El hermano rarito de mi novio - XiuHan / LuMin (Genderbend)

Parte 13

Al entrar en la universidad, el rostro de Minseok expresaba muchas cosas, pero no expresaba nada parecido a la felicidad. Su rostro era de descontento, de malestar, pero, de alguna manera, de fortaleza. Cualquiera que la viera y la conociera realmente, sabría que ese día, iba a ser muy interesante.

Cuando Baekhyun vio a su amiga, corrió hacia ella para hablar sobre lo que sucedió en la fiesta. Se disculpó por no poder ir hacia Minseok cuando sucedió, al estar retenida por su madre, y Minseok entendió perfectamente la posición de Baekhyun. Después de todo, lo que verdaderamente importaba era la intención, ¿No? Eso le habían dicho siempre.

Por supuesto, le relató a Baekhyun todo lo que sucedió una vez Luhan la sacó de la fiesta. Se lo dijo todo con los máximos detalles posibles, sin callar siquiera el apasionado beso que se dieron y lo muy cerca que estuvieron de acostarse juntos. Baekhyun gritó como loca, más de felicidad que por otra cosa. ¡Sabía que ese chico rarito sentía algo por su amiga!

Además, le dijo a Baekhyun lo que planeaba hacer hoy. Al decírselo, Baekhyun se quedó con la boca abierta por el atrevimiento que Minseok pensaba a tener, pero no se iba a perder el evento. Ella iba a ser una espectadora en primera fila para ver la cara de Changmin cuando Minseok le dijera esas palabras de la manera en que planeaba decírselas.

Oh, iba a ser muy divertido. Baekhyun tenía ganas de reírse a costa de quién consideraba un bueno para nada.

El resto del día, durante las clases, avanzó más o menos tranquilo. Minseok se mantuvo con sus amigas más cercanas – Baekhyun y Kyungsoo – y evitó todo lo posible a Changmin. Por supuesto, también le relató todo a Kyungsoo, la cual no acudió a esa fiesta – no tenía la posición adecuada para asistir -. Kyungsoo, siendo lo radical que era, contrario a Minseok, expresó lo que ella haría en una situación así: cortarle los testículos.

Minseok y Baekhyun sabían que ella era capaz de hacer algo así. Que dolor. Iugh.

Pero el momento que tenía que llegar, llegó. Como todo en esta vida, las cosas terminaban por llegar y ese momento no era para menos.

Fue a la hora de comer, a las doce del mediodía, cuando Minseok, junto a Baekhyun y Kyungsoo, se encontraron con Changmin y su grupo de amigos. Minseok no podía creer que su novio no se diera cuenta de que, todos los amigos que tenían, estaban ahí para ser populares y poder ser invitados a sitios. Mientras que ella supo ver quienes eran amigas y quienes eran conocidas, Changmin estaba tan centrado en su ego que no era capaz de saberlo.

Una pena.

-Vaya, Minseok, aquí estás -Saludó Changmin con total normalidad, como si en aquella fiesta no la hubiera dejado en ridículo.

Minseok no pudo evitar hacer una mueca de asco. Changmin estaba tan seguro de que no la perdería, que ya no se molestaba en respetarla delante de los demás, pero todo eso se acabó. Ella no era un florero, ni un objeto. Ella era una persona, con sentimientos, con manías y con sus defectos.

-Oye, Changmin, tengo que decirte una cosa -Dijo Minseok. Este la miró.

Baekhyun se puso una mano sobre la boca para no reír como la mala de una película. Estaban delante de todos, en la cafetería de la escuela. Minseok iba a dejar a Changmin delante de todos.

-Solo venía a decirte que te dejo, ya no quiero tener nada que ver contigo -Expresó, haciendo que todo el mundo se silenciara y mirara a la pareja más popular -Como novio das pena, sinceramente. Eres un niño en todos los sentidos y no eres capaz de complacer una mujer ni en la cama, ni fuera de ella. Eres guapo, pero ni siquiera sabes como tener sexo. -Dijo, humillándolo a él delante de todos -Si al menos me dieras orgasmos... pero ni eso sabes. Solo sirves para lucirte, y ya te he lucido suficiente. Ahora quiero algo más, alguien que me ame y me complazca, no un hombre que solo me sirve para tenerlo a mi lado y lucirlo.

