Parte 14

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La repentina propuesta de Minseok, entre besos y caricias, solo provocó que Luhan se excitara más y la empujara contra la cama de nuevo, dándole el que podría ser el beso de su vida. Minseok no necesitó más respuesta que ese beso para entender que Luhan realmente deseaba aquello, quizás, tanto como ella, o incluso más.

Sus labios se movieron con pasión, con fuerza. Minseok se vio acariciando la espalda de Luhan, sujetando con mucha fuerza la camiseta que este llevaba en ese mismo instante. Entre jadeos, se la quitó, tirándola al suelo, dejándola en el olvido, y se situó sobre el mayor, sonriendo.

-Lu Ge... -Murmuró -Te amo...

-Yo también te amo, hermosa -Le dijo, agarrándola del trasero y acercándola más a su cuerpo. -Pienso hacerte gritar...

Minseok se lanzó a besarle, callándolo en el acto. Sus cuerpos se siguieron moviendo, rozándose entre jadeos, sonrisas, besos y alguna que otra risa discreta que se escapaba entre ellos.

Luhan la volvió a colocar debajo de su cuerpo y besó su cuello, metiendo una de sus manos debajo de la camisa elegante que Minseok llevaba. Su mano acarició uno de los pechos de la ex novia de su hermano, por encima del sostén que llevaba, a la par que dejaba marcas en su cuello.

Ahora, Minseok era su pareja. Era suya.

Por supuesto, le quitó la camisa, dejándola a un lado de la cama, y bajó por sus hombros, besando cada rastro de piel, hasta sus pechos. Oh, esos pechos grandes y bonitos, blanditos y blanquecinos. Deliciosos. No dudó en sacarlos de aquel sostén del diablo, sin llegar a quitarlo, y tampoco dudó en besarlos lentamente, dedicándose tiempo a ella, a adorar su cuerpo cual templo sagrado.

-Luhan... -Susurró -Lu...

-Shh... -Dijo, dándole un lametón al pezón derecho -Disfruta de esto...

-Ya lo hago -Rió -Me encanta...

Luhan sonrió orgulloso y continuó con sus besos y lamidas. Pero no pudo evitar subir de nuevo hasta sus deliciosos labios, los cuales sabían a néctar de dioses. Se sentía que podría obsesionarse con el sabor de sus labios.

Entre besos, Minseok tomó la posición de arriba, tomando así las riendas por el momento. Luhan se dejó guiar, dejándole la batuta por unos instantes para así observar la tigresa que se suponía era en la cama. Si todo lo que presumía Changmin era cierto, ella olvidaría que era una señorita.

Y lo olvidó.

Ronroneando, besó el cuello de Luhan y fue bajando poco a poco hasta llegar hasta sus pantalones. Miró al chico, sonriente, y le desabrochó con cuidado botón de sus pantalones, así como bajó la cremallera. Entre los dos, bajaron aquella prenda de ropa hasta sacarla, junto a los bóxers, y Minseok tomó el erecto miembro del chico, el cual le sonrió permitiéndole hacer lo que ella quisiera.

Minseok comenzó, entonces, a mover su mano lentamente, contemplando el miembro de quien era ahora su novio. Miró a sus ojos, con confianza, y sacando su lengua, lamió la extensión desde la base hasta la punta con lentitud, acostumbrándolo a aquella sensación caliente. Luhan solo logró a gruñir de placer, medio sonriente, y a echar su cabeza hacia atrás, disfrutando de aquello.

Le encantaba lo que ella hacía ahí abajo, y eso que acababan de comenzar.

Minseok rodeó el glande con su lengua, lamiéndolo extensamente, y volvió a bajar por su tronco duro y grueso. Lo repitió un par de veces, acompañando el movimiento con sus manos, hasta bajar a sus testículos. No dudó en lamerlos un poco y en meter uno dentro de su boca, con mucho cuidado, y succionar.

Oh. Joder.

-Minseok... -Murmuró Luhan -Joder, sigue...

Y siguió. Claro que lo hizo.

No dudó en meter la punta del miembro en su boca, succionando poco a poco, y comenzó a meterlo dentro. Quizás Luhan no fuera la gran cosa ahí abajo, pero le encantaba lo que tenía y no dudaba que supiera usarlo. Claro que cualquiera podría saber usarlo mejor que Changmin.

