Normal, Tierno y Doloroso

Dieta

- Dieta

P.O.V: Guillermo

Si no buscas drama adolescente es mejor que saltes esta historia, ahora en mi mente pasa la canción: There Will Be Blood - Kim Petras.

La belleza y el ser humano tienen una larga historia.

La belleza ha cambiado tanto desde los fuertes hombres cavernícolas, pasando por los pequeños penes del renacimiento, después por el doloroso corsé y llegando a la anorexia y bulimia del siglo XXI.

Me llamo Guillermo Nowalk, tengo 16 años de edad, soy un adolescente normal, pero desde pequeño siempre he tenido está mierda en el abdomen, toda mi vida he tenido pancita, y bueno cuando eres pequeño a nadie le molesta, cuando eres pequeño les parece tierno, adorable, pero cuando creces y llegas a la edad de las fieras salvajes todo cambia, cuando eres adolescente todo lo que hagas, digas, tengas o seas será criticado, la adolescencia es una etapa dura a la que lamentablemente llegué teniendo la maldita pancita de Goofy, no soy musculoso, ni gordo, soy un chico de brazos y piernas flacuchas con una panza igual que Goofy de Disney, se llama: Flaco-panzón.

El término "Flaco-panzón" lo aprendí desde que un pediatra me dijo esa palabra cuando tenía 8 años y bueno no me molestó, era tan sólo un niño, pero después la comencé a escuchar una y otra vez en vídeos que ven todos los chicos adolescentes que quieren ser guapos y populares, vídeos de: "¿Cómo tener un abdomen plano" y "¿Qué no les gusta a las chicas de un chico"; y todo indicaba de que a una chica le puede gustar un chico de cuerpo atlético o uno gordo, pero nunca uno Flaco-panzón.

Entonces entiendes cuál es el problema con el que tengo que lidiar a diario, si quiero gustarle a una chica debo bajar esa maldita panza que nació conmigo, así que a hacer dieta y ejercicio.

Bueno iniciaremos por donde todos inician: El ejercicio en casa, me pongo mis audífonos para escuchar música mientras me ejército, no me importa tener músculo, bueno, por el momento no es mi objetivo principal, mi objetivo es: Bajar la maldita pancita.

Así que di clic a la Playlist de ejercicio como primera música: Play Hard - David Guetta Ft. Ne-Yo Akon.

Y bueno... No viniste a leer sobre un chico ejercitándose así que nos vamos a saltar todo ese ejercicio que no sirvió para nada porque después de un mes, la pancita seguía ahí.

Anteriormente dije que a ninguna chica le gusta un chico flaco-panzón, en realidad creo que esos videos de YouTube no sirven de nada, la verdad es que sí le he gustado a chicas y chicos, a muchas chicas y chicos, aparentemente soy atractivo, tengo 16 años y obviamente ya no soy virgen, perdí la virginidad a los 12 y no fue muy bonito, pero las siguientes veces fue... Mágico.

Pero cuando estoy desnudo intentó que no se note la panza con la vieja confiable chuparse, meter la barriga y sacar pecho, es algo que se me ha hecho un hábito, meto la barriga a cada momento en el que quiero verme... Sexy, es decir que la meto a cada rato, que puedo decir, es la adolescencia: Todos pensamos en coger cual conejos.

Pero volviendo a mis problemas, siempre me siento mirado, siento que todos me miran, que todos miran mi barriga, tal vez esté paranoico, pero siento la vista de esos salvajes y llenos de granos, adolescentes.

¿Si soy popular? No, para nada, soy un chico tímido, pero sociable, es una rara mezcla, soy de esas personas que no sabe cómo iniciar una conversación, pero sabe cómo seguirla después de que inició, y bueno, después de que ya iniciamos muchas conversaciones quien comienza a iniciar conversación soy yo, espero que se entienda.

Bueno, los ejercicios en casa no sirvieron, entonces el gimnasio, y dirán: "Guille deja de ser tan estúpido y hazte la maldita liposucción", y la cosa es que a comparación de ustedes, yo sí tengo padres que me quieren y sobre-protegen, es decir, no me van a dejar hacerme una maldita cirugía, soy un chico de clase media, tal vez si fuera un chico millonario, adinerado pudiera hacérmela sin que mis padres se enteren con mis ahorros, pero cuando eres de clase media, si quieres esa cantidad de dinero deberás pedírsela a tus padres o trabajar, lo cual no voy a hacer porque me enfoco en mis estudios.