II : Hogar, Frío Hogar

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Pov Ucrania

Llegamos a su casa, era grande sin duda alguna, me quedé viéndola y me volteé a ver y él no estaba, miré para todos lados hasta que me llevé un susto al ver que tenía mi maleta en sus manos.

U - ¡Ah! -

C - ¿Qué? Estoy llevando tu maleta, tú entra. -

Me sentí un poco atemorizado por él, no expresaba nada ni tampoco es que dijera mucho, era muy tranquilo por supuesto pero, parece que algo le afectó en grande, no puede ser que viva así todo el tiempo.
Lo miré por un rato y entré a la casa y... cielos... el ambiente era muy frío y silencioso, no se si me acostumbraré a este lugar pero, ya que, hogar, frío hogar ¿no?

C - ¡Ucrania, sube por favor! -

U - ¡Enseguida! -

Subí por las escaleras y el estaba en una habitación, entré y encontré mi maleta arriba de la cama. Lo primero que se me vino a la mente fue que iba venir lo peor al ver la cama.
Cerré fuertemente los ojos y sentí una mano posarse sobre mi espalda que luego pasó a mi hombro, en ese momento solo esperé lo peor pero, al abrir los ojos noté que el me estaba mirando fijamente.

C - ¿Te sientes bien? -

U - A-ah... yo, s-si. ¿Esta es nuestra habitación? -

C - No, tu habitación. -

U - ¿Qué? ¿Todo esto? No puedo aceptarlo. -

C - Tendrás que hacerlo, quiero que tú también tengas tu espacio. No soy como los otros, no te haré nada ¿entendiste? -

U - S-si... *llora*. -

C - Oh, chico, ven *lo abraza*, no se por lo que haz pasado pero, tus heridas dicen mucho. Hay que sanarlas. -

U - S-si, gracias. -

Bajamos a la sala principal y me dijo que me sentara en el sofá mientras él traía el botiquín. Al esperar miré hacia arriba y vi que había un cuadro de él cuando era pequeño, se podía ver a un niño dulce, amable, inocente y tranquilo con los demás, el que tenía hace un rato enfrente mío no lo parece ¿Qué le sucedió? No quiero preguntarle, quizás se enfade aunque hasta ahora no lo hizo.

Luego de un rato vino hacia mí y puso alcohol en algunas de mi heridas, dolía un poco pero era soportable, colocó unas vendas en mis brazos, torso y piernas. Mientras lo hacía, sentía sus grandes manos pasar por todo mi cuerpo, no eran frías, sino que cálidas, también cuidaba de que no me doliera, porque cada vez que me dolía en una zona se disculpaba.
Quedé casi completamente vendado en el torso, me pareció gracioso y luego me levanté, casi tropezaba y Canadá me atrapó tomándome de la cintura y la parte alta de la espalda... me recordó al hombre que me violó en ese lugar, rápidamente por instinto lo alejé de mi y me tiré al sofá abrazando mis piernas.

U - *llora* ¡No, por favor no me lastimes! ¡Haré lo que tu quieras pero, no me lastimes... por favor! -


Pov Canadá

Lo atrapé antes de que se pudiera caerse y hacerse daño hasta que se separó y comenzó a llorar. Me suplicaba de que no lo lastimara y en ese momento solo sentí como mi corazón comenzó a romperse, no me quiero imaginar lo que tuvo que pasar en ese lugar. Me acerqué a él me senté a su lado, seguía llorando y suplicando aún.

II  Danza de Cenizas |Canadá & Ucrania|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora