The Courtship Of Harry Potter - Diana Williams (dkwilliams)

Capítulo 15.- Cambiando Las Reglas

Snape se detuvo al pie de las escaleras. Aunque la necesidad de retirarse a sus habitaciones para lamerse las heridas y trazar nuevas estrategias era fuerte, primero tenía que cumplir sus deberes. Los Slytherins que regresaban a casa durante la semana tenían que ser enviados para que no perdieran el tren. Los que quedaban atrás tenían que estar aterrorizados a una pulgada de sus vidas para que no le dieran problemas durante el descanso. Y quería ver a Draco antes de que el chico se fuera a casa, para ver si había escuchado los consejos de Snape.

Entró en la Casa Slytherin y se sorprendió al descubrir que no estaba en el estado habitual de caos de partida. La razón parecía ser porque su instigador principal estaba de pie en la sala común, con los brazos cruzados, mirando a los miembros de la Casa reunidos.

—Muy bien, todos ustedes vayan al tren. No quieren que los Gryffindors obtengan los mejores asientos, ¿verdad? Crabbe, Goyle, traigan a los de atrás y asegúrese de que ninguno de ellos vuelva corriendo por un pañuelo de bolsillo o algún tipo de basura. Usen la fuerza, si es necesario—Hubo una estampida general hacia la puerta y Snape rápidamente se apartó del camino—El resto de ustedes escuchen. No quiero ningún problema de ustedes esta semana. A cualquiera de ustedes se le quitarán puntos y tendrán que responderme, así que no los atrapen. Si no lo hacen, tengo suficiente para mantenerles ocupados, siempre puedo encontrar algo para que hagan. Como limpiar el piso de la sala común con sus cepillos de dientes—Draco miró y vio a Snape apoyado contra el manto, con los brazos cruzados, luego se volvió hacia sus compañeros de casa—váyanse todos, entonces—.

Snape levantó una ceja cuando los Slytherin se dispersaron—Impresionante—.

Draco le sonrió de lado—Aprendí del mejor—.

—Tenía la impresión de que tu padre te esperaba en casa para el descanso—.

Draco se encogió de hombros—Mi padre probablemente está quemando todo lo que tengo ahora. Rechacé la oferta que quería que tomara—Explicó—Anoche envió una lechuza diciéndome que he sido desheredado—.

Snape miró a Draco de cerca. El joven no parecía estar afligido; de hecho, había un poco de una mirada de gato en la crema sobre él—Draco, ¿qué has hecho? —Preguntó con suspicacia.

En respuesta, Draco hizo un gesto hacia las escaleras. Snape se giró y frunció el ceño cuando reconoció al joven que bajaba por ellos, incluso con el inusual peinado y aretes.

—Sr. Weasley, ¿qué demonios está haciendo aquí? —.

Bill Weasley sonrió—Hola, profesor. Es bueno verle de nuevo—A Draco le dijo—Gracias por dejarme usar tu ducha. La arena entra por todas partes—.

Draco sonrió de lado—No querría eso, ¿verdad? —.

Snape se cruzó de brazos y los fulminó con la mirada—No ha respondido mi pregunta—.

—Ofreció por mí y acepté—Dijo Draco suavemente, pero Snape pudo ver el brillo travieso en sus ojos.

—¿Él qué? —.

La sonrisa de Bill se ensanchó y pasó un brazo casual por los hombros de Draco—Ron me ha estado contando historias sobre este diablillo durante años. Pensé que sería un natural para romper maldiciones—Volvió su rostro sonriente hacia Draco—Darle la oportunidad de usar sus poderes para el Bien, por así decirlo—.

Snape le dio a Draco una mirada atónita, y Draco se encogió de hombros—Parecía divertido. Además, mi padre siempre me dijo que siguiera el dinero. Bill trabaja para Gringotts, y yo también trabajaré para ellos—.

—¿Trabajando para ellos? En cincuenta años, todos estarán trabajando para ti—Dijo Snape secamente.

Draco sonrió con aire de suficiencia—Menos, o no soy un Malfoy. Además, no puedo esperar a ver la cara de Ron Weasley cuando aparezca con Bill en la próxima reunión familiar Weasley—.