-¡Eres una puta!

-Di lo que quieras. De hecho, he conocido a alguien más, es un hombre encantador y él si sabe tratarme fuera de la cama, pero me queda saber como es en esta. Te dejo para poder follármelo, a ver si tengo suerte -Dijo, sonriendo cual perra. Minseok sabía ser una auténtica zorra -Por lo menos yo he tenido la decencia de dejarte antes de irme con otro...

Sonriente, se marchó de allí moviendo las caderas, orgullosa de sí misma. A su lado, Baekhyun y Kyungsoo se marchaban entre risas, porque todo el mundo estaba hablando del tema y las chicas miraban con asco a Changmin, mientras que los chicos se burlaban porque era malo en la cama.

El karma estaba haciendo su trabajo.

Pero en el fondo, Minseok tuvo miedo. Una vez estuvo lejos, sus piernas temblaron y se apoyó en una pared, respirando profundamente para poder tranquilizar su agitado corazón.

Lo hizo.

-Lo hice... -Murmuró -Por fin soy libre...

-Estoy orgullosa de ti -Le dijo Kyungsoo -Yo le habría dado, después, una patada en sus partes, pero a parte de ese detalle, estoy muy orgullosa de lo que has hecho.

-Sí, por fin has dejado a ese asqueroso y ahora, Minseok, tienes un hombre esperando por ti. Ese chico sí es lo que tú mereces, estoy segurísima, así que vete de aquí, ve a por él, y nosotras te cubrimos.

-¡¿Qué?! ¡¿Ahora?!

-¿Cuándo sino? -Cuestionó Kyungsoo -Viven los dos en la misma casa, Minseok, y hoy Changmin no tiene entreno. Es mejor que vayas ahora para no encontrártelo en casa.

-Bien... ¡Gracias, chicas!

Minseok salió corriendo de la universidad, alegando que estaba enferma, y se subió al primer autobús que vio que llevaba a la zona dónde ella quería ir. En veinte minutos, se bajó y corrió como nunca por las calles, a pesar de llevar tacones. Logró encontrar la casa y picó, desesperada, el timbre, intentando recuperar la respiración mientras esperaba a que alguien abriera la puerta.

-¡Ya voy! -La voz de Luhan se hizo escuchar. -¿Minseok?

Minseok y Luhan se miraron a los ojos, cara a cara, y, de repente, Minseok saltó sobre los brazos de Luhan, el cual la abrazó confundido.

-¡Lo dejé! ¡Dejé a Changmin! -Gritó -¡Dejé a Changmin delante de toda la universidad!

-¡¿Qué has hecho qué?! -Luhan la separó, entre risas y sorpresas -Joder, Minseok, eres realmente una mala perra cuando quieres.

-Él me humilló primero...

-Lo sé, lo sé.

La hizo entrar a casa y subieron a su habitación. Como era por la mañana, había estado trabajando, pero algo le decía que tendría que dejar el trabajo por la tarde. En la habitación, fue Minseok la que cerró la puerta y miró a Luhan con una sonrisa. Puso el pestillo, ante la atenta mirada del hacker, y se acercó a él.

-¿Ahora podemos salir juntos?

-Ahora soy todo tuyo, Minseok -Le susurró, sujetándola de la cintura y acercándola a su cuerpo -Te amo. Te amo muchísimo.

-Yo también te amo, Lu Ge.

Entre besos apasionados, cuales dos amantes escondidos y deseosos de reencontrar sus cuerpos, acabaron sobre la cama del mayor, el cual se colocó sobre el cuerpo de Minseok mientras los besos eran más apasionados, más largos, más húmedos. Sus manos comenzaban a moverse por sus cuerpos, en busca de más contacto.

-Luhan... ¿Terminamos lo que dejamos sin hacer en el coche?