Capítulo 14.

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Cuando ví ese cuadro sentí algo... Una sensación familiar, pero al mismo tiempo estaba completamente fascinada e intrigada.

-¿No te parece maravilloso?

- Es increíble Edward.

En el cuadro se podía apreciar un hermoso paisaje, con contrastes muy fuertes, pues mezclaba la delicadeza de los colores pastel representados por una parte el día y la densidad de los colores oscuros de la noche, utilizando tonos muy pagados y encendiendo la oscuridad con los colores más brillantes en el cielo.

Ademásdel maravilloso contraste que el artista había conseguido crear, las figuras que se encontraban en el paisaje eran bastante peculiares, observé a una bailarina de ballet haciendo uno de esos típicos y encantadores pasos, se encontraba entre la espesura del bosque, casi camuflada, pero podía verse lo suficiente como para apreciar los suaves trazos del pincel.

Habían animales casi de todo tipo perfectamente ubicados, y también un hombre, este se veía mucho más que la bailarina, está sentado en el pasto con un libro en manos.

Podría pasarme horas y horas describiendo está obra, está tan concentrada en ello que no me dí cuenta que Edward llevaba un rayo mirándome.

-¿Te gusta?-

- Yo... Es lo más bello que halla visto. Me encanta.

-¿Qué es lo que más te gusta?

- Diría que el contraste tan perfecto de colores, de emociones y figuras.

- Emociones... Entonces te transmite lo mismo que a mí.

-¿Que te transmite?

- Veo que el artista tenía muchas cosas en su cabeza, muchas ideas y al mismo tiempo muchas emociones en su corazón, eran tantas que no pudo hacerlas una por una, tuvo que plasmar todas en una sola pintura.

- Eso es lo que pienso del cuadro, pero lo que siento respecto al cuadro, a pesar de haberlo visto por primera vez... ¿Será lo mismo que sientes respecto a el?

- Pues... Lo que siento es bastante complejo, pero sé que es increíble, siento como la fuerza y la delicadeza se juntan... Como la vida, como la alegría y la tristeza, como la seguridad y el miedo, es perfecto, es como haber llevado todos esos conceptos a lo físico, porque podemos verlo y sentirlo al mismo tiempo, es... Es increíble.

- Siento lo mismo.

Me levanté sin decir nada y me dirigí hacia el anciano.

- Buenas tardes señorita.

- Buenas tardes, quiero llevarme ese cuadro le daré lo que sea por el.

- Mmmmm ese cuadro es especial, y a pesar de estar aquí, el artista me pidió que no lo vendiera.

-¿Como? ¿Entonces no está a la venta?

Noté que el anciano observaba de reojo a Edward a lo lejos, es como su estuvieran hablando con la mirada.

- Señorita, haremos lo siguiente, no se lo voy a vender.

-¿Por qué?- interrumpí.

- Se lo voy a obsequiar, veo que es especial para los dos y lo mejor será que lo tenga usted, se porqué se lo digo.

- Enserio muchas gracias.

El anciano tomó el cuadro y lo puso en una bolsa de tela, salimos de la galería, ya estaba oscuro.

- ¿Ahora iremos a casa?- pregunté.

- Creo que iba a llevarte a alguna fiesta o algo parecido, pero no tenía planeado traer con nosotros algo tan valioso como ese cuadro.

- ¿Entonces que hacemos?

- Tengo una idea, sígueme.

Caminamos otro poco y se detuvo en un puesto de crepes rellenos, compró un par rellenos de chocolate y me dió uno.
Fuimos caminando comiendo, hablando y riendo.
De repente comencé a apreciar a Edward físicamente, tenía características bastante bellas, pero no me dejé llevar por mis pensamientos, lo último que quería en este momento era terminar enamorada y no ser correspondida o quién sabe que otras cosas.

Pasaron un par de horas o más mientras íbamos vagando por las calles, observando tiendas, hablando de todo tipo de cosas, que... No me dí cuenta de que había pasado tanto tiempo hasta que noté que las calles estaban ya casi vacías; miré la hora en mi celular. 9:30 de la noche. Era demasiado tarde, ¿En qué momento se pasó todo ese tiempo?

-¿Que sucede Vicky?

-¿No te parece que es muy tarde?

- No. La verdad no - dijo sonriendo, ¡Esa sonrisa terminaría por volverme loca!

- ¿Entonces? ¿Planeas que sigamos vagando por ahí?

- ¿Quién dijo que estábamos vagando por ahí? Solo aún no hemos llegado a nuestro destino.

- Okay... ¿Cuánto falta para llegar?

- Ya casi.

Caminamos otro poco en silencio.
Comenzamos a subir unas escaleras loma arriba. Finalmente llegamos a un pequeño mirador, pero parecía que casi nadie iba allí.

- Este es el lugar.

-¿Que tiene de especial este lugar?

Edward me tomó de los hombros y me giró para poder ver el resto de la ciudad, era una vista muy bella.

-¿No te parece hermoso?

- Lo es...

- Me gusta mucho venir aquí, es de los pocos lugares que conozco de la ciudad y quizá es de los más hermosos en los que halla estado.

-¿Como puede ser eso?

- No es tanto lo bello de la vista, al igual que el cuadro, se trata de lo que me hace sentir. Aquí puedo estar solo y pensar, aquí me siento bien, aquí de siente bien estar vivo.

- Creo que nunca tampoco había estado en un lugar que me hiciera sentir así.

De repente me toma de la mano y se pone en frente de mi.

- Por eso eres especial Victoria, no se trata de lo bella que puedes llegar a ser, debo aclarar que ciertamente lo eres y mucho, se trata de que a tu lado se siente bien estar vivo, pequeña.

Creo que hice un buen trabajo conteniendo el tornado de emociones y sentimientos que lo que acababa de decir Edward me producían, mientras me miraba con esos enormes ojos marrones.

- Yo... Creo que eso es muy... No sé cómo decirlo.

- Es muy bonito, como tú.

No pude responder a eso, así que el mismo lo respondió de nuevo con una sonrisa.
Después de eso tomamos un autobús hasta mi casa, ya que era demasiado tarde como para regresar a pie, fuimos escuchando música, compartiendo mis audífonos, y la canción era perfecta.
Estábamos sentados ahí cantando rock with you de Michael Jackson y de la nada el mundo no existía, solo éramos los dos en un momento dorado y perfecto, e imagino la tortura que las personas del autobús pasaron al oírnos "cantar".

Llegamos a mi casa y antes de entrar, Edward se despidió de mi.

- Bueno, supongo que nos veremos el lunes o su quieres me llamas y nos vemos cuando quieras.

- Su claro, ¿Porqué no te quedas?- dije en tono sarcástico.

-¿Eso se puede? Pues déjame pasar- dijo en un tomo aún más sarcástico, este chico su que me entiende.

Me voltee para entrar a mi casa y siento como vuelve a tomarme de la mano, así que regreso hacia el y veo que está casi encima mío.
Avanza delicadamente a mi rostro, pensé que me besaría y no supe cómo actuar, así que no hice nada, pero no fue así, dejó en mi mejilla un suave y marcado beso que hasta el momento no logro olvidar como lo sentí, después de eso solo se alejó lentamente mirándome a los ojos y se fue.

Enamorada de ti y los demás (Transtorno de personalidad múltiple) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora