Capítulo: 32 "Sangre, aves y pérdida"

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¿Recuerdas que había comenzado ésta aventura con entusiasmo y desesperación? Pues me hubiera gustado volver al pasado para abofetear a mi yo del pasado por tan estúpida ignorancia.

El bastón de Mayahuel seguía sin tocar el suelo y la bolsa de tripas se balanceaba de un lado a otro, mi idea era lanzar una flecha para arrebatar la bolsa, pero sabía que no funcionaría.

—Buen intento, chicos.

Mayahuel golpeó el suelo y los conejos saltaron, las flechas pasaron zumbando, piedras golpearon a los villanos, varios cayeron muertos.

Por nuestra parte, Payne, Rodrigo, Gaspar y yo corrimos a través del caos para encarar a los dioses que miraban con una gran sonrisa su caótica creación.

—Tony, Gaspar, vayan contra Patécatl —dijo Payne—. Rodrigo y yo nos encargaremos de Mayahuel.

No esperaron a que me quejara, salieron corriendo directo con la diosa. Rodrigo dio el primer golpe pero ella lo detuvo con su bastón, Payne lanzó otro pero apareció un escudo en la mano de la diosa, un hermoso escudo con el símbolo del maguey grabado. Qué envidia que los dioses tuvieran esas habilidades.

Corrí con Gaspar hasta Patécatl, él nos miró sin preocuparse. El chico desollado lanzó el primer golpe con su lanza, el dios lo detuvo pero sin tanta elegancia como su amada.

Continuamos lanzando golpes a diestra y siniestra mientras el Tézcatl llovía por todos lados. Ya quedaban menos conejos y eso era bastante gratificante, poco a poco las expresiones de los dioses se volvieron duras y rencorosas, ellos sabían que no podrían detener golpes para siempre, así que comenzaron a atacar.

Patécatl embistió nuestros golpes y nos lanzó para atrás, el maguey de su bastón resplandeció y de madera de transformó en obsidiana filosa, apoyó el bastón y cerró los ojos, su penacho comenzó a crecer, el hueso que atravesaba su nariz se movía de un modo asqueroso, una capa comenzó a materializarse en su espalda. Abrió los ojos.

—Es hora.

Lanzó un golpe al suelo, entendí lo que ocurriría y Gaspar igual, saltamos a lados opuestos justo a tiempo ya que dos hojas de maguey perforaban la tierra en el lugar que estábamos. Tomé una flecha y la lancé, él creó una hoja para protegerse y la devolvió al suelo. Comenzamos a correr mientras hojas de maguey intentaban atravesarnos, me di cuenta que Rodrigo y Payne pasaban por la misma humillación. 

Seguí lanzando flechas pero nada ocurría, entonces Gaspar comenzó a sonar su sonaja, sus costuras resplandecieron y una mazorca de obsidiana apareció en el suelo atravesando el pie del dios, éste dejó de crear sus hojas y cayó para ver su pie que sangraba icor, aproveché para lanzar una flecha que atravesó su mano, él gritó de dolor.

—Malditos.

Omar llegó a detrás de nosotros no sin antes acabar con dos conejos con sus raíces de espinas, o como se llamen. Miró al dios sangrante.

—Bastante sencillo —dijo.

Gaspar lo fulminó con la mirada.

—Nada sencillo.

El chico cayó de rodillas apoyado en su lanza, había gastado sus fuerzas. Omar sonrió, parecía que había planeado algo así desde hacía mucho, varias raíces con espinas (o como se llamen) salieron del suelo y comenzaron a cubrir al dios mientras gritaba por ser perforado cientos de veces, las raíces comenzaron a tragarlo hasta desaparecer en el suelo. Lo único que quedó del dios fue su bastón con el maguey tallado en madera.

Quería descansar después de la corta pelea con Patécatl, a veces siento que es decepcionante el modo en que termina una lucha, a veces es del modo más simple y hasta patético para los villanos. Pero creo que así es todo esto, morimos de un modo tan simple y patético sin nada que hacer para detenerlo.

LOS CAZADORES II: "LA PROFECÍA AZTECA" ~Fanfic de Percy Jackson~ (1er Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora