Inesperado amor

Capítulo 24

LP

Intenta escabullirse pero coloco mis dos manos sobre la ventana y la acorralo contra el frío cristal, mis brazos ahora son su jaula, de aquí no podrá escapar, me tendrá que escuchar sí o sí aunque no quiera.

Inspiro aire profundamente para tomar valor, llegó el momento de abrir mi corazón , llegó el momento de decírselo todo.

Estamos frente a frente, cara a cara, la tengo entre mis brazos justo como quería.

_Yo sé que me comporté como un idiota, que te jodió verme con ella... _Me interrumpe.

_No es sólo eso lo que me jodió, la besaste, te reíste de mí y luego te la follaste en el baño, ¿estoy loca si te digo que me sentí traicionada? Sé que no somos nada , hace muy poco que nos conocemos pero así me sentí, soy patética._ Baja la mirada y yo la tomo del mentón para que vuelva a mirarme a los ojos.

_No eres patética y te entiendo porque es justo así como me sentí cuando vi esas fotos, me sentí traicionado y también sentí que te estabas burlando de mí.

_¡Joder Laureano me voy a volver loca! Mi cabeza es un caos. _ Pego mi frente con la suya y cierro los ojos unos segundos para tratar de tranquilizar a mi loco corazón pero sentir su respiración sobre mis labios no ayuda para nada, al contrario empeora todo lo que siento y necesito que lo sepa.

_Meg mi vida es un caos desde el primer momento en que te vi, no puedo pensar en otra cosa, estás todo el tiempo en mi cabeza, mi corazón se vuelve loco cada vez que te veo o estás cerca, me asusta la intensidad de lo que me haces sentir, jamás viví algo parecido y se siente como si hubiera caído en una jodida adicción pero no quiero parar aunque esto que siento me lleve a la locura o acabe con el corazón roto no quiero que se termine. Necesito que me perdones por ser un idiota inmaduro, intente sacarte de mi cabeza de la peor manera y sólo fracasé porque no pude hacerlo, mientras estuve con ella no pude dejar de pensar en ti, eras tú en todo momento, no sé qué me está pasando, no puedo entenderlo Meg, ¿cómo se puede sentir tanto por alguien que acabas de conocer? Yo... _No puedo continuar de decir todo lo que siento porque Megan me interrumpe con un beso.

Un beso inocente que hace que mi mundo se tambalee, un simple y pequeño beso que desata un huracán de sensaciones en mi interior. La miro a los ojos con un cóctel de emociones que van desde amor hasta la más cruda lujuria. Ambas respiramos agitadamente porque el caos es compartido, las dos sentimos lo mismo.

Humdezco mis labios como si así pudiera sentir el sabor de los labios de Megan luego de ese fugaz beso pero necesito más. Coloco una de mis manos en su cintura y la otra en su mejilla y con mi pulgar acaricio su dulce boca. Me acerco peligrosamente pero espero...

_Necesito besarte Meg, ¿puedo?_ Ella asiente con su cabeza timidamente y es entonces cuando desato todas las ganas contenidas que tenía de volver a disfrutar de sus apasionados besos.

Inclino mi cabeza y junto nuestros labios y nos devoramos con ansias, hundo mi lengua profundamente para buscar la suya y ella al sentirme gime en mi boca y eso genera una gran descarga eléctrica de sensaciones que recorre todo mi cuerpo y sé que estoy perdida, perderé la razón por ella, se convertirá en mi perdición pero se siente tan bien que no quiero parar aunque luego cuando todo acabe me duela hasta el alma.

Termino el beso y no abro los ojos, necesito recuperar el aliento, me ha robado hasta el aire, este juego peligroso en el que he caído será el culpable de todas mis desgracias pero no puedo ni quiero detenerme.

_Meg, ¿qué me estás haciendo? _Susurro sobre sus labios para mi misma sin intención de que ella me escuche.

_ Tengo miedo Lau, tengo miedo de que me lastimes, siento como si hubiera algo invisible que me pide a gritos que me aleje de ti, que voy a salir lastimada, que voy a sufrir pero aunque lo intento no puedo, no sé qué me ocurre, le busco una explicación pero no la encuentro, jamás sentí algo parecido en mi vida y no sé qué hacer con esto que siento. _ Me sorprende su confesión y la entiendo porque yo también estoy aterrada, no sé qué ocurrirá cuando las mentiras se terminen, quizás el amor sea tan grande que pueda vencer a todo lo que se atraviece en nuestro camino.