Los días posteriores a esa pelea entre los jóvenes pasaron con bastante rapidez, Diane se centro solo en empacar todas sus cosas y pasar el mayor tiempo posible alejada de Lorcan, además de no querer encontrarse con su tía quien luego de esa llamada a su oficina se comporto aun mas descortés con ella, algo en la mente de la joven algo le hacía pensar que luego de ese mes en southforck con su hermana no volvería a lake park, y para ser totalmente sincera era algo que la alegraba, estaba cansada de esa sociedad tan presuntuosa , necesitaba con urgencia aires de familiaridad.
- Señorita su equipaje esta listo, es hora de partir-
Diane solo asintió con la cabeza, al bajar por las escaleras solo la esperaban sus primos, quienes al igual que ella poseían tristeza en sus rostros, en eso Conrad tomo la iniciativa de darle un gran abrazo.
- Eres bienvenida en cualquier momento saltamontes- susurro en su oído - lamento lo de Lorcan-
- No hay nada entre ese caballero y yo que merezca tu perdón primo- hablo Diane mientras seguían abrazados en eso se les unió Amalia en lagrimas por la partida de su querida prima.
- Ahora quien va a bromear conmigo cuando madre me regañe-
- Estaré solo un mes fuera - trato de calmarla, pero todos sabían quizás no sería así.
En medio de ese ultimo abrazo con sus primos, la doncella dio aviso de que el carruaje ya estaba en la puerta principal. Terminando Diane solo subió al carruaje tratando de olvidar todos los malos momentos sucedidos ahí, no pensaba que en tan poco tiempo su opinión por lake park cambiaria tanto, "era muy curioso como cambian las cosas cuando crecemos" pensó Diane.
El viaje por suerte era solo cuatro horas hacia la costa de lake park, por lo que tendrían una briza marina bastante agradable, pero para su mala suerte su hermana odiaba los vientos muy fríos, esperaba poder escapar de su compañía de vez en cuando, estaba de todas maneras bastante feliz por verla, desde su boda hace mas de un año que no la veía, extrañaba esas largas y profundas conversaciones, pero lo mejor de todo es que estarán las dos solas, así podrá tomar largos paseos para poder pensar y también ver a rosco, el perrito adoptado por el conde antes de la boda, estaba emocionada por verlo nuevamente, así de tanto pensar Diane se quedo dormida mientras los rallos de sol cruzaban por su ventana chocando en su rostro.
En otro lado cierto joven estuvo encerrado en su dormitorio toda la mañana evitando despedirse de la joven, ni si quiera sabia a donde iría, pero no podía parar de pensar en ella, aunque ella se negaba a dirigirle la palabra, pero ahora solo podía arrepentirse de solo ser un Patán con ella, quizás nunca sentirá tanta pasión como la sintió con aquella extrovertida chiquilla, pero unos toques a su puerta lo sacaron de tales pensamientos.
- Duque le ha llegado una carta- aviso uno de los sirvientes
- Muchas gracias por traerla- agrego el duque
"querido amigo, se que no nos hemos visto en mas de un año, como sabes me he casado y junto con mi esposa seremos padres. Me iré por un mes debido a unos negocios por lo que te pido hacerle compañía, ella estará encantada de conocerte al fin, además creo que mando a llamar a su hermana pequeña. No recibiré un no como respuesta solo será un mes en southforck, cuando regrese te lo compensare. Se despide afectuosamente Frederick Clark"
- Genial ahora tendré que cuidar a una mujer embarazada y a su hermana pequeña- hablo en voz alta para desahogarse, al parecer el destino no quería que se mantuviera tranquilo, lo seguía llenando de baches. Su mente luego volvió a esa corta pero hermosa risa de Diane, ese día fatídico no podía sacarse su rostro de sorpresa cuando le grito realmente no recibirá el perdón y tendrá que vivir por siempre enamorado de una mujer que claramente lo odia.
Tendría que partir mañana por la mañana a dicho lugar, iría en su carruaje, no tenia ganas de cabalgar, su mente solo vagaba recordando las expresiones de Diane, su piel, sus carnosos labios y en lo estúpido que fue con ella, no quería arrepentirse de tomar a una joven tan exaltada, alocada e imprudente pero eso era justamente lo que le atraía de ella, la vida que tenia en esos ojos azules cual mar, en esa piel Bellísima que ansiaba por probar, en ese cabello que siempre estaba perfumado de una esencia mas que agradable, desde que la vio amaba su trato con los sirvientes, los animales, para ella las simples hierbas eran dignas de respeto y cuidado, jamás había conocido a una chica con esas extrañas cualidades, era inevitable sentirse atraído pero lo que sentía por ella era mucho mas que eso, el la amaba pero se dio cuenta demasiado tarde, mientras estaba en esa casa solo podía pensar en ella, al menos el viaje era oportuno para despejar su mente.
Rápido se hizo la noche, el carruaje llego a su destino, Diane estaba extasiada por la propiedad que poseía su hermana, sin duda se divertiría mucho mas que en lake park, lejos de aquellas personas que tanto mal le hicieron. Despertó a Marion para bajarse a saludar a su radiante hermana.
- ¡DIANE! Estas muy hermosa -
- Lo mismo digo Adele, al parecer el conde te ha hecho muy bien- habló con picardía viendo el rubor en las mejillas de su hermana
- Ven no te quedes acá afuera, los vientos se están levantando- tomo sus manos y la dirigió a los adentros de la propiedad
- Como sabes estaremos los tres solos en esta gran casa, espero que te comportes con el duque-
- ¿los tres?, ¿duque?, ¿de que estas hablando? - miro a su hermana
- No te preocupes por nada- Adele le resto importancia a las preguntas de Diane - no sabemos cuándo llegará, así que disfrutemos nuestro tiempo de hermanas-
La joven solo se limito a asentir cuando unas pequeñas patitas golpearon sus piernas. - ¡rosco!, estás tan grande- miro al perrito quien solo le movía la cola.
- Ven vamos a mostrarte tu cuarto- hablo Adele
Diane solo asintió con rosco en sus brazos cuando recordó una un dicho por su padre "el destino es algo inquebrantable ", quedo asombrada por recordar eso. La chica no estaba consiente que su "destino" estaba preparando su equipaje para salir a esa casa.
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bastante cortito este capitulo pero no se preocupen. es la calma despues de la tormenta 😉😉
cariños prisci. 🌼🌼
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La indomable e incorregible señorita Diane
RomanceDiane Ameli Forest, segundo año en sociedad, sin pretendientes y segunda hija del vizconde Forest.Al lanzarle un vaso de agua muy fría al conde milles sus padres deciden enviarla una temporada a la casa de su tia viuda la marquesa de brown donde est...