¡¿Somos pareja?!

2.6K 277 78
                                    




-Es un tanto incómodo, pero ya me acostumbraré- dijo Sero, ocupado mientras abría su caja de comida. Yo hice lo mismo, cuidadosamente separé los palillos y me llevé los pequeños trozos de sushi a la boca. -¿De qué hablaban con las chicas?- preguntó, repentinamente. En un esfuerzo por no atragantarme, respiré hondo ante esa pregunta tan desprevenida. ¿Qué podía decirle?, ¿Que se estaban mofando de mí diciendo que tenía una cita?, ¿Que creían que Sero era mi novio?. -No es nada...el brazalete de Ochako era muy bonito...y estaban emocionadas por eso- respondí sin convicción alguna, cosa que él notó, pero no parecía importarle. -A todo esto, ¿Por qué estás aquí?, estoy segura que almorzar con Kirishima y Kaminari es más divertido que hablar conmigo- pregunté entre risas, esperando a ver su respuesta, que no era nada más que una cara seria. -Yo no creo que seas aburrida- dijo, muy sugestionado. -Eres una de las chicas más interesantes que he conocido, T/N-. Me sonrojé al instante, ¡Era la primera vez que un chico decía algo bonito sobre mí!. -Yo...hem...gracias...- contesté tímidamente. Nos callamos un momento y cruzamos nuestras miradas. En Finlandia existe la creencia popular de que el silencio es una forma más de comunicarse, nunca había entendido esa forma de pensar hasta ese momento. Cuando Sero me miraba, sentía que de cierto modo, trataba de decirme algo sin mover los labios. El silencio que debería ser algo incómodo o embarazoso, se convirtió en un momento de paz y comprensión.

-Oye, sé que suena un tanto indiscreto pero...¿Crees que Deku y Uraraka son novios?-. Salí abruptamente de mi fantasía silenciosa, aún sin creer lo que me estaba diciendo. -¿Qué?, esto...bueno, no lo sé. Puede ser, tampoco tengo mucha idea de lo que hagan o dejen de hacer esos dos. ¿Pero qué te hace pensar eso?- aquel tipo de preguntas siempre me dejaban pensando. -La forma en la que se hablan y se tratan no deja mucho paso a la imaginación- exclamó entre risas. Yo también reí, recordando las múltiples veces en las que Uraraka se sonrojaba al ver a Deku y viceversa. -No lo sé, ¿Qué hacen las parejas usualmente?- interpeló como si no tuviese ni idea. Lo medité un rato -Cosas como... besarse, abrazarse, llamarse nombrecitos cariñosos, estudiar juntos...- me paré en esa última estancia, al ver lo que estaba diciendo (¡Pero si eso era justamente lo que ambos hacemos, idiota!). -¡Eso es!- dijo él, inocentemente, como si la bombilla en su cerebro se hubiese encendido -¡Estudiar juntos!, ¡Ellos lo hacen bastante a menudo!-. Su cara se iluminó como si hubiese descubierto la penicilina, y reía al darse cuenta de que todo tenía sentido. -Y yo que creí que Deku ya tenía algo con Todoroki. Espera...- bajó un momento de su nube de ilusión. -Entonces, ¿Eso significa que nosotros somos pareja?, después de todo, estudiamos juntos-. Escupí inmediatamente el jugo que tenía en la mano, a la par que mi cara no hacía más que calentarse, poco a poco. Lo miré muy sonrojada y confudida. -¿Q-Q-Qué?- musité, nerviosa. -¡Si, eso es!, ¡Somos una pareja!, ¡Una bonita pareja!-. Como se imaginarán, en este punto yo quería que me tragase la tierra o al menos, que se estuviese refiriendo a otra cosa. -¡Somos una gran pareja de amigos!- terminó, dando el golpe definitivo, con el cual casi me desmayo. -Oye, ¿Te pasa algo?- preguntó extrañado, al verme tan quieta y con las mejillas como dos tomates. -¿Estás bien?- dijo, poniendo su mano en mi frente, lo cual me inquietó aún más.

Me levanté abruptamente de mi lugar, sintiéndome incapaz y sudorosa, pero sobretodo, nerviosa. -Disculpa, ahora que lo recuerdo, dejé mi caja del almuerzo en clase y debo ir a por ella, ¡Hasta luego!- y corrí, corrí como nunca en mi vida, corrí como si un monstruo gigante me estuviese persiguiendo (en teoría si lo estaba, ese monstruo se llamaba vergüenza). Corrí y corrí, sin mirar atrás. -¡Pero tu caja de bentō está aquí mismo!, ¡T/N!, ¡T/N!- escuché a Sero gritar en la distancia. Giré en una esquina, mirando hacia atrás para ver si Sero me estaba siguiendo, cosa que no hacía. Agotada, sonrojada y jadeante, me senté en un escalón. Me dolía mucho la cabeza, no sé si por haberme levantado tan rápido o por todos los pensamientos que surcaban mi mente. Ahora que había parado, estaba completamente mal. Tenía nauseas, me dolía la cabeza, estaba hecha un desastre.

Entre toda la confusión traté de levantarme, pero caí al instante, sintiendo como un agudo dolor incrementaba en mi pecho. Sujeté mi corazón, intentando respirar más profundamente, pero fue en vano, porque volví a caer, desmayada.

Y todo se volvió negro...

Vaya, vaya, vaya, ¿Tú otra vez?, ¡Qué fácil es hacerte dormir!. Eres tan inútil que no puedes estar ni cinco segundos sin desmayarte, T/N.

¡Cállate, no sabes nada!, ¡Eres sólo un producto de mi imaginación!, ¡Estás en mi mente!, ¡No eres real!

¿Te parece que algo que es "sólo un producto de tu imaginación" no se va, a pesar de todos tus estúpidos intentos y pastillas?, ¿Acaso un "producto de tu imaginación" aparece en todas y cada una de tus pesadillas?

¡No sabes nada de mi!

Claro que lo sé T/N, después de todo, yo soy tu

Cierra la boca Aiko, eres insoportable.

~•La tutora (Hanta Sero x Reader)•~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora