SUGA [Él Sabía Con Quién Ser Dulce] (MinYoonGi)

Capítulo 2

Los días pasaban y me acostumbraba a conversar con él al volver a casa. No quería admitir que me agradaba demasiado, y la verdad es que, a pesar de ser una persona bastante abierta no me sentía lista para esto que ocurría. Mi ego me cegaba y no quería admitir que "DatingWho" se había convertido en una prioridad ahora que tenía a alguien con quien pudiese compartir por ahí. El feeling era innegable, existía química, nos entendíamos. Y yo creo que existen tres cosas que son difíciles de encontrar: el amor, la honestidad y los mutuos acuerdos. No todos los días encuentras a alguien con quien te lleves muy bien. Y no todos los días aparece alguien así en tu vida.

Sin embargo, a veces nosotros mismos nos negamos a las oportunidades. O quizás, tememos a las oportunidades porque conllevan a nuevos comienzos, sentimos miedo de lo nuevo porque no sabemos que nos depara...

"Siguiente pregunta..." —SoftKitty.

"¿Pero por qué no quieres responder eso? Invado tu impenetrable guarida de los secretos." —BlueSky

"Fíjate que a Batman lo descubrieron por no seguir mis consejos." —SoftKitty.

"¿Y dices no tener humor? Vaya que no sabes mentir..." —BlueSky.

"Tengo un humor negro que espanta a todos. Menos a ti." —SoftKitty.

"Tú solo eres un gilipollas más..." —BlueSky.

"Venga, no te voy a decir mi puto nombre. Digas lo que digas" —SoftKitty.

"¿Un apodo?" —BlueSky.

"No." —SoftKitty.

"¿Un seudónimo?" —BlueSky.

"NO." —SoftKitty.

"¿Algo?" —BlueSky.

"¿Tienes novio?" —SoftKitty.

"Ehhh. No." —BlueSky.

"Ya veo porqué..."—SoftKitty.

"¡Venga!" —BlueSky.

"Yo iré primero, mi familia y amigos me dicen Gyeohulie. ¿Ves? Es fácil, ahora tu turno" —BlueSky.

"¿No te rendirás jamás?" —SoftKitty.

"¿Eres así de parlanchina?" —SoftKitty.

"No. Y sí." —BlueSky.

"Suga..."—SoftKitty.

Era divertido hacerle preguntas personales porque lo hacían molestar y eso por alguna razón extraña me causaba diversión. Lo podía catalogar como uno de mis fetiches, pero solo lo hacía con personas altamente irritables.

La noche apenas comenzaba. El día que más conversamos duramos hasta las dos de la madrugada. Ese día tenía que trabajar temprano pero la emoción no me dejaba dormir. A mis 23 años volvía a parecer una niñata adolescente que se emocionaba por unos mensajitos en el teléfono. Ni cuando tuve esa edad viví tal emoción, pues el chico que me gustó era mi mejor amigo. La relación era diferente a esta.

"Siguiente pregunta." —BlueSky.

"¿Eres coreano?" —BlueSky.

"¿Qué clase de pregunta es esa? Es como si preguntaras si mis ojos son rasgados." —SoftKitty.

"Obvio. Soy coreano." —SoftKitty.

"¿Obvio para quién? Sería obvio si te estuviera viendo." —BlueSky.