Capítulo 14

787 123 22
                                    

—¿Dónde estabas?

La voz aguda que salió de la oscuridad lo hizo sobresaltarse. Encontró la mirada rojiza de Kirishima sobre su persona, quién repentinamente había encendido la luz baja del cuarto. 

—Trabajando. Te dije que tengo que cubrir a la chica que me ayuda en el bar—dijo con desinterés.

Pero el pelirrojo no parecía feliz con la respuesta.

—¿Me estás...siendo infiel?

—¿Ah?

—Bakugou...nunca me dices que me amas.

—Te lo dije una vez. Si dejo de hacerlo te aviso.

—¡Eso fue en secundaria!

Suspiró hastiado. Ya suficiente tenía con aguantar al estúpido ex héroe número uno y ahora debía hacerlo con las malditas quejas de su novio. Llevaba semanas llegando tarde a casa,

"—Sería una lástima que alguien se enterara de tu pequeño y sucio secreto—la mirada que le dirigió al rubio cenizo lo hizo estremecer ¿Qué sabía exactamente?

—No sé de qué estas hablando.

—Tu sabes—dijo relajado—la escoria como tú, que no hizo mas que caer ante la desesperación. Tu, que eras un héroe, decidiste a consciencia dañar a otros con la pobre excusa de ayudar a la sociedad solo con el fin de desatar esa violenta actitud tuya ¿No te suena mas como a un villano?

Por primera vez se quedo en blanco. Su sangre se heló por un segundo. Un tipo como Todoroki Enji, quien había investigado y resuelto el mayor número de casos en la historia de Japón.

¿Cual era la probabilidad de que supiera de los crímenes de Katsuki?

Muy alta, a decir verdad. Pero, ¿Cómo?

—Si no quieres que cierren tu "legitimo negocio", entonces sirveme otro trago. "

Y así fue como Bakugou se convirtió en la perra personal de Endeavor: debe de esperar hasta las tantas de la madrugada a que el maldito pelirrojo se emborrachara entre cantos desafinados y risas hasta quedar casi inconsciente para luego enviarlo a casa en un taxi.

Nunca había visto a un hombre disfrutar tanto de un Karaoke.

Por supuesto, el rubio era obligado a cantar también, mientras que tímidamente Touya mas y mas bebidas a su alcoholizado padre.

Sería fácil para Katsuki deshacerse de él, teniendo en cuenta el estado de vulnerable durante su embriaguez. Pero su desaparición resultaría demasiado sospechosa. Tampoco podía usar de rehén al pelirrojo mas joven, o Enji podría delatarlo y/o asesinado en cuestión de segundos con solo un movimiento de su mano.

Y no es como que demostrara mucho interés hacia su propio hijo, a fin de cuentas.

Por primera vez estaba entre la espada y la pared.

—Bakugou, me siento solo.

Por primera vez se dedicó a mirar con detenimiento al héroe Red Riot. Su héroe, que extendió sus brazos en dirección al rubio, invitándolo a un abrazo. Aceptó su ofrecimiento con gusto. 

No debía perder el foco. Para Bakugou, Kirishima era su motor de marcha. La razón por la cual hacía lo que hacía.

Y quien exprimía las últimas gotas de humanidad que le quedaban al rubio.

—Perdoname—sentía que con él, todo se solucionaría.—Prometo que una vez todo esto termine, tomaré un par de días libres.

—¿Solo nosotros dos?—preguntó con ilusión el pelirrojo.

—Solo nosotros dos.


Villain BakugouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora