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Mi mejilla ardía  como la mierda.

Ya eran las quince para la una de la madrugada y yo seguía  aquí. 

Y ebrio.

Golpeó  con fuerza la barra y grito.

--Otra ... rrondah

No tengo idea de como supe del lugar,ni de donde estoy exactamente. Solo se que quiero ahogarme. Mi corazón duele tanto en estos momentos y saque tanto hace unas horas contra él  que ahora lo único que deseo es llenar el hueco que quedó  después de haberle dicho tanto y dejarle saber mucho. Lo llenaré,aunque sea con alcohol.

--Hey ... chico ¿tienes para seguir bebiendo de este modo?

--Mira ... tengo para pagarte hasta la risa ¿Estamos?

Ahora me dicen valiente. Ja.

El tipo me dejó  allí,con mi ronda después de darme una cara de pocos amigos y avisarme que es lo último  que me servirá  porque el lugar está  por cerrar. Llevo como puedo la mano a mi rostro y reviso buen rato mi reloj hasta que atinó.  Ya serán las dos de la mañana. El tiempo Si que tiene prisa.

La cabeza ya me palpita demasiado pero aquí  sigo sentado y bebiendo. Hasta que ese parloteo alto comienza  a molestarme.

Giro mi cabeza en todas direcciones hasta que ubico entre los cuantos que estamos en el lugar a una mata de cabellos claros. Enfoco como puedo mi vista y ubico su rostro furioso después de que el mismo mesero que me atendió  estaba alejándose de él.

Ese chico lo había  maldecido de seguro. Apuesto a que le dijo lo mismo que ha mi.


Tomo la última cerveza para quedarme un momento en el limbo. Veo un poco mal ya. Aun así, reúno todo lo cuerdo y sobrio que queda en mí  y lo ubico en mis piernas para ponerme en pie.

Dejo el dinero y me salgo del lugar.

El aire del pasillo trasero golpea mi jovial rostro. No. Espera. El aire de la realidad golpea con harta fuerza mi jovial rostro.

No hay a dónde  ir.

Papá me había  echado de casa después de lo que sucedió .

Aun tengo efectivo y la tarjeta supongo y dormiré  en algun motel.



--Mierda!!! Que me suelte!!!

--Que pasa contigo,hijo de puta,deja de gritar


No pude evitar pegar un brinco con tremendo grito.

Sacudo mi cabeza con fuerza y aprieto mis ojos de la misma manera. Eso fue un grito ¿no?  Me quedé  de pié unos momentos mas antes de cruzar la calle y cuando estaba por hacerlo el ruido de algun vidrio rompiéndose me sorprendió  de nuevo.

--Mi auto -dirijo mi mano a mi bolsillo izquierdo y no me lo creí --¡Mi auto!

El alcohol se redujo un poco en mi sistema,corrí directo a y mientras lo hacía  mi corazón se aceleraba un poco más, habían  dos tipos allí y no vi mal,lo juro.

Uno de ellos estaba arrastrando al otro dentro de la bodega trasera del bar de donde salí.  Me paré  del miedo. Jamás  he pasado por algo así.

Me detuve un poco,y aun así  no podía pensar muy bien del todo.  ¿porqué  lo arrastró  allí? No quiero problemas.
Así  que me terminé  de acercar a mi auto y en efecto le habian quebrado el vidrio del pasajero de lado izquierdo de atrás. 

Quise irme y aun así  no podía  ni abrir el lado del piloto.

Los llantos que empezó a emitir ese chico no me dejaban. Tenía  miedo de saber que le estaba haciendo.  Pero no me resisto.

Abrí  el maletero y saque de allí  la cruceta para cambiar los neumáticos y la tomé  con fuerza. Y con esta misma caminé  a la puerta. 

Ya les dije que ¿el valiente me dicen ahora?  Abrí  el lugar camine espacio hasta ver unos pies en el suelo,recostado.

Era el imbécil que me atendió.

Me retiré  un poco y vomite. Mucho.

El hijo de puta estaba tratando de forzar a alguien. Y eso me sorprendió.

Pude  escuchar como lo golpeó  más y le ofendió.  Yo no supe que sucedió conmigo.

Lo golpe muy fuerte con la cruceta.

Recuerdo algunos golpes,varias voces después  que fui arrastrado y ahora que estoy calentito en una cama acolchada.

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