𝐎𝐓𝐑𝐎 𝐃𝐈́𝐀 𝐌𝐀́𝐒 𝐄𝐍 𝐋𝐀 𝐄𝐒𝐂𝐔𝐄𝐋𝐀 (CANCELADO) ── chile.

Capítulo 12: El inicio.

— ¡Recreo! —dijo el chileno entusiasmado al oír el timbre sonar.

— Por fin.

Antes de que la parejita se levantará de su lugar, llegó rápidamente el tricolor con escudo de águila y golpeó bruscamente la mesa del celeste para llamar la atención.

— ¡Adivinen a quién ONU se olvidó llevarse!

— Será mejor que te mantengas lejos de su vista. —dijo Perú desde su puesto mientras ordenaba sus útiles escolares que estaban por encima.

— ¡Ya lo sé! Pero no mames, por primera vez a ONU se le olvida algo de un momento a otro. —decía un tanto pensativo. — Quizás no sea tan mala idea tener a FBI, ahora nuestro querido director debe estar muy pendiente de ella.

— Parece que por fin ONU tendrá compañía. —comentó Chile mientras se levantaba del banco. — ¿Y si mejor vamos a buscar a Brasil y luego seguimos hablando del tema?

— Me parece bien. —respondió Argentina.

Los tres sudamericanos —más el norteamericano—, se dirigieron al salón que estaba junta a la de ellos. Durante el corto trayecto hacia ahí, Perú no le quitaba la mirada de encima al del parche, lo había observado durante toda la clase, a él y su supuesta pareja, tenía muchas dudas sobre ellos, pero aún no quería hacer ninguna.

Sentía un poco de miedo, sí. Tenía miedo de que lo juzgarán, no quería parecer el amigo que sólo le importan los chismes o algo así. Él no era así.

— ¡Claro que no soy así!

— ¿Qué? —preguntó México.

Perú levantó la mirada y vio que sus amigos lo estaban mirando extrañados, todo esto a causa de que el peruano alzó la voz de la nada misma y dijo algo que no tenía que ver con el tema de su conversación.

— NOO. —se quejó el chileno. — PERÚ ERA EL ÚNICO DECENTE DE NOSOTROS CUATRO, NO TE VUELVAS RARITO COMO NOSOTROS.

— Habla por vos, yo soy increíble.

— Chile tiene razón, ¿te imaginas un Perú con el ego como del mamón de allá? —apuntó al argentino. — Te vamos a tener que dejar más tiempo con Brasil y menos tiempo con nosotros.

— ¿A quien llamas mamón?

— Tenemos que hacer sacrificios por tú bien. —dijo con tristeza el chileno.

— ¿Me están ignorando? —nadie le respondió, así que sí, todos estaban ignorando al del sol.

— Hablando de Brasil, ¿no debería estar aquí? —miraba hacia sus alrededores el de rojo y blanco.

— Parece que ya salió. —Chile trataba de asomarse por la ventana y ver si quedaba alguien dentro del aula.

— Sí, Brasil se fue con sus amigos. —apareció Portugal mientras cerraba la puerta. — No queda nadie adentro.

— Oh, gracias. —Argentina fue el único que agradeció.

— Un placer. —sin nada más que decir, el mayor se retiro del lugar dejando a solas al cuarteto.

Todos se quedaron mirando. Brasil era una persona que aveces estaba con ellos y aveces no, esto es debido que el de habla portuguesa está en una clase diferente, por ende también tiene otros amigos, y no eran tan celosos como para quejarse de "¿Por qué pasas tanto tiempo con ellos?".

Aunque en realidad tampoco sabían quienes eran "ellos", nunca se tomaron el tiempo de preguntar quienes eran sus otros amigos.

— ¿Ninguno de ustedes sabe quienes son los otros amigos de Brasil? —todos bajaron la cabeza apenados al escuchar la pregunta de Perú. — ¡Que malos amigos son!