Día: tres semanas, cuatro días después del atentado.
Lugar: Ninguno en concreto.
Parte: No establecida.
¡M.. Manuel! – fue que podía pronunciar el de lentes mientras un suave vaivén lograba hacer que este se perdiera en uno de los más exquisitos placeres, aquel nombre que cualquiera se aprendería con sólo escucharlo de aquel chico, chico que se aferraba a la espalda del de cabellos naranjas mientras enterrada sus uñas en esta, aquel placer era su más grande adicción y por la tanto su mayor perdición.
Manuel aumentaba el ritmo con el cual profanaba a su más adorado tesoro, amaba la forma en la cual este gemía y pedía por más, amaba como aquel chico de lentes movía su cadera y el como este se perdía en el más exquisito placer, sintiéndose aún más orgulloso por ser el quien provocase aquello, Manuel juraba que los gemidos de Miguel podían escucharse por toda la extensión de dicha mansión y como no bastaba en sólo pensarlo, el mismo había hecho suyo al de lentes varias ocasiones en todas y cada una de las habitaciones de aquel lugar, sin importar si alguien les veía o escuchaba, pues bien empleado o servidumbre que se metiese en su camino era desaparecido y reemplazado.
Miguel enredaba sus delicados dedos en aquel cabello anaranjado tirando un poco de este y cerrando sus ojos sintiendo a su amado tomarlo completamente, por otra parte Manuel recorría el esbelto cuerpo de su amante pasando la llena de sus dedos por todas y cada una de las marcas hechas por el, besando y mordiendo toda parte blanquecina sin marcar, recorriendo con su lengua cada centímetro de aquel exquisito cuerpo el cual amaba, el sexo siembre venía después de cada pelea, eso era una realidad de la cual ninguno podía escapar, pero ¿para qué mentirse? Ambos sabían que era el mejor, era salvaje, desenfrenado y sin medida, podían pasar días sin salir del cuarto y solo paraban para comer y beber, aquello era un círculo vicioso no muy sano, lo sabían pero no les importaba en lo más mínimo.
M.. Manuel c-creo que – No le dio tiempo a terminar aquella frase Manuel sabía perfectamente lo que su novio quería decir, simplemente aumentó la velocidad apretando la cadera de aquel chico, mordiendo su labio para no ser el primero en terminar logrando su cometido pues aquel chico debajo de el, el cual había convertido en un completo desastre arquero la espalda dejando salir un gemido bastante alto logrando manchar el abdomen del mismo, segundos después sucedió lo mismo con Manuel pero en este caso el había terminado dentro de su amado y así ambos se recostaron abrazándose y cerrando de una vez por todas sus ojos para entregarse a los brazos de Morfeo.
Por otra parte se encontraba Rubén saliendo de la ducha después de haber preparado el desayuno pues hoy tendría que terminar el papeleo restante para asistir a aquella universidad a la cual estaría yendo en conjunto a Samuel, que si bien aún no le agradaba del todo, no podía quejarse pues había demostrado ser un excelente anfitrión con todas las de la ley, obviamente sin contar aquellos incidentes en donde el moreno se pasaba de chulo únicamente logrando que el albino se pusiese nervioso y con un casi ataque cardíaco por la gran cantidad de emociones que este podía provocar en el en un solo segundo.
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𝓐𝚃𝙴𝙽𝚃𝙰𝙳𝙾 - 𝕽𝑢𝑏𝑒𝑔𝑒𝑡𝑡𝑎 - (En Proceso)
Misteri / ThrillerLa Universidad a la que asiste Rubén ha sido objetivo de un atentado por dos alumnos de la misma, sinembargo Rubén logra escapar mientras es perseguido por los perpetuadores de dicho acto.. ¿Que le deparará el destino de ahora en adelante a nuestro...