Parte 18 sin título

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Perdí la cuenta de los días que llevábamos andando en busca del Nexo pero volver al campamento no era una opción, sin embargo comenzábamos a quedarnos sin alimentos.

Con suerte encontrábamos algo de comida en las casas por las que pasábamos, pero no estaba seguro de si iba a ser suficiente comida para lo que nos quedaba de viaje.

Paramos nuevamente en unas en ruinas y encendimos un fuego para calentar algo de comida para el frío que comenzaba a hacer.

Celx comenzó a comer y me ofreció, se lo rechacé ya que podía estar sin comer varios días, pero después de insistir mucho consiguió que me tomase una cucharada de aquella sopa.

A la hora de dormir yo estaba sentado recostando mi espalda sobre un muro y en mi hombro derecho estaba apoyando su cabeza el contrario, durmiendo tranquilamente, arropado con una manta.

Pasaban las horas y miraba el exterior por el hueco que había en el cuarto en el que nos encontrábamos. Veía algunos Rastrors 1.0 deambular de un lado para otro y algún que otro grupo de 2.0 yendo de una zona a otra.

De repente mi compañero se movió aún dormido y su cabeza iba a darse contra el suelo. Pude deternerle antes de que sucediera y coloqué su cabeza sobre mis piernas.

Entonces comencé a pensar en el momento que me hice amigo de Celx. Cómo fue que alguien hizo que lo considerara mi amigo.

Cuando me di cuenta, estaba acariciando su pelo mientras dormía. Aparté rápidamente la mano y decidí despertar al castaño para seguir con la travesía.

Se levantó un poco alterado y sorprendido por ver que tenía su cabeza apoyada en mis piernas pero no le hice gran caso y recogí mis cosas.

Salimos y nada más poner un pie fuera del lugar seguro en el que estábamos, nos tocó salir corriendo y ponernos a luchar. Numerosos Rastrors 2.0 se fijaron en nosotros y saltaron al combate y un 3.0 se activó, cargando su láser al segundo siguiente.

Corrimos, peleamos y llegamos a una torre de comunicación, o eso fue lo que me dijo Celx. En la cima pudimos ver que el número de aquellos enemigos que nos ralentizaban era mayor. Cada vez había más así que llegamos a la hipótesis de que nos estábamos acercando al Nexo.

Mi amigo se alegró bastante para que después su cara pasara a una de puro terror.

Celx: ¡¡¡Zeta, estás sangrando mucho!!!

No me fije pero tenía un corte profundo en uno de mis costados. Rápidamente sacó el kit de primeros auxilios que llevábamos con nosotros.

Zeta: No me había dado cuenta.

Vi como la sangre brotaba de la herida y de repente todo me dio vueltas. Mi mano se multiplicó y estaba a punto de perder el equilibrio. Por suerte pude agarrarme a una barandilla para no caerme y Celx me ayudó a tumbarme en el suelo.

Me quitó la camiseta, secó la sangre, curó la herida y me vendó el pecho. No recuerdo muy bien que pasó después porque todo me daba vueltas, pero juraría haber visto como mi amigo miraba y acariciaba mi pecho y mi abdomen.

Tras esto dormí un rato y cuando desperté Celx no estaba. Ahora estábamos en un apartamento, al parecer me debía haber cargado hasta allí. Me preocupé al no ver a mi amigo y fui a buscarle, entonces escuché su voz proveniendo de un pasillo.

Celx: Ah... Ahhh... ¡Ah!

Según me acercaba oí claramente aquellos jadeos y gemidos de mi amigo, podiendo escuchar entre ellos como susurraba mi nombre.

No se había dado cuenta del eco que hacía el pasillo y cuando me asomé le vi sentado en el suelo masturbándose. Aún no había notado mi presencia así que no se preocupó en seguir moviendo su mano alrededor de su miembro, subiendo y bajando, dejando salir de su glande aquel líquido blanco sobre el suelo.

Volví sin hacer ruido para que no se percatara de que había visto aquello y cuando llegué junto a mis cosas agarré mi camiseta para ponérmela.

Al rato llegó el varón, sonriente y alegre al verme despierto, regándome después y diciéndome que debía tener más cuidado.

Sin más que decir continuamos y recorrimos una gran distancia llegando a vislumbrar a lo lejos una tenue luz morada; el Nexo estaba a muy poca distancia.

Alegres comenzamos a charlar comentando que haríamos al llegar y como es que sería todo allí, hasta que una trampa nos sorprendió.

Tras atravesar un edificio, en la puerta para salir, activó unas ballestas que había de frente. Celx fue el responsable de abrir la puerta así que las flechas iban dirigidas a él.

Celx: ¡¡AHHHHHHHHHHHH!!

Pude ver como disparaban a tiempo y me aparté junto al de pelo castaño, pero no evité que una de las flechas impactara en la pierna de mi compañero.

Decidí que deberíamos movernos a un lugar seguro y así fue. Llegamos a la habitación de uno de los pisos del edificio y puse a Celx sentado en el suelo contra la pared.

Para mi sorpresa estaba aguantando bien el dolor. Vi la flecha y lo bueno es que no había perforado mucho. Saqué el kit de emergencias y le miré a los ojos.

Zeta: Voy a retirar la flecha, así que aguanta un poco.

Él asintió y como dije tiré de la flecha, sacándola de la pierna. La expresión de Celx era de un gran dolor, pero aguantó muy bien. Le acabé quitando el pantalón aunque se negó muchas veces y curé la herida, pasando después a vendarle la pierna. Hice el tratamiento suavemente y ninguno de los dos dijo nada, pero al momento de acabar el contrario se acabó dando cuenta de la erección que tenía. Se tapó entonces la entrepierna, pero le aparté las manos y saqué su duro miembro por el hueco que tenía su ropa interior, dejándole completamente sorprendido.

Zeta: Deja que te ayude con esto.

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⏰ Última actualización: Jun 09, 2020 ⏰

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