tengo que hablar de otras cosas, nos vemos en el aula.
Perú solo se quedó mirando como la pareja se alejaba rápidamente y se mezclaba con los demás alumnos. Él recordaba que hace tres días estaba en casa de Chile drogado, pero también tenía ese recuerdo donde Chile confesaba que todo era falso, el amor de Argentina y Chile no era real. Necesitaba comprobar si eso pasó de verdad o no, quizás más tarde hablaría del tema, ahora la preocupación es México.
— ¿Y eso? —le preguntó al argentino. — ¿Quieres hablar de algo?
— No, sólo quería estar al menos unos segundos contigo a solas. —confesó sin vergüenza. — Se me ocurrió la excusa y aproveche.
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𝐎𝐓𝐑𝐎 𝐃𝐈́𝐀 𝐌𝐀́𝐒 𝐄𝐍 𝐋𝐀 𝐄𝐒𝐂𝐔𝐄𝐋𝐀 (CANCELADO) ── chile.
Humor❍ Es la historia que trata sobre la vida adolescente que viven estos paises latinoamericanos, pero en quien se va a centrar esta historia es de un país sudamericano; Chile. Chismes por aquí, por allá, pareciera que nadie se calla, pero este país ten...