capitulo XXI

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- Creo que...ya es hora de que me vaya a mi habitación – habló diane un poco triste pero no quería causar una escena en la casa de su hermana y que luego su madre se enterara - no queremos que mi hermana nos encuentre en esta situación, ¿o sí? – miro directamente a los ojos de aquel hombre el cual ya tenia una cara de picardía.

- A mi no me importa causar un "escena"- contesto Lorcan apretujando más a su amada – si es que tu hermana nos viera, te podría convertir en mi esposa para mañana sin una licencia especial –

- ¡Lorcan! – comenzó a reír de una manera tan natural la joven que el hombre no dudo un segundo y besarla apasionadamente.

- No sabes lo mucho que amo oírte reír al fin- habló recordando todas las veces que oía esa magnifica risa la cual era melodía para sus oídos, pero no eran dirigidas a él, porque solo recibía el mal humor causado por su estúpido temperamento.

- Bueno de ahora en más, si es que no me haces enojar siempre me oirás reír- hablo con un tono de travesura, pero a su vez con advertencia.

- ¡Oh! No se preocupe mi dama bella, no le haré pasar por lo mismo, ese hombre ya no exististe al menos para ti ya no –

- Pues eso me alegra muchísimo, pero ahora tengo un poco de incertidumbre por lo que sucederá con tu madre – confesó nuevamente diane asustada "no puedo evitarlo nunca me he enfrentado a una duquesa" pensó la joven

- Mi madre no te odiara diane –

- ¡no he dicho nada! – "¿Cómo es que se enteró?"

- Solo con ver tu rostro se lo que piensas, mi bella saltamontes – sonrió Lorcan por lo expresiva que era su futura esposa

- ¿saltamontes? - comento ofendida y a su vez sorprendida la joven por ese apodo tan familiar, pero debía admitir la cercanía que estaban teniendo, parecía como si estuvieran destinados a estar juntos nunca se había sentido tan cómoda en los brazos de un hombre ajeno a su familia.

- Por su puesto, mi bella saltamontes –

Su momento de coqueteos, abrazos y unos cuantos besos se vio por terminado cuando a diane se le vino algo fugas a la cabeza

- ¿Lorcan? -

- ¿sí? -

- ¿Cuándo iremos a nowford? –

- Pensaba ir mañana antes de que salga el sol, me gustaría que mi madre te conociera lo antes posible y así evitarnos esas horrorosas invitaciones a mujeres sedientas de poder –

- Vaya si que tu madre te ha traumatizado – soltó una carcajada la joven antes su propio comentario.

- Creo recordar que tu madre te envió con tu tía porque no querías casarte – comento juguetón el duque, amaba este tipo de charlas tan livianas y sobre todo amaba con quien las hacía.

- Bueno digamos que no tenia pretendientes a los cuales impresionar y madre estaba asustada de tener una solterona por hija, no te imaginas la cantidad de elogios que te dará solo por querer casarte conmigo-

- Bueno creo que el que saldrá mas beneficiado seré yo al ser tu esposo-

Su charla duro antes de que comenzaran a salir los pequeños rayos de sol, entonces los jóvenes a su pesar se despidieron, no podían armar un escándalo y dar fiesta a las habladurías de los sirvientes.

Diane solo cerró sus ojos por unos minutos antes de que su doncella golpeara la puerta para comenzar a vestirla antes de partir a la finca del duque.

- Marion solo quiero algo simple –

- Pero mi señorita conocerá a la madre del duque, necesita verse esplendida –

- Lo sé, pero quiero que ella me vea por lo que soy y no por lo que aparento ser, quiere ser diferente a todas esas chicas las cuales solo van tras el dinero-

La dama solo acato las ordenes, uso un vestido sobrio pero que dejaba al descubierto la belleza la diane, sus cabellos obscuros iban casi sueltos, estaba usando esos vestidos que tanto amaba para salir a pasear por los jardines.

- Marion deséame suerte –

- Suerte, señorita en cuanto la señora duquesa vea lo bondadosa y buena que es usted quedara maravillada, no tiene de que preocuparse-

Pero alguien se les adelanto, una carta dirigida a la duquesa viuda Wallis Bedford llego de improvisto a nowford.

- ¡vaya una carta de vera! – hablo la viuda "vera nunca hace esto" pensó la viuda

"Querida Wallis, espero no tomarte de improvisto, pero quiero darte las buenas nuevas las cuales mi hija me acaba de informar. Tu hijos el duque le ha pedido su mano en matrimonio, no sabes lo dichosa que me encuentro al ver que nuestras casas se unirán, espero que la boda sea digna para la futura duquesa Bedford.

Atentamente y con un afectuoso abrazo vera Brown"

- ¡No puede ser! – pego el grito en el cielo la mujer, amaba a su amiga, pero la hija de esta no era lo que quería para su hijo el cual era un hombre serio, "ya me escuchará Lorcan cuando este acá, el necesita una mujer divertida no que se centre en las joyas o el dinero que nuestra posición le ofrecerá", pensó la mujer enfurecida ya que su hijo no acostumbraba a tomar decisiones tan apresuradas.

Sin duda a los jóvenes los cuales ya iban en camino a la mansión les esperaba un gran malentendido creado por la malicia y la envida de vera a diane. La cual no podía pegar un ojo en todo el camino, ya que admiraba las bella colinas, flores que ese lugar ofrecía a la vista de la joven, pero no quería admitir que muy dentro de ella el nerviosismo la carcomía "¿estará seguro de lo que hace Lorcan llevarme tan apresuradamente con su madre?, ¿pensara que soy una cazafortunas?" pensaba diane sin evitarlo mientras veía el bello rostro de su futuro esposo, ambos se miraban, no había palabras pero no hacia falta en sus ojos los sentimiento del uno por el otro eran más que suficiente.

- Espero que tu madre no le moleste que una mujer embarazada este de visita- comento Adele con obvios aires de molestar a los enamorados, amaba molestar a su pequeña hermana

- Tranquila, madre ama hablar de bebes-

- Que bien, ya lo oíste diane a tu futura suegra le gustan los bebes- comenzó a hablar casi soltando una carcajada por lo que estaba diciendo – en cuanto se casen deben concebir a un hijo.

- ¡Adele! ¿¡Qué cosas dices!?- grito diane eliminando la bella atmosfera que entre los dos enamorados se había creado dando paso a que los tres no parasen de reír sin saber que una tormenta se les venía.

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mejor tarde que nunca dicen por algunos lados🤣

lamento la tardanza pero acá hay otro capitulo 

espero que lo disfruten y diganme que les parece lo que hizo tia vera con esa carta 

un beso y abrazo 

priscii  🌸🌸

La indomable e incorregible señorita DianeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora