ɴᴏ ᴍᴇ ᴍᴜᴇʀᴅᴀꜱ || ᴊɪᴍꜱᴜ [ OMEGAVERSE +21 ]

29.

La noche comenzó bien.

El cachorro estaba en su nido improvisado. Las velas se habían apagado. Las cortinas se abrieron sobre la ventana que daba al sol naciente, y Jimin se había quedado dormido como lo hacía habitualmente.

No sabía qué parte de la noche —o día— era cuando lo habían sacudido para despertarlo.

No había habido un ruido que lo alertara, pero tardó unos minutos en recordar que tenía un omega enfermo en el pasillo y un niño pequeño en su cama. Una vez que su visión se ajustó a la oscuridad, miró por encima del hombro y al instante se encontró con grandes ojos verdes que lo miraban con una espera y una expresión casi paciente.

Su boca se abrió, preparado para pronunciar un confundido "YoonGi" mientras su corazón le cruzaba las costillas, pero luego cerró la mandíbula.

Se olvidó preguntar cómo se llamaba el cachorro y más importante aún, había salido de su cuna para posarse lo más cerca posible al lado de Jimin, y tampoco para llorar, hacer pucheros o gruñir. Solo para mirarlo fijamente.

—Wh ...

Frotándose los ojos para poder dejar de entrecerrar los ojos, Jimin rodó completamente sobre su otro lado para enfrentarlo. También retrocedió hacia el borde de la cama para darse un poco de espacio personal.

—¿Estuviste despierto todo este tiempo?— preguntó a regañadientes, ya que no había signos de haber dormido. Aunque había baba, pero eso parecía ser una constante—... solo ... ¿mirándome?

El cachorro ni siquiera parpadeó.

—¿Por qué parece que he pasado por esto antes?— gruñó y empujó hacia atrás su flequillo revuelto —... ¿tienes hambre? ¿Sediento? ¿Te duelen las encías? Estoy muy seguro de que no te cagaste encima — El cachorro bostezó, lo que significaba que finalmente cerró cerro los ojos de búhos, y luego chasqueó los labios una vez que regresara a su tarea de observar a Jimin.—¿Bien? Ve a dormir entonces..

Pero no se movió.

—...Bien.

Jimin se levantó, levantó al pequeño vigilante nocturno y lo colocó nuevamente en el centro de su nido, donde se negó absolutamente a ponerse de espaldas y luchó por mantenerse en pie.

Cuando él colocó su mano sobre su torso para mantenerlo abajo, se retorció y se agitó hasta que finalmente dejó de apretar los dientes. Si incluso amenazaba con derramar lágrimas, Jimin estaba seguro de que YoonGi estaría en su garganta antes de poder tomar su próximo aliento.

El cachorro giró sobre su estómago antes de que pudiera sentarse de nuevo. Echó un vistazo a su cuna de piel y algodón antes de inclinar la cabeza hacia atrás para encontrarse con Jimin nuevamente, con un ligero puchero y un gesto de su frente. De alguna manera, y por alguna razón, el cachorro parecía confundido.

¿Tal vez quería ... un abrazo?

Incluso Jimin no rechazó el encanto de un cuerpo cálido cuando uno está ocupando el lado generalmente vacío de su cama.

Escépticamente, cayó de costado y levantó los brazos, haciendo señas al cachorro con las manos. Incluso dándole un toque tranquilizador en el brazo para que supiera que podría derrumbarse sobre él en cualquier momento.