Angel ; Tayler Holder

Chapter Six

6. PSICHOLOGY

Que Tayler y Angel pasen tiempo juntos ya es costumbre y casi todos los días se van por ahí para dejarme un poco de tiempo libre.

- ¿Y lo perdonaste así como así? - pregunta Ondreaz con la ceja enarcada y asiento llevándome una golosina a la boca.

La dieta que me había mandado Tayler era tortuosa.

- Admito que pensaba que ibas a entrar en crisis y a ponerte a llorar y a romper cosas pero una vez más me has demostrado que eres más madura de lo que pensaba - dice Tony y aparto con mi pie un trozo de jarrón roto que había en el piso. Puede que me haya entrado un poco de crisis - Entonces Ángel está con Tayler ¿cómo se lo tomó? Cuéntanos mujer, no nos tengas en esta incertidumbre - dice este intentando robarme una golosina y aparto el paquete de una forma brusca. Con mis chuches no.

- Se lo tomó bien, dice que quiere hacerse cargo de ella, comenzó a besarme por toda la cara y a decirme que lo había hecho el hombre más feliz del mundo y esas cosas que debería haberme dicho hace dos años cuando se enterara de que Ángel venía al mundo - me encojo de hombros y estos se miran entre sí.

- ¿ya se acostaron? - dice Tony extrañado y ruedo los ojos fastidiada - Vale, eso es que no, ¿un beso? - vuelvo a mirarlo mal - eso es que no pero que ya lo intentó, cuéntanos lo que te atormenta, te molesta o te perturba Faithi - dice este sentándose como un psicólogo y le dedico mi mejor cara de asco.

- El se disculpó y lo peor de todo es que por mi maldita cabeza se pasó perdonarle en el momento y olvidarnos de todo, pero no, eso no puede pasar, básicamente porque él ne dejó sola y criando a una bebé, así que no se lo voy a dar todo hecho ¿verdad? - digo mirando al techo y sé que estos dos ahora mismo estarán pensando que estoy loca y que aún no supero a Tayler y bla, bla, bla... aunque es cierto pero no me juzguen.

- Les doy un mes para volver - dice Ondreaz apuntando a su hermano con la cerveza que tenía en la mano y Tony se la arrebata para darle un sorbo. Les dedico una de mis peores miradas y Tony ríe - A ver, no digo que esté mal ni nad por el estilo, Tayler y tú están hechos para estar juntos y todos los sabemos, creo que deberías perdonarle y ya está, que seáis felices con vuestra pequeña piraña - dice este extendiendo sus brazos en el aire.

Ya claro, como si fuera tan fácil.

- No es tan fácil idiota, obviamente no voy a ponérselo tan fácil, no puede desaparecer y luego aparecer y puf, todo resuelto porque eso sería de ser una chica poco dependiente y que no puede vivir sin su hombre - estos se miran entre sí y luego miran a los lados disimulando - ¡Yo no dependo de Tayler! - grito enfadada y estos se rascan la nuca nerviosos.

- No dependes de él pero desde que ha vuelto comes, sonríes más y si digo su nombre te pones roja mira ¡Tayler! - dice Ondreaz y me sobresalto abriendo mucho los ojos mientras siento el color subir a mis mejillas - Te lo dije - este se tapa la cara con su mano mientras hace morritos.

- Vale, puede que Tayler haya cambiado un poquito las cosas pero eso no significa que tenga que perdonarle - les señalo enfadada y estos ponen las manos en alto como si estuvieran detenidos - ¿no? - pregunto tirándome en el sofá y dejando mi cabeza en los muslos de Ondreaz que comienza a acariciar mi pelo de una forma maternal.

- No tonta, te diré lo mismo que le dijo la abuelita de Alta Gracia a Carmen Lorenza - se aclara la garganta y prosigue - Tu has lo que dicte tu corazón mijita, da igual que ese karnal sea el patrón del rancho o un vendedor de elotes, sigue el latido de tu corazón - dice este en tono mexicano y lo miro con los ojos entre cerrados, eso no me lo esperaba.

El sonido de la puerta nos alerta de que ya están aquí y rápidamente me pongo en pie colocándome el pelo mientras me llevo miradas divertidas de Tony y Ondreaz.