En el carruaje diane solo podia pensar en el escaner del caballero, no podia negarlo, su mirada hizo que sus manos estuvieran sudadas por un momento, pero trato de dispersar ese sentimiento repitiendo que solo era un noble más buscando a la mejor muchacha casadera y así asegurar su fortuna con un hijo, pero de un momento a otro su tia intervino con su voz.
-que caballero, aun no puedo sacarme de la cabeza como miro a amalia- comentó para seguir - creo que tu prima estará casada antes de lo que esperamos y mejor aun con un duque, no puedo ser mas dichosa- parloteaba
la muchacha solo la escuchaba impactada de lo parlanchina que estaba su tia esa mañana
-bueno en otro tema- miro a la joven- los vestidos corren por mi cuenta, eres mi invitada, necesitamos vestidos dignos para encontrarte un hombre quizas no del calibre del duque pero quizas un conde estaria bien-
- muchas gracias tia vera- solo contesto la chica estaba harta de tener que hablar del duque y como miraba a su prima, quizas a ella jamas la miraran como su cuenta. pero no se hará esposa de alguien sin amor eso jamás
por un momento el carruaje se detuvo para informarles que ya estaban a las afueras del las tiendas. ya comenzaba su dolor de cabeza con solo poner un pie ahí, no podia con tantos olanes, moños, telas ni encaje, a demas que todos los vestidos que elegia su tia los denegaba por ser demasiado simples y luego sin percatarse se habia tomado cinco tazas de te, al igual que pasaba el medio día pero ya estaban listas, sus nuevas adquisiciones eran diez vestidos de día otros diez para las fiestas de te y por ultimo pero no menos importantes veinte de noche los cuales eran los mas grandes y pomposos.
-tía no creo que pueda usar todos estos vestidos-
-no digas tonterias, estas invitada a muchas fiestas tanto de dia como de noche-
al parecer la presencia del caballero de ojos color mar en la casa la ponia de buen humor, como tambien bastante generosa.
-ahora podras asistir a tu primera fiesta de día la semana entrante-
-tan pronto..- susurro la joven , aun no recorria todos los jardines y ya se estaria paseando para ser admirada por los caballeros, de solo pensarlo solto un suspiro de pesadez, una vez llegaron al carruaje se derritio sin importarle los reproches de su tía, han sido demasiadas emociones en menos de cuatro horas.
-al llegar- otra vez penso la joven- necesitamos ayudar a tu prima para impresionar al duque y asi lograr que se cienten juntos en la mesa a la hora de la comida- le hablo a la joven ya que al ser primas tan cercanas seran confidentes en planear la boda de su hija.
- esta bien tía- comentó la chica con pesar
y así en tan solo una hora ya llegaron a lake park, en cuanto pararon los caballos, la mujer mayor salio con gracia, al tomar la mano del lacayo, pero la mas joven tomo impulso para salir desde adentro impresionando a los criados que se encontraban sacando el montonal de cajas.
-vaya prima tan aburrida estabas con mi madre ahí adentro que casi caes del carruaje del apuro- pregunto divertido el marques, ya que estos tres al escuchar a los caballos salieron a recibirlas, aunque esto era parte del plan de conrad para que su amigo descubriera a la dama de sus sueños pero logro el efecto contrario el duque miraba a la chica con una expresion de desaprobación.
-¡prima! vamos a ver tus vestidos- tomando el brazo de la joven mas que rapido ya que vio la cara del duque y no queria crear malos entendidos conociendo la personalidad de su querida pero indomable prima - caballeros si nos disculpan debemos estar listas para la comida-
así todas las damas entraron para no ser vistas.
-¿esa señorita?- comentó lorcan para la sorpresa del marques, el cual rogaba para que su amigo notara las similitudes en personalidad- es muy extraña sin duda- saliendo de la vista de conrad con la respuesta en su garganta, su amigo, era un idiota esperaba que en la comida su prima no estuviera con el pelo tan adornado para que así y una vez por todas el duque la reconociera
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La indomable e incorregible señorita Diane
RomantizmDiane Ameli Forest, segundo año en sociedad, sin pretendientes y segunda hija del vizconde Forest.Al lanzarle un vaso de agua muy fría al conde milles sus padres deciden enviarla una temporada a la casa de su tia viuda la marquesa de brown donde est...