Memorias • Lizkook

O3 장

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Estaba más que obvio que a él no le agradó para nada el hecho de volver a verme; pero yo estaba tan sorprendido por haberme encontrado con él de repente que ni siquiera era capaz de contestarle tan mal como él me habló anteriormente.

Definitivamente él estaba más adulto porque por supuesto que los años pasan para todos. Pero vestía de traje y su auto era... muy lujoso.

-Te hice una pregunta. -parpadeé varias veces, dejando de lado mis pensamientos.

-Yo tampoco puedo creer que te estoy viendo.

-Pensé que te habías borrado para siempre... -y no sé por qué, sentí que él hubiera deseado que yo no hubiera vuelto.

-Para siempre es un tiempo muy largo, no te parece?

-Te fuiste como si nada, hiciste sufrir a la persona que yo más amo y después solo apareces? Hubiera sido mejor que te quedaras donde estabas.

-Tú no puedes decirme a mi qué hacer.

-Digo lo que todo el mundo va a pensar cuando lo sepa.

-Yo no vengo acá por ti, ni por... ella... -suspiré. -Vine por mi familia.

-Me alegro. Pero ahora tienes que hacer otra cosa; pagar el arreglo de mi auto.

-Fue un accidente.. además...

-No puedes culparme de nada, porque el que se desvió y chocó mi auto fuiste tú.

-Disculpame.. -murmuré. -Tenía la cabeza en otro lado..

-Deberías dejar de conducir, porque por culpa de tener la cabeza en otro lado puedes lastimar a mucha gente.

No sé si lo dijo en ese sentido, pero yo sentí que se estaba refiriendo específicamente al accidente que tuvimos Lisa y yo hacía años atrás.

Yo todavía no terminaba de quitarme la culpa de encima, por mucho que mi familia y amigos habían intentando convencerme de que no había sido por mi culpa; y de algún modo, que lo "mencionara" aunque sea indirectamente, no hizo más que despertar esa horrible y antigua sensación de culpa.

-Te voy a pagar el daño que le causé a tu auto. Pero tú, deja de meterte en lo que no te importa.

-¿Perdón? No sé de qué estás hablando..

-No te hagas el distraído, sabes perfectamente de qué estoy hablando.

-Mientras no me molestes a mi, ni a mi familia.. todo bien.

-¿Familia?

Entonces el celular de él comenzó a sonar y me hizo una seña con la mano para que lo esperara para seguir hablando.

Yo me quedé donde estaba, sacando mis conclusiones sobre la palabra "familia" que él había utilizado. Algo dentro mio me dijo que yo estaba muy relacionado con esa familia.

Mi intención no era escuchar su conversación ni mucho menos, pero la nombró y... ¿cómo no escuchar? ¿cómo debía hacer para ignorar eso?

-Lisa, mi amor, estoy un poco retrasado, me surgió un problema. Si, sé que te dije que volvía temprano y de hecho estaba por ir, pero... No te enojes por favor, no te estoy mintiendo. Mira, cuando vaya a casa y veas el terrible golpe que tiene mi auto me vas a creer... Si, estoy bien no te preocupes. Cuídense los dos, nos vemos pronto.

Me quedé mirándolo, sorprendido otra vez, y fue demasiado evidente que había estado parando la oreja.
Él guardó el celular, mientras me sostenía la mirada.