Las Bestias [NamJin] PAUSADA

Encuentro...

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Ya habían pasado meses desde el asesinato de toda su familia, las investigaciones seguían pero no encontraban nada, supuestamente no daban con los culpables, solo se hacían estúpidos ellos mismos, claro que tenían sospechas, los únicos que querían a su padre muerto eran los malditos mafiosos con máscara de honrados a los cuales había estado investigando desde siempre, esos ricos y de buenas familias que creían tener todo a sus pies, era más que evidente que ellos eran los culpables, pero debía obtener pruebas y las autoridades no hacían nada para conseguirlas, ya había dejado que se encargará la ley, pero al parecer no cumplieron con la promesa de castigar a los culpables, él en verdad había considerado la opción de hacer las cosas por el camino correcto pero todo fue inútil, su paciencia ya había expirado, ahora el mismo se haría cargo de los infelices que destruyeron su vida. Tal vez tomar los archivos de su padre pero era el único modo de obtener información de los sospechosos, y así fue, ahí en esos papeles encontró a los siete más destacados, al parecer el oficial Kim los ha estado vigilando hace mucho y si tenían varios aspectos que los ponían fuera de lo legal.

Se llevó todo el material a su casa y lo oculto en el cuarto secreto que su padre había hecho para cualquier inconveniente o peligro, no estaba a la vista de nadie, estaba detrás de un librero y se habría con una contraseña especial, desde ese momento el lugar se hizo suyo, ahí el podría continuar con sus propias pistas de la investigación, no necesitaba de la policía, la justicia no existe, todo está lleno de corruptos que por dinero le venden su alma a cualquiera.

Los siete sospechosos:
El dueño del casino.
La joyera.
Un comerciante.
Un senador.
Un comandante.
Una millonaria de buena familia.
Un cafetero.

En el expediente de su padre podía leerse "Las Bestias", era claro que aquellas personas eran unos monstruos, el peor de todos parecía se el dueño del casino, pero no debía confiarse, aún podría encontrar más sospechosos. En ese momento escucha el timbre resonar por toda la casa, la persona que lo ayudaría ya estaba aquí, con calma salió del lugar secreto y llegó hasta la puerta para al abrir encontrarse con el rostro conocido de su ahora mejor amigo.

--- Hola Jin --- dijo el chico con una linda sonrisa que abultaba sus mejillas.

--- Hola JiMin, por favor pasa --- el menor entro al conocido lugar, ya había estado ahí varias veces consolando a su pobre amigo que sufría de crisis nerviosas de vez en cuando por todo lo que había pasado, lo comprendía, en verdad sentía su dolor, por eso decidió ayudarle en todo, tal vez hacer justicia por mano propia no era lo correcto pero quién diablos lo hacía en estos tiempos, además era por una buena razón, el quería que SeokJin volviera a ser el mismo de antes, que superará su dolor y fuera feliz, tal vez de eso dependía hacer justicia, así que estaría a su lado en esto también.

--- Te mostraré un lugar secreto, solo tú y yo sabremos de él --- el menor asintió ante las palabras del pelinegro, lo siguió hasta el lugar y entraron juntos, después pudo observar todos los expedientes perfectamente ordenados en la mesa, la verdad Jin parecía un buen detective, mira que conseguir tanto en poco tiempo.

--- Wow hyung, tienes el don de tu padre --- dijo JiMin con admiración y asombro.

--- Claro que no, mi padre era el mejor, yo sólo estoy trabajando con lo que el dejo --- toma entre sus manos el expediente de Kim HyunJoong, el dueño del Black Swan, un casino con pinta elegante y legal que guarda muchos secretos.

--- Qué vas a hacer --- pregunta el menor.

--- Ya se donde empezar mi búsqueda, iré al casino y conseguiré pistas muevas --- la seguridad en su voz era contundente.