St Claire: Internado para rebeldes

39.Confesiones romanticonas

Miré con tristeza como Alice y Chelsea hacían las maletas y me tiré encima de mi antigua cama. Todo me salía mal: estaba castigada sin la excursión de fin de curso que mágicamente había caído en el fin de semana de mi cumpleaños y el otro día no había sido capaz de decirle nada a Jordan el cual seguía sin dar señales de vida ante mi 

Lo había intentado, fui detrás de él, de verdad que sí pero con una mirada suya me paralizó y supe que esta vez quien necesitaba espacio era él y por  mucho que lo odiase y necesitara tirarme a sus brazos tenía que respetarlo. Aunque cuando yo se lo pedí lo ignorase por completo, dejándome en situaciones como la actual

El domingo pasado volví a intentar acercarme pero cada vez que yo hacía el ademán de aproximarme aunque fuese un metro en su dirección, se levantaba y huía a otro sitio y de verdad que la frustración que sentí es imposible de describir. Yo era la culpable y teniendo eso claro supuestamente esto iba a ser más fácil pero Jordan también debería entender mis dudas, no todos somos igual que él y tenemos su espontaneidad, necesitaba tiempo para pensar y sopesar todo, esto no son los cuentos donde la protagonista mágicamente dejándose guiar únicamente por sus impulsos acaba maravillosamente, esto es la realidad y un paso mal dado o sin pensar y la cagas y creo que soy la prueba viviente de ello.

Todos los actos que he llevado a acabo sin pensarlos bien, han acabado en catástrofe o mejor dicho en muchos castigos y ganarme la manía de muchos profesores aunque al menos esta vez y gracias al enfado de Abbey con mi tía, él también y por una vez salía perjudicado en toda esta situación 

Miré el móvil, tanteándome mentalmente mandarle un mensaje como los que le había mandado la semana pasada pero que había dejado en visto

Oí las risas de Chelsea y Alice al debatir sobre que pantalones llevarse y yo cogí el teléfono. ¿Podemos hablar?. Fui a mandarlo y lo borré mientras me mordía el labio, a lo mejor algo tipo ¿Podríamos quedar?, No, volví a borrarlo con frustración viendo los anteriores mensajes sin respuesta con frustración. 

Cuando levanté la mirada y vi que estaba en línea se me disparó el pulso y cuando vi que estaba escribiendo esperé con ansias. Pero debió de estar en el mismo conflicto que yo y el mensaje no llegó así que supuse que lo había borrado. Una vez más empezó a escribir pero el mensaje no llegó y se fue de línea mientras yo maldecía y tiraba el móvil a la cama de Chelsea intentando contener la rabia que intentaba salir en forma de llanto. 

Cogí un cojín, me lo puse en la cara y chillé con todas mis fuerzas mientras notaba como Alice y Chelsea se sentaban a mi lado en la cama intentando no tocarme por si las pegaba con la almohada o algo parecido

-Mia, no te tortures- empezó la primera 

-Estoy harta- lancé el cojín al otro lado de la habitación- no puedo más con esta mierda

-Tienes que tener paciencia-murmuró Chelsea mientras recogía lo que yo había tirado

-¡Lo he intentado todo y no lo soporto más! ¡Que le den a Jordan, si me quiere ignorar y no intentar escucharme pues vale, puedo vivir sin él!

Se miraron entre sí, soltaron un suspiro y Chelsea me cogió las manos- Te voy a dar un consejo y tú luego puedes cogerlo y tirarlo en tu papelera mental o hacerme caso, es decisión tuya pero déjame que te lo diga entero ¿vale?

-Pero...- fui a rechistar ,ella negó con la cabeza y yo suspiré mientras me encogía de hombros

-No has intentado todo, llevas un par de semanas llorando y pataleando por las esquinas mientras intentas acercarte un poquito...

-Yo no pataleo yo...