Entonces, sin romper el contacto directo de ojos, comenzó a mover su cabeza de arriba abajo por toda a extensión durante varios minutos. Su cabeza era sostenida por Luhan, el cual agarraba con fuerza sus cabellos entre gruñidos y gemidos masculinos de placer que mostraban lo bien que lo estaba haciendo.

Luhan no dudaba, en absoluto, de las habilidades de Minseok, pero realmente estaba superando sus expectativas.

-Minseok... Minseok, túmbate, preciosa...

Minseok paró y asintió. Se terminó de desnudar y se tumbó en la cama, dejándole a Luhan el trabajo. Este la besó apasionadamente, besó sus pechos y bajó poco a poco y entre besos hasta su entrepierna. Minseok no pudo evitar ponerse un poco nerviosa, puesto que pocas veces había tenido a Changmin ahí, con su cabeza entre sus piernas, como si a este le diera cosa dar sexo oral a una mujer.

Pero Luhan bajaba ahí sin pudor alguno.

Los dedos del '' rarito '' se movieron por sus muslos, a la par que su boca los besaba, y se acercaron a su entrepierna, acariciándola. De lejos se notaba lo excitada que estaba ella, sobre todo al tocar, notándola húmeda. Luhan no dudó, tampoco, en acercar sus labios a esa zona y en besarla, antes de utilizar su lengua para hacerla gritar.

-¡Oh, Lu Ge!

Bien, eso era bueno.

Luhan movió su lengua por su clítoris, sonriente, perverso, sabiendo lo que le estaba provocando. Ser un pervertido oculto entre tantos mangas Hentai pervertidos y el visualizar tanto porno tendría que servir de algo, sobre todo porque también se informaba mucho de las cosas. Ya en su tiempo se informó para satisfacer a la que fue su primer novia, y desde entonces, la experiencia hizo el resto.

Todo lo que Minseok estaba sintiendo era increíblemente diferente. Nada se podía comparar a cuando lo hacía con Changmin, porque con este no sintió ni la mitad de las cosas que estaba sintiendo con Luhan, el cual no dudaba en querer atenderla.

-¡Oh, Lu! ¡Lu!

Sus gritos eran demasiado altos, tanto que Luhan se preguntó porque, entonces, nunca la escuchó gemir cuando esta lo hacía con su hermano. Prefirió no especular sobre las dotes de Changmin en la cama – no le interesaban – y la llevó a un orgasmo enorme, que la hizo llorar de placer a la par que arqueaba su espalda. Luhan no dudó en seguir hasta que ella paro de temblar.

-¿Qué opinas de esto, eh?

-Solo... solo... Wow...

Riendo, Luhan se colocó sobre ella y la besó, sabiendo que no había terminado, porque una mujer podía tener muchos orgasmos seguidos si se sabía estimularla. Con unos cuantos besos y caricias, ella estaba preparada para ser penetrada, y así pasó. Por supuesto, antes se puso un preservativo. La protección ante todo.

No dudó en comenzar a embestir contra ella con dureza, entre besos, jadeos y gruñidos de placer por parte de él, gritos por parte de ella. Abrazados, sin poder evitar el contacto físico entre ellos, movió sus caderas contra su cuerpo. Una, otra, y otra, y otra.

Minseok arañó su espalda, entre gritos, abrazada por completo al hermano de su ex novio. En todo el acto estaba sumado el plus de lo prohibido, porque él era el hermano de quien fuera su ex novio, y ella era la ex novia de su hermano. No deberían de poder hacer esto.

En medio de la pasión, Minseok se colocó arriba, sobre Luhan, y comenzó a saltar con rapidez y desesperación. Luhan sujetó las caderas de Minseok, apretando sus glúteos, y se movió él desde abajo, embisténdola. Verla gritar por sus acciones, roja ante la placentera acción que sucedía, sus pechos saltando al ritmo enloquecidos y su cuerpo sudar, era un cuadro que debería de ser conservado para la posteridad.

Una pena que se quedaría, para siempre, en su mente, porque no pensaba soltarla. La amaba.

Al final, ella alcanzó un segundo orgasmo entre gritos y él, finalmente, llegó al orgasmo también, quedándose los dos totalmente exhaustos.

Minseok se tumbó sobre Luhan, intentando recuperar la respiración, y sonrió al '' rarito ''.

-Eres espectacular...

-No más que tú, mi vida; no más que tú.

El hermano rarito de mi novio - XiuHan / LuMin (Genderbend)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora