Miré impaciente por la ventana esperando con ansias la llegada de Chelsea y Alice a la habitación mientras me mordía con nerviosismo una uña.
Mi capacidad de cagarla me sigue sorprendiendo pero por una vez yo no había tenido toda la culpa. Técnicamente todo había sido un malentendido y Jordan no había sido capaz de captar bien lo que yo quise decir.
Pero todo esto me hacía replantearme si lo nuestro tenía futuro, no éramos capaces de estar tranquilos sin dramas ni cinco minutos, en esos instantes en los que parecía que todo iba a salir bien de una vez por todas tenía que pasar algo que acabase con la paz y daba paso a un periodo de hostilidad que duraba mucho más que la reconciliación.
Me tapé la cara con la almohada y ahogué un grito de frustración. No había dormido en toda la noche pensando en lo que pasó la anterior y mis ojeras lo dejaban muy pero muy claro. Miré el teléfono con la vaga esperanza de que por alguna milagrosa casualidad me hubiera escrito pero nada.
Volví a mirar por la ventana y vi el autobús aparcado enfrente mientras las alumnas iban saliendo pero mi mirada se fue directa al St Paul y esperé a que se desarrollaran mis poderes de super visión y poder divisar a Jordan pero parece que los poderes no quisieron aparecer.
Desde luego soy idiota, viéndolo por perspectiva si que parecía lo que el interpretó pero en mi defensa diré que el muy cabezota no me dejó explicarme. Desde luego si alguna vez vuelve a hablarme y empezamos de cero tendremos que mejorar la comunicación o lo nuestro va a romper y volver cada dos días.
Iba a volver a entrar en depresión pero la puerta se abrió de golpe y como rápidas como un rayo y sin apenas dejar las maletas, Chelsea y Alice entraron corriendo y se tumbaron en mi cama
-A ver tienes tres segundos para contar todo lo que ha pasado o a Alice y a mi nos pegará un infarto así que ya estás desembuchando- dijo Chelsea quitándome la almohada y abrazándola.
-Ha sido una tontería pero no se lo ha tomado muy bien
-Adivino ¿Te pusiste borde?- preguntó Alice y yo negué
-¿Le pegaste?- siguió Chelsea y yo volví a negar
-¿Te echaste atrás por lo de sus malditos padres?
-¿Esto es un interrogatorio?- contraataqué
-Hasta que no sueltes lo que pasó sí pero acabas de terminar con todas nuestras teorías así que en este punto solo te toca hablar- Alice se quitó la mochila y se tumbó en su cama
Tragué saliva y suspiré- Nos acostamos
Chelsea y Alice se miraron entre ellas
-¡Ves...Ñam!- dijo la primera mientras yo la miraba confusa- ¿Mia y cual es el problema de eso? Se que la primera vez es confusa y seguro que piensas que no lo hiciste bien pero tranquila es normal, cuando cojas práctica...
Alcé una ceja y puse los ojos en blanco- Chelsea no ha sido mi primera vez y el problema no viene en eso
-Uy y quien ha sido tu primera vez pedazo de pillina, no nos lo has contado, estoy muy indignada yo...
-Chelsea...- le cortó Alice- déjala hablar
Le di una sonrisa de agradecimiento- Después me dio por pensar en West y lo que haría si me pillaba con él así por lo que le pedí que se marchase y...
-Ay dios no- murmuraron y yo asentí
-Le entiendo- contestó Chelsea- se pensó que le había usado, típico
-¿No te dejó explicarte?- preguntó Alice y yo recordé la escena mientras negaba
Me moví con pereza a su lado mientras me tocaba el pelo suavemente. Por fin todo iba bien y esta vez nada lo podría fastidiar a no ser que...Oí un pequeño ruido en la habitación de al lado y me incorporé de golpe
-Jordan- llamé su atención mientras la paranoia de que alguien pudiera pillarnos se apoderaba de mis nervios
-Mmm- murmuró medio dormido
-Deberías marcharte- abrió los ojos confuso y se incorporó
-¿Qué?
Pegué la oreja a la pared intentando notar movimiento- Que deberías irte- me arrepentí de haber sonado cortante pero los nervios iban en aumento
Resopló se puso en pie y empezó a vestirse- Después de todo lo que te he dicho y a ti te da igual, desde luego no vas a cambiar
-¿Qué estás insinuando?- susurré
-¿Te estás haciendo la tonta o qué Mia?
-¡No, lo que pasa es que no te entiendo!- me tapé la boca al notar que había chillado y Jordan soltó una risa cínica
-¿Que tu no me entiendes a mi? Yo a ti perfectamente, te he servido para echar un polvo y traerte la cena, ahora mis funciones han acabado y me tengo marchar, todo entendido- se dirigió a la puerta
-¡Eso no es verdad! No eres el único que se ha confesado hoy es solo que no quiero que nos pillen por que..-
-Dile tus excusas baratas a otro pero yo ya estoy harto de este tira y afloja- y en vez de salir por la ventana abrió la puerta y salió dando un portazo mientras yo hundía la cara en las sábanas
-Sinceramente entiendo su reacción, yo habría estado igual de enfadada
-No le juzgo pero mi duda existencial ¿Cómo cojones arreglo yo esto ahora?- ambas se miraron
-Deberías hablar con él e intentar explicárselo- dijo Alice
-Yo probaría a hacerle algo original como pegarle otra patada y...- le tiré un cojín y Chelsea rio- vale, vale ahora en serio. Jordan ha visto dañado su ego y sus sentimientos, yo esperaría un tiempo a que se le pasase y luego hablaría con él
-No estoy segura de que quiera seguir con esto, no conseguimos tener ni un minuto de paz y no sé si seré capaz de soportar peleas día si día también
-¿A ti él te gusta?- preguntó Chelsea
-Claro que sí- respondí mordiéndome el labio
-¿Mucho?- asentí y ella sonrió
-Pues no te preocupes por que en cuanto solucionéis esto, todo va a volver a la normalidad y tendréis una relación sana y estable, esto solo es un problema de comunicación
-Bueno- cambié de tema- ¿Me vais a contar ya que tal en la casa rural?
Alice sonrió y Chelsea hizo una mueca
-No hay mucho que contar
-¿Como que no?- respondió Alice- Patty y Howard se liaron detrás de un arbusto, un niño entró un día y....- ella siguió contando y yo me centré en Chelsea que se puso el pijama y se metió en la cama mientras yo supe que tendría que indagar en lo que había pasado
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St Claire: Internado para rebeldes
Teen FictionBienvenidas al St Claire un internado exclusivamente femenino para chicas rebeldes, quiero decir.....una escuela de señoritas. Señoritas como Mia Harrison a la que debido a su rebeldía, impulsividad e incapacidad de tener la boca cerrada ni un segun...