-Shh he dicho que no me interrumpas. Tienes que coger a Jordan del brazo, que te la sople si quiere o no y le dices "Jordan, me gustas" le comes la boca y fin

-Por alguna extraña razón me espera alguna reflexión profunda- bromeó Alice y Chelsea la tiró el cojín a la cara

-No puedo hacer eso, me ha pedido espacio

-Y también te ha dicho que le digas si sientes algo por él y creo que eso no se lo puedes decir por telepatía- siguió- Jordan no es un chico orgulloso que vaya a hacerse el difícil, seguramente en cuanto se lo digas sonreirá, te dirá que es recíproco y subiréis a hacerlo en la habitación, fin.

La miré confusa sin saber muy bien que decir 

-Lo que Chelsea quiere decir- intentó corregir Alice- es que no tengas miedo a confesarte y que tomes la iniciativo por que sería una pena que ambos desaprovecharais esto por una cuestión de no saber entenderos

Verme como la pareja de Jordan se me hacía tremendamente raro pero en estas semanas había aprendido a eliminar a nuestros padres de la ecuación de nuestra relación y eso me hacía sentirme completamente orgullosa de mi misma, una vez superado ese miedo irracional a cumplir sus deseos influido por el enfado inesperado de mi madre que acabaría en un castigo que cuando llegué a casa acataré muy contenta, por fin era libre de esa pequeña voz en mi cabeza que me empujaba a huir de él.

Cogí el móvil 

-¿Te ha respondido a algún mensaje?- preguntó Alice

-No y aunque he pensado muchas veces en ponerle directamente por aquí que me gusta no me parece una manera correcta

-Por su puesto que no- correspondió pero Chelsea me cogió el móvil

-Por-supuesto-que-sí- marcó cada palabra- no queremos tener una confesión romanticona e insulsa queremos que Jordan se vuelva a acercar a ti, a lo mejor si le pones un mensaje..

-Oh no, Chelsea Green dame el móvil- lo agarré mientras Chelsea divertida tiraba de él

-No, te juro que no le escribo nada 

-He dicho que no, dame el móvil

-Acabas de decir que te gusta, no pasa nada por escribírselo 

-Claro que me gusta pero no pienso ser tan cutre de ponérselo por mensaje- seguí forcejeando 

-Si no, no te vas a atrever nunca

-Claro que sí, por que no creo que aguante tanto sin tenerle cerca- me puse roja al decirlo y tiré una vez más fuerte hasta que yo me quedé con el móvil y Chelsea se calló  de culo en el suelo

Sonreí contenta por la victoria pero al ver la pantalla del móvil, me paralicé

-¡No, mierda, mierda!

-¿Qué pasa?- Alice miró la pantalla y se llevó una mano a la boca mientras yo le daba a reproducir el audio que acababa de mandar por error. Y ahí estaba yo, confesando todo y oírme desde fuera admitiéndolo se me seguía haciendo raro. 

Fui a borrarlo pero entonces caí en algo más, lo había escuchado y estaba escribiendo.

-¡Mierdaaaa!- grité

-Tranquilízate Mia, mira el lado positivo, mañana todo el colegio se va y tendréis más intimidad- dijo Chelsea y Alice la regañó con la mirada

Yo las ignoré, con los nervios de mi vida esperando al mensaje que nunca llegó. Cuando le vi salir de línea sin mandar nada volví a maldecir y tiré el móvil contra el suelo

-Bueno, pues Jordan ya sabe lo que siento ¿Contentas?- Alice y Chelsea se miraron entre ellas, rieron y asintieron

-Querida Mia, cuando volvamos de la maldita casa rural el lunes, te aseguro que tendrás muchas cosas que contarnos- bufé y al ver el reloj y darme cuenta de que eran las nueve me despedí y volví a mi habitación, pensando en que pasaría en los siguientes dos días

¡Hola a todos! ¿Qué tal la semana?. Vayamos por partes, lo primero ¿Quién no querría confesarse así? es una maravilla de inicio de una relación (sarcasmo) pero teniendo en cuenta su primer encuentro todo tiene sentido. Pues el panorama pinta genial, todos se van de excursión y tú te quedas sola y habiéndote pasado esto (Best fin de semana ever). En fin espero que os haya gustado mucho ¡Y nos vemos en el próximo capítulo!