Capítulo 22: "Le leyenda de la Llorona"

16 1 0
                                    

Salimos del volcán, Nahuani nos despidió junto con Ahuilizapan que había descendido y posado en el hombro de su amiga, bajamos por el elevador y caminamos para llegar a la camioneta.

—¿Vamos a descansar? —preguntó Ray.

—Por supuesto —dijo el padre de Gaspar.

Subimos a la camioneta y regresamos a su casa, nos acomodamos en el suelo con colchonetas y todo lo que pudimos encontrar en las mochilas y quedamos profundamente dormidos teniendo en cuenta que despertariamos demasiado temprano para no toparnos con un tráfico infernal.

Todavía estaba muy muy oscuro cuando nos levantamos, el padre de Gaspar le dio las llaves y le dijo unas cosas en la cocina, no escuché nada.

Salimos de la casa, el padre de Gaspar ayudó a abrir el portón y nos despidió, el chico parecía bastante triste, ocultaba su rostro cada vez que alguien quería verle la cara.

—Estará bien —quise que no sonara forzado.

—Él lo estará —dijo—. Tiene la bendición de mi padre.

—¿Entonces por qué estás así? —preguntó Santi.

—Porque no sé si yo lo vaya a estar.

Y nos sumergimos en un silencio sepulcral.

Me hubiera gustado decirle que estaba siendo negativo, que la misión no era tan difícil, que no fuera dramático. Pero no, algo dentro de mí me decía que la misión era de las más difíciles a las que nos íbamos a enfrentar, no luchariamos solo con un dios menor, no, eran dos dioses importantes y todos sus hijos de los vicios. La misión no era fácil, además, ¿en qué momento contactaremos con Tonatiuh? Sí, creo que esa pregunta era más importante.

—¿En qué momento vamos a ver a Tonatiuh? —pregunté.

Vi cómo Payne (en forma mortal) tensaba los músculos debajo de su camisa, nos miró uno por uno, Michelle nos miró por el retrovisor.

—Hace mucho que no vemos a Tonatiuh —dijo.

Sentí que el mundo se desmoronaba. Miré a mi grupo, parecían igual de inquietos.

—¿Qué? —fue lo único que pudo decir Emanuel.

—Verán —comenzó a decir Payne—. Últimamente hay dioses que no dan la cara en persona, eso pasó con Tonatiuh. A menos que considere una emergencia su caso, él se hará presente, o que nos ayuden a salvar Cempoala. Eso creo que llamará su atención.

—¿Me estás diciendo que el dios del sol es un egoísta egocéntrico? —espetó Jaden.

—Bueno, se parece a nuestros dioses —dijo Ray con toda la razón.

—¿Y dónde vamos a contactarlo? —pregunté.

—Podemos intentarlo en Cempoala —dijo Payne—. Es un lugar de sacrificios para el dios Quetzalcóatl, pero si tenemos fe, podemos hacer un sacrificio a Tonatiuh y así podrá escucharlos.

No me reconfortó para nada.

Volvimos a quedar en silencio.

Salimos de la ciudad, cuando íbamos a tomar el camino por la pista nos detuvimos, a lo lejos se distinguía una fila enorme de autos detenidos, otros llegaban atrás silbando pero se detenían al ver que no conseguirían que el de adelante se moviera.

—Un embotellamiento —maldije.

—Por la federal —dijo Gaspar.

Hizo una maniobra al volante y continuó para llegar a Ixtaczoquitlán, un poblado con un gran reloj de piedra, era lo único realmente llamativo porque no había nada más. Continuamos con el cielo oscuro y la luna paseándose como la cazadora que era. ¿Quién sería la diosa lunar de los aztecas?

LOS CAZADORES II: "LA PROFECÍA AZTECA" ~Fanfic de Percy Jackson~ (1er Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora