Donde la vida de Namjoon es normal tiene amigos y una familia que lo quiere.
Después de pensar en lo que iba a estudiar Namjoon, se prepara para ello. Cuando por fin puede ser enfermero, empieza a trabajar en el hospital más grande de Corea del Sur...
Abrí los ojos y me estire, agarre el celular apagando la alarma en el proceso, lo deje al lado mío y me levante.
Lo agarre de vuelta para ver la hora y me asombre eran las doce del mediodía.
Había dormido mucho. Tire el celular en la cama y camine esta el baño para hacer mis necesidades, lavarme los dientes y la cara.
Mientras me lavaba los dientes me mire al espejo, podría teñirme el pelo de otro color.
Termine de lavarme los dientes y me dirigí al armario para cambiarme de ropa, me puse algo sencillo y baje a desayunar.
Me hize dos panqueques y cafe.
Mientras comía pensé; que tendría que dejar la casa, a mis hyungs y a Hoseok aún que el no lo notaría.
Termine de desayunar y camine de vuelta hacia el cuarto para agarrar mi celular y las llaves del auto. Aunque no lo creyeran tuve mi licencia de conducir a los 20 años.
Baje rápidamente yendo directo hacia la puerta, la abrí y sali.
Iría a que me tiñeran el cabello de color marrón ya que quería aclarar un poco mi color de pelo.
Camine directo hacia el auto, abrí la puerta y entre viendo todo.
Sonreí para mi mismo, todo era muy bonito y me gustaba mucho.
Cerré la puerta, puse la llave y arranque el auto, caminando hacia el lugar que iba siempre para teñirme el pelo.
Fueron unos minutos que a mi me parecieron horas, llegue, sali del auto y me encamine al local entrando.
Viendo a rose barriendo el suelo, ella paro de barrer cuando me vio.
-Oppa, un gusto volverlo a ver. -dijo rose sonriéndome.
-Igualmente rose, ya te estaba extrañando. -dije para luego darle un abrazo.
Ella se rio y me devolvio el abrazo, nos separamos. Mirándonos uno al otro.
-¿Te vienes a cambiar de color? -Preguntó y yo asentí sonriéndole.-
-¿De que color? -preguntó de vuelta y yo le dije de color marrón.
Ella me dijo que me fuera a sentar mientras ella buscaba los tintes y brochas.
Me senté en la silla y me mire al espejo preguntándome si me quedaría el color.
Rose llego y puso los colores en el pequeño bote y me miro sonriendo.
-Que empiece la magia. -dijo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Abriras los ojos a la cuenta de tres. -dijo y yo asentí.-uno... dos y ¡tres!
Abrí los ojos y me mire al espejo sorprendió y contento por el resultado, mire a rose sonriéndole.
