Memorias • Lizkook

O7 장

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« L I S A »

Mi uñas estaban clavadas en el brazo de Jennie, pero ni siquiera le puse atención a eso en un primer momento.
Me odiaba a mi misma por ser tan débil cuando se trataba de Jungkook. Cuando lo veía me ponía estúpida y me llenaba de nervios. ¿Por qué? Se suponía que no era más que un recuerdo, una etapa cerrada.

Quizás porque no lo era.

-Estaba persiguiendo a Sunnie porque se fue corriendo. -la voz de Tae me sacó de mis pensamientos.

-Sunhee! Cuántas veces te dije que no hagas eso? Es muy peligroso, puedes perderte.

-Perdón mamá... -la pequeña murmuró, con timidez.

-¿Vamos chicas?-preguntó Taehyung mirándonos.

-Si, por favor.

Era demasiado obvio que me quería ir corriendo si era posible; lo más lejos de Jungkook.

Él no hacía más que mirarme y mirarme, y su mirada seguía siendo igual de pesada que lo fue siempre para mi. Y cuando pensé que había pasado lo peor y ya podíamos irnos, vino algo más.
La madre de Jungkook dió un paso al frente y me tomó del brazo sin que yo me lo esperara en absoluto.

-¿Tú eres Lalisa, no?

-Si.. -murmuré. Hola señora Jeon...

-Hacía mucho no te veía, estás enorme, y que hermosa pancita.. pensar que ese podía ser mi nieto..

-Ah, es que me mudé cuando me casé..

-¿Te casaste? Wow, cuántas cosas pasaron..

Eso era tan incómodo. ¿A qué ser humano se le ocurre mencionar algo como "ese podría ser mi nieto"? ¿A quién por Dios?

Miré a Jennie pidiéndole auxilio a gritos con la mirada, y ella, después de tantos años de amistad, lo captó al instante.

-Disculpe señora, pero nos tenemos que ir...

-Ah si si, bueno, nos vemos en algún otro momento.. -me tomó de las mejillas y me dió un beso. -Nos vemos Lalisa, estás hermosa, te felicito..

-Gracias.. de verdad muchas gracias...

Ni siquiera miré a Jungkook, pero podía deducir que estaba igual de rojo que yo después de todo lo que dijo su mamá sin ningún tipo de pudor.

Caminé con mis dos amigos y mi preciosa ahijada hacia la caja para pagar los productos que habíamos comprado; todavía sintiendo la mirada de Jungkook sobre mi. Al parecer, no me lo iba a sacar nunca de la cabeza, y la verdad, era insoportable.

Terminamos de pagar todo, y caminamos hacia el auto; y como se lo imaginan, no me dejaron cargar ninguna bolsa.

-Que loco esto no?, no pensé que volvería a ver al chico este...

-Tae, sabes que es un tema para tomar con pinzas. -respondió Jennie mirándolo.

-¿Lo dice por ti? -me miró.

-Supongo..

-Pero si se supone que es un tema del pasado. -ERROR.

-No es tan fácil. -murmuré.

-No es necesario que la pobre chica tenga que estar explicando, amor.

-Es que me confunden. Las mujeres son raras. -la voz de Sunhee lo interrumpió.