𝕺𝖓𝖊 𝕾𝖍𝖔𝖙𝖘 𝖁𝖊𝖌𝖊𝖇𝖚𝖑 - 𝖁𝖊𝖌𝖊𝖙𝖆 𝖞 𝕭𝖚𝖑𝖒𝖆

Meresco mas

El matrimonio más joven de la Corp. Capsule se encontraba recostado en la cama de su habitación viendo un programa de TV.

La peli azul abrazaba el torso de su esposo con ambos brazos, mientras reposaba la cabeza en su hombro, Por su lado el peli flama rodeaba a su esposa con un brazo mientras tomaba su mano con la otra.

En realidad no estaba prestando mucha atención al televisor, estaba concentrado en aspirar el olor del cabello de su esposa. Único olor que lo calmaba al punto de la relajación total.

-¡Vegeta!-La voz de la peli azul lo saco de sus pensamientos- ¿Escuchaste lo que te dije?-Pregunto apoyándose en sus codos sobre la cama

-Para serte sincero, no-Contesto el con tranquilidad

Ella rodo los ojos y volvió a su posición inicial

-Te hablaba de mi fiesta de cumpleaños-Prosiguió a decir- Aun no sé qué hare, No se cumplen 48 todos los días

-Eres buena en eso, seguro se te ocurrirá algo-Dijo restándole importancia

-¿Vegeta...tú crees...?-Fue interrumpida

-No Bulma, no creo que te veas vieja, eres la mujer más jodidamente perfecta de esta maldita ciudad-Dijo el con naturalidad

Tenía claro que su esposa llevaba días rondando ese pensamiento. A veces su paciencia no resistía tener largas charlas por un tema tan "Sin sentido" como le decía el, no lograba comprender porque Bulma se sentía de esa forma si aún se mantenía mejor que muchas quinceañeras.

-Oh...gracias-Dijo ella con una sonrisa ruborizada

En la apego más a su cuerpo y dejo un beso entre sus cabellos.

-Supongo que invitaras a todos los inútiles y a sus familias ¿No?

-Son mis amigos Vegeta, además ese es el punto de una fiesta de cumpleaños. Pasarla con aquellas personas que te quieren-Dijo ella con naturalidad

El príncipe se quedó pensando un momento mientras fruncía levemente el ceño como si algo no le cuadrara. Pero Bulma jamás espero lo que él dijo a continuación

-Entonces, ¿Porque no lo pasas solo conmigo? ellos te quieren, pero yo te amo, tengo más derecho-Dijo como si de algo obvio se tratara

Bulma levanto las cejas mientras intentaba procesar las palabras de su marido. Finalmente suspiro y dejo que una radiante sonrisa se apoderara de su rostro, se acercó un poco y le dio un dulce beso a su esposo.

-Yo también te amo-Dijo llena de alegría y con el alma enternecida

Y era así, las muestras de cariño del príncipe no eran muchas, pero cuando aparecían lograban en Bulma una explosión de emociones.