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Kailtyn James

El resto del fin de semana se había pasado demasiado rápido y sin nada interesante digno de ser mencionado. 

Era lunes por la tarde, me encontraba en mi pequeño escritorio de presidenta estudiantil realizando hojas de cálculo sobre las finanzas del comedor. El comedor era manejado por aquellos plebeyos becados. 

–Kailtyn iré a dejar los formularios para inscripción al concurso de equitación. No tardó–.  Joe se dirigió a la puerta después de que respondí un sonido de asentimiento sin despegar los ojos de mi laptop. 

Lila no estaba en la oficina por el momento. 

Escuché la puerta abrirse captando mi absoluta atención. 

Un Shawn molesto se acercaba apresurado a mi. Sostenía un papel en su mano izquierda,  papel que reconocí porque yo lo había emitido para dárselo a Joe y que este se lo diera a Shawn.

–¿Qué clase de burla es está? ¿Etiqueta y buenos modales? ¿Es una venganza tuya? 

–Bien, punto número uno. No es ninguna burla, olvidé incluir la materia en tu anterior horario, tienes que cursar la materia, la compartes con príncipes y otros duques. Es parte del programa.
Número dos, no es ninguna venganza, bájate de tu nube, no me interesas en lo absoluto, somos compañeros en el colegio y ya.
Y punto número tres,  se te está haciendo costumbre que cada vez que me ves, me reclamas,  gritas o discutes conmigo. ¿Algún problema Shawn? 

Mi tono de voz empezaba a aumentar con cada palabra.

Shawn bufo por lo bajo, pero no cambio su posición dura y retadora. 

–Por ahora, ninguno James.

–Bien, si es todo, la puerta está justo ahí–.  Señale con el índice la puerta detrás de Shawn. Pero Shawn no se movió. 

–No, no es todo. Quiero tu puesto.

–¿Disculpa?

–Como oíste princesa, quiero ser el presidente estudiantil. 

–Pues las elecciones son en menos de un mes. Suerte con eso –. Solté una risa sarcástica. 

–No princesa,  te equivocas,  tu necesitas la suerte,  yo solo estoy jugando limpio, te estoy avisando que en tres semana te quitaré el puesto.

–Estas muy seguro de eso. ¿No? 

Shawm hizo una sonrisa de lado, se acercó aun mas al escritorio,  recargo uno de sus brazos en el y con el otro me tomó sutilmente por la nuca. Por una extraña razón me encontraba en estado vegetal. No tenía impulsos para moverme o resistirme.

Shawn jalo de mi hasta que sus labios quedaron a centímetros de mi oído derecho. 

–Créeme  princesa cuando te digo que si quiero algo, siempre consigo que sea mio. 

Shawm se separó de mi lentamente con el rostro completamente serio, mostraba una sincera severidad en sus palabras.

–Ahora, de acuerdo con el código estudiantil de Crown Collange, soy completamente libre de trabajar en esta oficina.

Shawn se dirigió a la esquina de la habitación, tomó una silla, la jalo hasta posicionarla a izquierda mía, se sentó en ella de lo más tranquilo del mundo.

–Será mejor que quites esa cara de asombro, me des mi parte del trabajo y hagas el tuyo. Yo no te reclamaré, gritaré o fastidiaré, si prometes hacer lo mismo–. Dijo con gran impotencia que empezaba a molestarme.

Kingdoms || Shawn Mendes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora