Aún te siento - Reylo

Inocencia perdida

Rey tardó unos segundos en volver a estar consiente. Su pecho subía y bajaba violentamente tratando de respirar. La sensación que tenía solo era comparable a la de haber probado un dulce.

Ben rio sonoramente mostrando sus dientes. Le causaba gracia la inocencia de Rey.

- vaya, jamás comparé el sexo con los dulces - se burló mientras recibía un golpe en su costilla.

- no es gracioso, Ben - Rey se acomodó sentándose frente a Ben y pareció algo avergonzada - solo... no tengo mucho con que compararlo - respondió tímida encogiendo el corazón del chico.

- eres adorable - soltó él acariciando su rostro con cariño acercándose para besarla.

- no soy una niña - ella hace a un lado su rostro evitando que sus labios se rocen.

- eso, cariño, me queda muy claro - habla Ben seductor tratando de calmar el enojo de la Jedi. Lo logra porque poco después ella lo besa con ansias - dime qué quieres - dice entrecortado por los besos pero Rey lo ignora y se sienta sobre él tomando la iniciativa.

Fue impulsiva por lo que sus intimidades chocaron con fuerza provocando un jadeo ahogado en ambos. Ben, perdiendo el control, llevo ambas manos a su trasero indicandole a Rey el ritmo que el gustaba sobre él y ella se dejó llevar a la vez que su dureza crecía.

Entre el beso, él llevó nuevamente sus dedos hasta su intimidad mojandolos por el fluido de Rey. Estaba demasiado mojada y aquello solo le llenó de orgullo. Con su mano libre llevando las caderas de ella mientras metía dos dedos de su otra mano dentro de ella.

- BEN - grito Rey al sentir la intromisión dentro de ella. Sus dedos eran largos y gruesos invadiendo su interior por completo. Ella dejó de moverse tratando de soportar el dolor que generó Ben pero sabía que aquello entre sus piernas era mucho más grande. Lo notaba por como su pantalón lo apretaba pidiendo liberarse. Ben beso su hombro y la llenó de caricias dulces tratando de calmarla. Pudo sentir su dolor gracias a su conexión pero Rey no nada indicios de querer terminar...solo de continuar.

Unos segundos pasó hasta que Ben sacó los dedos del interior de Rey y los volvió a meter con más fuerza mientras sentía que su chica clavaba con fuerza sus uñas en sus hombros. Repitió el acto cada vez más rápido y Rey gemia más alto.

- te gusta así? - gruñó Ben extasiado de verla tratando de ignorar la presión de su pantalon sobre su miembro. Rey asintió sin tener fuerzas para hablar - o quieres más? - acto seguido metió un dedo más dentro de ella y  clavando con fuerza sus dedos.

- Basta - rogó. Otra vez aquel sentimiento dónde no sabía lo que quería.  Para nada quería parar pero el placer le consumía todo el cuerpo de manera intensa.

- correte, cariño - susurro Ben en su oído y aceleró el movimiento de sus dedos al sentir las paredes internas de Rey contraerse - yo te sostendré - y como si aquello fuese un botón de activación su segundo orgasmo la sacudió de manera más intensa.

Ben la abrazó de la cintura pegándole a su pecho mientras ella seguía temblando y sintiendo algunos espasmos del placer. Con cariño quitaba algunos cabellos desordenados del rostro de su Jedi y esperaba a que su respiración de normalizara.

- aún sigues comparándolo con los dulces? - mencionó finalmente. Rey río con poca fuerza.

- no. Esto es mucho mejor

Ben iba a responder con otro comentario irónico pero una alteración en la fuerza lo distrajo. Era una fuente de luz muy grande, casi tanto como Rey.

Finn.

- oh mierda - gruñó Ben sobre la frente de Rey que lo miraba con pánico - acaso nunca te pueden dejar sola?

Se separaron inmediatamente tratando de vestirse lo más rápido posible y llegar a su nave para recibirlos. Rey ya sabía lo protector que era Finn con ella pero Poe era demasiado SOBREPROTECTOR. Si bien antes la ayudo a deshacerse de algunos chicos que la coqueteaban, Poe espantaba a casi todos de cualquier forma pero no quería que sucediese lo mismo con Ben.

Se vistieron y salieron de la guarida. No fue hasta abrir la puerta que sintieron el frío sobre sus sudorosos cuerpos.

Llegaron justo a tiempo hasta la pequeña nave que tenían para ver al Halcón Milenario aterrizar.

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DOS HORAS DESPUÉS

- no intimidas, Dameron. Pareces un bufón mendigo con el ceño fruncido y tú barba de una semana - habla Ben con burla sentado en uno de los cuartos de la nave de su padre.

Poe y Finn se habían encerrado con Ben. Necesitaban una charla con él muy dura sobre Rey, su intocable Rey.

- podrías ser su padre! - grita Finn y Solo arruga su frente incómodo.

- solo soy mayor que ella por 10 años. Poe va casi por los cuarenta y se mete con chicas de la edad de Rey - de excusa.

- tengo 34. Solo soy 4 años mayor que tú.

- ya pareces viejo

- no hablamos de mi. Hablamos de Rey. Por la fuerza, Ben!! Es una niña, apenas ha cumplido 20. Ni siquiera ha lidiado con chicos de su edad y tú pretendes .... - Poe golpea la puerta con su puño exasperado

- lo que "pretendo" con Rey es algo sincero. Todo lo que hago o sacrifico es por ella - le miró a Finn - lo sabes. Puedes sentirlo.

- es-tá-bi-en - gruñía Poe por lo bajo luego de hora y media de interrogatorio - pero te advierto que si ella llega a llorar por ti...

- no lo haré. Y no me amenaces, no causas miedo... deberías practicar eso.