Capítulo 36

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La espera para Juan Castel fue eterna, realmente no sabe cuánto tiempo paso pero para él fue interminable, era diferente cuando estaba con María pues sentía que el tiempo se detenía cuando ellos se miraban estáticamente y luego fluía como un río.

Era como si ellos siempre han estado viviendo en dos túneles paralelos que en algún punto se unían por el destino, pero se dio cuenta que quizás nunca fueron túneles paralelos, es mas María vivía como la gente de afuera y solo observaba desde afuera por una ventana del túnel ansiosa a Castel, pero cuando él quería verla a ella, solo la veía disfrutando de la vida totalmente ajeno a él o en algunos casos no podía verla.

Si ese era el caso, todo había sido un túnel oscuro y solitario, aquel que relataba toda su infancia, juventud, su vida. Desde esa perspectiva todo siempre había sido solitario.

El TúnelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora