El examen

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No era un examen teórico, era peor, porque en un examen teórico sólo tienes que estudiar ciertas cosas y en caso de que no sepas nada, podrías copiar...o algo así. Pero cuando tienes un examen práctico, es completamente impredecible. No sabes qué van a hacer, no sabes con quién te van a poner, y lo más estresante de todo: Cualquier cosa puede suceder.

Con motivo de esto, me levanté bastante triste. Podía pasarme horas hablando de Ray Bradbury, Franz Kafka, Ozamu Dazai o Scott Fitzgerald, pero si me preguntabas por formas de entrenar o estrategias de pelea, mi mente se quedaba en blanco, blanco como las vendas que llevaba Aizawa sensei al cuello, las cuales yo miraba preocupada en vez de escuchar la explicación del exámen. -Por lo que, deberán atravesar esta simulación de un bosque junto a su compañero, para así poder pasar todos los obstáculos, llegar a la meta y gan...¿T/N?, ¿Pasa algo?- me desperté de mi estado catártico, Aizawa sensei y la clase me estaban mirando...¡Estaba soñando despierta de nuevo! ¡Mierda!. -Si, si...claro, perdón...estaba pensando en la consigna del examen, lo siento- respondí, intentando ocultar mi vergüenza. A continuación Aizawa empezó a sortear los equipos de forma completamente aleatoria. Tendría que permanecer al lado de mi compañero siempre, ayudarlo si tenía algún problema y sobretodo, llegar a la meta con él, ya que si no llegaba el par completo, no contaba.

-Empezaré a formar las parejas- anunció Aizawa. El sistema se basaba en una urna, de la cual salían los nombres al azar. Ya iba por la tercera pareja así que sacó otros dos papeles, los observó y exclamó -Cuarto grupo: ¡Sero Hanta y (T/N) (T/A)!-.

Un leve sonrojo comenzó a recorrer mi cara...entre toda la clase, ¿Y justo con él debía tocarme?, ¿Qué pasaría si yo cometía alguna torpeza, o si veía mi quirk y se asustaba?, ¡Yo quiero acercarme a Sero, no alejarlo!. Pero estos pensamientos se evaporaron mientras este venía hacia mí, sonriente como siempre. -Menuda casualidad, ¿No?, bueno seguro que con mi quirk de cintas y tu astucia, quedaremos en primer puesto- su positividad era admirable, lo miré encandilada mientras respondía. -¿De verdad crees que juntos podemos ganar?- él asintió con la cabeza, inspirándome una vez más, a creer en su palabra. Nos colocamos en la línea de salida junto a los demás esperando a que el marcador sonase, y así lo hizo. 3...2...1...¡Comenzaba la carrera!

Poco tiempo pasó hasta que nos adentramos en lo profundo del dichoso "bosque", cuyo follaje no nos dejaba ver más allá de las copas de los árboles y tampoco daba mucho paso a la luz, que digamos. Intenté aguzar el oído para ubicar nuestra posición exacta, lo cual fue en vano, aunque sentí que Sero intentaba hacer lo mismo. -Presiento que debemos ir hacia el norte- dijo, señalando a un punto no muy claro. -Pues yo propongo que busquemos un punto alto como...ese árbol de ahí- dije, apuntando a un árbol más grande que el resto -Si esto realmente se asemeja a un bosque real, no todos los árboles tendrán la misma altura- respondí. Sero estaba de acuerdo, y sorprendido a la vez. -¿Ves?,¡Te dije que con tu inteligencia podríamos ganar! y ahora que lo has probado, toca usar mi quirk- sin aviso alguno, dirigió sus cintas hacia el árbol, me sujetó contra su pecho y nos elevó hasta allí. Tan bien me tenía sujetada que podía oir sus latidos...rápidos y profundos.

Al llegar a la cima, todos se hizo más claro. Nos encontrábamos casi en el centro del bosque, pero pudimos notar cómo otra pareja se nos adelantaba a pasos agigantados: la de Bakugou y Kirishima. -Parece que Bakugou se toma estas cosas en serio-dijo Sero, viendo al chico rubio desde la distancia. -Se toma todo muy en serio- respondí yo, riéndome. -Si no lo alcanza una de las trampas, es por pura suerte, nada más- volvió a decir. Ya viendo la dirección que queríamos tomar (que era dirigida más hacia el sur) tratamos de bajar del árbol para seguir a pie. -Bueno,  tú usa tus cintas,  yo ya veré cómo me las apaño. Nos encontramos en punto un tanto... complicado- dije, esperando a que Sero se marchase, pero en vez de eso, me miró confundido. -¿Que baje primero?,  ¿Y tú que vas a hacer?, ¡Tu quirk no te permite pasar entre lugares como el mío!, ¡Podrías hacerte daño!- dicho esto me cogió entre sus brazos -¡Si bajas saltando, puedes lastimarte gravemente!- dijo y me cargó hasta tierra. Una vez más, mis mejillas se tiñeron de un color rojizo, ¿Es que esto se iba a convertir en una rutina?

-Ya va media hora que caminamos y no ha pasado nada- decía Sero, a la vez que apartaba unas ramas de su cara. -No saques conclusiones rápidas, he escuchado a alguien gritar... parece que hay una especie de minas esparcidas por el suelo- dije yo. No me sorprendería que al sensei se le hubiese ocurrido ponerlas como obstáculo, después de todo, son un arma tan peligrosa como indetectable. Como nos aproximábamos a la linde del bosque, empezamos a correr más rápido, al no haber árboles cortándonos el paso.

pi... pi... pi

Un pitido cuya rapidez aumentaba sonó debajo de mis pies. -Esto es... - empecé a decir, con terror en mi rostro.-¡Cuidado!- gritó Sero, quien estaba a unos pasos de mi. La mina explotó con tanta fuerza que no tuve tiempo de reaccionar. Mucho polvo se levantó a mi alrededor y lo único que pude sentir fue mi cuerpo cayendo de espaldas y rodando varias veces contra el suelo.
Luego, todo se volvió negro. A pesar de que los gritos de Sero se escuchaban a la distancia.

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Hellouuuu
Menudo capítulo,  ¿No? 😆
Estoy intentando pensar más ideas para la historia (además de la idea central) que ayuden al desarrollo romántico. UwU
De todas formas,  espero que les esté gustando. Y si se preguntan por qué no dije nada sobre cómo se veía el traje de heroína de la protagonista, es porque lo dejo a la imaginación del lector -w-
Sayonara! 💜

~•La tutora (Hanta Sero x Reader)•~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora