Perdóname Emilio

215 16 3
                                    

NARRADOR

¿Cómo continuas tu vida? cuando una de las estrellas más importante deja de alumbrarte tu camino? 

Emilio en ningún momento dejo de abrazar el ataúd en el cual estaba su mamá... Su padre su padre trataba de estar de pie aunque sentía que en cualquier momento se derrumbaría, el amaba a su esposa y lo que más le dolía es que ya nunca más se lo pudo decir en persona... Y Joaquín realmente estuvo para Emilio, en momentos se acercaba con él para ofrecerle algo de comer y de esta manera sintiera su apoyo; de repente Emilio se acercaba con Joaquín necesitando su consuelo, sus brazos, su pecho para poder llorar, se preguntaba ¿Qué sería de él si Joaco no estuviera aquí en este momento?

Todos hemos pasado por un dolor tan grande al perder a un ser querido, pero todo duele más cuando tienes que dejar a esa persona en un lugar bajo tierra porque sabes que ya no regresarás con ese ser querido, que él se quedará ahí y tú tendrás que continuar tu vida... Así fue lo que sintió Emilio al estar dejando a su madre en ese lugar... Sintió que le faltaba el aire y recuerda haber visto a su madre y a su hermano frente a ellos antes de perder el conocimiento... Joaquín realmente estaba sufriendo con Emilio ¿Por qué siente la necesidad de protegerlo ante todo?

EMILIO

Veníamos de dejar a mi madre en ese lugar en donde también estaba mi hermano; estaba tranquilo porque mi hermano y mi madre ya estaban juntos, pero yo me sentía incompleto sin ellos y no se que será de mi después de esto, pero de algo estoy seguro y es de que ya no quiero sufrir más, aunque no se si hay dolor más fuerte que esto. 

Hablé con mi padre y llegamos a la conclusión que lo mejor era que nos fuéramos de Madrid o jamás dejaríamos ir a mi madre y a mi hermano.

    JOAQUÍN

Tengo la necesidad de protegerlo sobre todas las cosas, ya no puedo dejar que la vida lo siga jodiendo y lastimando y realmente no lo quiero dejar solo aquí en Madrid, pero tampoco es que yo me pueda quedar aquí... Necesitamos una solución lo más pronto posible.

NARRADOR

Emilio estaba acostado en la cama de su madre abrazando el vestido preferido por ella, Joaquín había bajado para hacerle algo de comer y él no se pudo negar aunque no tuviera nada de hambre. Mientras su mirada estaba perdida en su panorama apareció algo que figuraba una carta, se levantó a tomarla y comenzarla a leer, pero espero a Joaquín para sentir su apoyo... Cuando este llegó comenzó a leer en voz alta:

"Todavía no entiendo. No te juzgo, pero... ¿Qué no pensaste en cuánto sufriríamos nosotros? ¿Por qué tomaste esa decisión tan violenta? Son preguntas que me hice en medio de mi rabia y mi impotencia. Esas preguntas y otras tantas me han causado cansancio, insomnio, tristeza. ¡Se supone que yo muriera primero!  Sigo guardando tus cosas. Me dicen que las regale, que me deshaga de ellas, pero no puedo. Ya llegará el momento. ¡Necesito vivir mi duelo! Al verlas, parece que te veo, que te oigo, que andas por la casa, que te sientas a comer con nosotros . Emilio, te amo con toda mi vida, pero siento que Adrián me necesita más ahora; espero que entiendas hijo y que algún día me llegues a perdonar; no estarás solo, yo y tu hermano estaremos en cada paso que des, pero ya no puedo seguir viviendo sin Adrián... Te amo y te amaré después de la muerte... Perdóname hijo, en verdad perdón"

Sin darse cuenta Joaquín ya estaba abrazando a Emilio con una sobreprotección que le hacía tanto bien a Emilio, después de un momento este se acomodó, miro a Joaquín y pronunció las siguientes palabras: 

Emilio: No quiero estar más en Madrid, si continúo aquí en esta casa me volveré loco ¡Los veo por todos lados!

Joaquín: Emi, ya lo había pensado, pero necesitaba saber tu opinión ¿Te gustaría irte a Barcelona conmigo? Te podría dar posada en el hotel, se que mi padre te apoyará después de todo

Emilio: Joaco, quiero estar siempre a tu lado, te volviste parte fundamental de mi vida... Así que sí, me voy contigo para Barcelona

Amor vengativoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora