《1》

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Alguna vez te has preguntado, ¿cuál es el sentido de la vida? o ¿el motivo por el qué estamos aquí?. En mi juventud me realicé esas preguntas, y siempre terminaba sin respuestas.
Con el pasar del tiempo creí que había encontrado las repuestas, pero la verdad estaba lejos de encontrarlas.

¿Por qué?, porque lo descubrí de la peor manera que pueda existir, y ese pequeño descubrimiento me llevó aceptar mi patético y aburrido presente, ¿Por qué lo digo nuevamente?, verás, estoy en un lugar que jamás creí que estaría, resalto que no me desagrada, solo es que...me visualizaba un futuro diferente, ¿comprendes?

Y bien, aquí estoy en un pequeño espacio en donde la brisa mañanera toca mi rostro con sutileza, mientras me sumerjo en mi fantástico mundo alterno en donde soy una importante doctora en la mejor ciudad del país.

Pero al sentir un suave roce en mi hombro regreso a la realidad en donde soy solamente la encargada en ventas de una respetable editorial en  la ciudad de Virginia, así es, mi sueño no se cumplió, aunque antes lo había dicho no me quejo ya que aprendí a amar lo que hago.

—Bri, perdona que te saqué de tu mundo, pero el editor te busca, quiere revisar el informe — ese era Thomas, mi mejor amigo o mejor dicho mi único amigo en la editorial, estaba frente a mi sosteniendo un café con su mano, su rostro delataba lo frustrado que se encontraba — te busqué por todos lados mujer — se quejó y reí bajo.

—Lo siento, me sofoqué ahí dentro, necesitaba un poco de aire — contesté un poco cansada, llevaba días sumergida en ese informe ya que la persona que debía hacerlo renuncio por un escándalo, según las habladurías, tuvo una aventura con el jefe principal, sinceramente el romance era lo de menos, lo que me cabrea es que esa persona al renunciar, provocó que mi trabajo se duplicara en gran manera, siendo de este modo que viviera literal en la editorial, llevaba días sin ir a casa y eso me tenía un poco estresada —se lo enviaré pronto — dejé salir un fuerte suspiro y volví a la oficina seguida de Thomas, tomé asiento y encendí la computadora para enviar el informe que tantos problemas me dio.

—Te veo muy distraída — musito él sentado a mi lado, le gustaba trabajar ahí, aunque su oficina se encontraba en otra sección — es fin de semana, ¿dime que haremos? — preguntó muy animado, sus ojos brillaban con entusiasmo, puedo asegurar que de los dos él era el más fiestero, amaba salir todos los fines de semana y olvidar el trabajo al menos esos días, y en este preciso momento sé que tiene en mente salir de fiesta y yo sería su acompañante.

—Mejor dime el lugar al que iremos — conteste sin reproche, aprendí con el pasar de los años que era mejor no llevarle la contraria cuando de fiestas se tratase ya que Thomas nunca perdía, además no tengo ánimos de discutir nada.

—Ya vas aprendiendo — musitó con picardía y acercó su silla a mi lado y empezó a hablar con rapidez — han abierto un nuevo club y un amigo de un amigo me consiguió un par de entradas — movió sus hombros con mucho entusiasmo.

—¡Wow!, eso es grandioso — contesté sarcástica, sinceramente quería ir, pero me encontraba en mis días, por lo cual lo único que deseaba era estar en casa, pero no podía hacerle un desplante como este a Thomas.

—Talvez y quizás encuentres galán — susurró en mi oído para que ninguno de mis compañeros oyera, enarqué una ceja y lo miré con el ceño fruncido ya que lo menos que deseaba era pasar la noche con un completo desconocido que lo único que busca es meterse entre mis piernas.

—Te equivocas conmigo mi amor — contesté sin chistar — no necesito un galán ya que contigo me es suficiente — para mí, Thomas era todo lo que necesitaba en mi vida, no necesito a un narcisista que en lo único que piense es en sí mismo.

•Una Oportunidad• [TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora