22/12/2015

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Song: A Day In The Life — The Beatles.

~×~

Era un día completamente normal para John, y cualquiera que tenga conocimiento sobre la narración de historias sabrá que esa frase nunca termina cumpliendo lo que dice. El ojiazul fue despertado por varios sonidos: el primero fue algo friéndose en el aceite proveniente de su cocina, luego siguió el de una canción que puedo nombrar, era Starting Over por supuesto y el último fue una voz femenina acompañando la canción. Luego de haber completado toda su rutina en el baño, John salió hasta la sala de estar, para observar a la mujer que cocinaba el desayuno.

—Buenos días.— John saludó sonriendo y la mujer se volteó.

—Oh, ya despertaste, siéntate siéntate.. Hice tu comida favorita.— La mujer sonrió ampliamente.

—Gracias..— El castaño habló con timidez y se sentó a esperar tal como le habían dicho.

—Hoy creo que iré al parque mientras tu vas a tú estudio.— Amanda colocó el plato caliente sobre la mesa justo en frente de John.

—Trataré de llegar más temprano esta vez, se que ayer te preocupaste.. Perdón por eso..— El hombre empezó a comer la comida que recién le habían servido. —¡Está delicioso!—

—Oh John.. He preparado este desayuno común para ti desde que eras niño y aún así no te aburres de él..— Amanda se sentó frente a John y acarició su mejilla izquierda.

—Que bonita la canción que cantabas.. ¿Quién la canta?— Dijo el ojiazul mientras masticaba.

—Sabes muy bien quien la canta.— La mujer miró a John con una sonrisa burlona en su cara y él se detuvo para escuchar con más atención.

—¡Ah claro! John Lennon.— John volvió a comer.

—El cantante favorito de tu abuelo..— Susurró Amanda con pesar. —Èl me la cantó cuando regresó del servicio militar..—

—Abue.. No llores por favor..— Justamente en el momento en que John vio unas lágrimas en los ojos de Amanda estiró su brazo para limpiarlas.

—Eres exactamente igual a él..— El desayuno se vio interrumpido porque John se levantó de golpe para abrazar a su abuela, sí, leíste bien, su abuela.

—Ambos contamos con la compañía de una mujer extraordinaria..— John acarició los cabellos blancos de su abuela.

—Sé que pronto encontrarás a una de la que vas a enamorarte.. Y así podrás cantarle canciones de tu banda favorita a ella así como tu abuelo a mi.— Amanda le sonrió a John y este se ruborizó.

—Esa chica tendría que ser el amor de mi vida.. No a todas se les canta canciones de Paul McCartney o George Harrison de todos modos..— A John lo recorrió una especie de escalofrío.

—Lo mejor de todo es que ella llegará cuando menos lo esperes, así suceden los hechos extraordinarios..— Amanda besó la frente de John y lo dejó para que siguiera comiendo.

Hasta ahora imaginé que algunos de ustedes interpretarían a Amanda como su esposa, pero no, la gran pérdida por la que John tuvo que pasar fue la de su preciada abuela, a Amanda Evans pertenecía la habitación con la puerta blanca, era ella la que amaba los lirios casi tanto como amaba a su nieto menor John. Veo las preguntas venir, había una razón por la que Amanda tuvo que vivir con John y esa fue que gracias a un devastador incendio en su casa la mujer se había quedado sin un hogar, Raymond y Elizabeth no podían darle asilo ya que no disponían del espacio, Gabriel era un hombre ocupado que usualmente llevaba a su novia a su apartamento de soltero por lo que tampoco podía quedarse con su abuela, en cambio John tenía una habitación libre en su casa y nadie lo visitaba, para el castaño no hubo mejor evento que volver a vivir junto a su abuela ya que ella prácticamente lo adoraba como a su hijo y así lo trataba. Espero haber contestado sus preguntas, ahora sigamos, John se vistió y preparó sus cosas para irse a su estudio, como era su rutina se despidió de Amanda con un gran abrazo y partió sin conocimiento alguno de lo que pasaría más tarde ese día. Llegó al estudio con rapidez, sacó una foto pequeña que tenía en su bolsillo, la colocó cerca del caballete y empezó a pintar el rostro de la mujer en la foto, este era el rostro de su abuela como ya sabrás. La tarde pasó y con ella se hizo presente más frío del que John pudo anticipar además de una visita de su hermano Gabriel. 

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