Una historia de amor que jamás dejará de ser escrita

CAPITULO 8

CAPITULO VIII

-Prométeme que dejarás que ahogue hoy mis penas, estoy aburrida de ser la niña buena siempre -dice Chloe agarrando un chupito.

Comienzo a reír.

- ¿Tú?, ¿niña buena? -río de nuevo- Tu eres la que me está llevando hacia el camino del mal, mira en donde me encuentro -señalo el club- yo no salía... y te debo las gracias, ¿no? -la miro y le sonrío.

-Las gracias y más que eso -me abraza; está muy dulce después de su chupito numero... ya hasta perdí la cuenta.

Realmente mi amiga se ve desecha, ella es una chica fuerte y demuestra que nadie la puede dominar; me preocupa verle así.

-Chloe, sé que me matarás por preguntarte esto, pero me preocupa verte así y no saber el porqué de tu actual situación. -me mira frunciendo el ceño - ¿Es por un chico? -me atrevo a preguntar.

-Desgraciadamente si... ¿quien puede creerlo?, Chloe Braun desecha por un chico -ríe sin gracia e intento buscar en mi mente uno de los tantos consejos que me dieron mis hermanos y ella cuando me sentía así,

-Eso a veces es bueno, por fin has encontrado el amor Chloe -intento alentarla.

-No cuando ese es uno de los chicos que no se fija en eso, solo calenturas Blue, nada más, nunca en palabras de amor y gestos; no. -se lamenta y mira hacia la pista de baile en donde se encuentra un gran grupo de personas bailando - Y menos cuando convives con él todos los días y te das cuenta de que es imposible que cambie. Sam nunca cambiará -hace un bufido y mete su cabeza entre sus manos.

Abro los ojos de manera sorpresiva, Dean y yo no nos equivocamos en cuanto a los sentimientos de Chloe, pero aún nos falta saber lo que piensa Sam; aunque mi amiga no se dé cuenta, mi hermano ha cambiado su manera de actuar cuando está con ella, es un poco más preocupado y dulce. Además de que Sam, aunque no esté en una relación con ella la respeta, según me ha comentado no ha salido con una chica desde hace rato.

-Chloe, tú puedes cambiar su forma de pensar, haz que se enamore; conquístalo y hazle saber que tu estas ahí para él. -le aconsejo mientras toco su mano- tú vales mucho y creo que él se ha dado cuente de eso. -le sonrío intentando darle apoyo.

Da un largo suspiro.

-Lo intentaré -dice no tan convencida poniéndose de pie y halándome por el brazo para bajar de la VIP a la congestionada pista de baile.

Cuando llegamos a esta comenzamos a mover nuestros cuerpos al ritmo de la música realmente de manera enérgica, así dejando por terminada la conversación sobre su estado amoroso.

La música de Afrojack suena en cada centímetro del club y la complementaría a la perfección una pareja de baile como Dean, el realmente sabe cómo moverse en pareja.

-Me alegra saber que puedo contar contigo -me grita para poder escucharla.

-A mí también me alegra tenerte cuando te necesito -la abrazo y comenzamos a saltar imitando a los demás.

Después de una larga lista de canciones bailadas en la pista, volvemos a nuestra mesa y Chloe se toma su ultimo chupito para irnos, yo solamente tomé dos Smirnoff, tenía que cuidar a mi enérgica amiga.

- ¿Qué hora es? -pregunta mientras caminamos hacia el carro ayudada por mis guardaespaldas.

Saco mi celular y veo varias actualizaciones de Instagram, además de mensajes que no sé cuando llegaron.

-Dos y treinta de la madrugada -respondo y guardo de nuevo mi celular para ayudar a mi amiga a entrar en el carro y volver a casa.

Apenas llegamos a casa Chloe entra a su habitación y se acuesta a dormir en esta sin cambiarse; le quito los tacones e intento quitar su tan apretada falda. Apago la luz y regreso a mi habitación.