Capítulo 17: Problema de chicas(1/3)

1.6K 156 878
                                    

—¿Me estai weando?

—No, wey —le dijo el de nacionalidad mexicana mientras estaba sentado sobre la mesa de Chile—. FBI dijo; "En cuanto encontremos a las personas involucradas de la foto que muchos ya han visto, que corresponde a una persona haciendo sexo oral a otra en el baño de la escuela, serán suspendidos" —al momento de contarle lo que había oído, puso un tono de voz tratando de imitar a quien conocen como su inspectora de corredor, una voz que a él le salía chillona. Todos se rieron ante esa pésima imitación.

—Sigo sin poder pensar en quiénes son —comentó Argentina, a la vez que sacaba unas cosas de su mochila—, pero tremendos pelotudos deben de ser.

—Ni me lo digai'. Creo que por primera vez estoy de acuerdo contigo.

El chileno se levantó de la silla, y se puso a un costado del pequeño pasillo para esperar que el argentino se levantara también. Era un pequeña costumbre que había agarrado el tricolor, y es que no podía avanzar a la puerta del salón si el celeste no estaba a su lado.

Y con un algo de dificultad, Argentina salió de su banco con un montón de hojas sobre sus manos. Parecía que iba hacer algún tipo de trabajo escrito, pero no sabían cuál, no había ninguno que deba el argentino.

—¿Necesita ayuda, compa? —el norteamericano le quiso brindar un poco de apoyo, pues todo lo que cargaba parecía algo pesado e incómodo de llevar.

El de emblema de sol se limitó hacer un gesto, dando por entender que sí, necesitaba esa ayuda. México se bajó de un pequeño salto de la mesa del chileno y se dirigió a su amigo que lo necesitaba, recogió la mitad de lo que llevaba y así ser equitativos.

—Ecu nos debe estar esperando afuera, mejor salgamos —fue lo único que dijo Perú mientras tomaba un poco de su jugo en caja.

Chile al verlo tomar tan tranquilo, tan relajado, tan distraído, quería ser fuerte ante la sucia tentación. Pero no podía evitarlo, necesitaba hacerlo.

Mientras el peruano estaba en las nubes y tomaba de su jugo, Chile apretó la caja, provocando que el contenido saliera más rápido sin previo aviso.

—¡¿OE, PERO QUÉ TE PASA?! —preguntó exaltado mientras tosía, a causa que todo el jugo había entrado de golpe en su boca.

—Perdoname, Perú. Es que te veíai' tan tranquilo que no me aguante —quería fingir que estaba triste, pero no lo lograba.

Actuar no era su fuerte, claro que podía hacerlo cuando le salía del corazón, pero ahora no tenía muchas ganas de siquiera intentar que se tragara su falsa compasión.

—Te odio —le dijo con rencor, mientras se limpiaba el resto del líquido de su boca.

—Aww, yo también te amo.

—Che, ¿podés avanzar? Lo que llevo con México pesa demasiado.

—Ah, sí. Perdón, amor —le dio unas palmaditas en el hombro a su pareja y empezó andar.

Al salir de su salón, de inmediato se toparon con Ecuador la cual se encontraba apoyada contra la pared mirando su teléfono celular. Al ver que los chicos por fin salieron, se acercó a ellos y empezó a caminar a su lado como si nada.

—Hoy tardaron demasiado.

—Es que debo llevar todo esto —le señaló el celeste.

—¿Y para qué es todo eso?

—Pensaba que vos sabías, una piba de la clase tuya me pidió esto para ayuda de un proyecto.

La ecuatoriana frunció el ceño y entrecerró su ojos tratando de pensar. Ella tampoco estaba al tanto a qué trabajo se estaría refiriendo, ella tenía entendido que nadie estaba debiendo nada en su curso.

𝐎𝐓𝐑𝐎 𝐃𝐈́𝐀 𝐌𝐀́𝐒 𝐄𝐍 𝐋𝐀 𝐄𝐒𝐂𝐔𝐄𝐋𝐀 (CANCELADO) ── chile.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora